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NHM001001 Palabras de Nehemías, hijo de Jakalías. En el mes de Kisléu, el año veinte del rey Artajerjes, estando yo en la ciudadela de Susa, NHM001002 Jananí, uno de mis hermanos, llegó con algunos hombres venidos de Judá. Yo les pregunté por los judíos - el Resto que se había salvado del cautiverio - y por Jerusalén. NHM001003 Me respondieron: «Los restos del cautiverio que han quedado allí en la provincia se encuentran en gran estrechez y confusión. La muralla de Jerusalén está llena de brechas, y sus puertas incendiadas.» NHM001004 Al oír estas palabras me senté y me puse a llorar; permanecí en duelo algunos días ayunando y orando ante el Dios del cielo. NHM001005 Y dije: «Ah, Yahveh, Dios del cielo, tú, el Dios grande y temible, que guardas la alianza y el amor a los que te aman y observan tus mandamientos; NHM001006 estén atentos tus oídos y abiertos tus ojos para escuchar la oración de tu siervo, que yo hago ahora en tu presencia día y noche, por los hijos de Israel, tus siervos, confesando los pecados que los hijos de Israel hemos cometido contra ti; ¡yo mismo y la casa de mi padre hemos pecado! NHM001007 Hemos obrado muy mal contigo, no observando los mandamientos, los preceptos y las normas que tú habías prescrito a Moisés tu siervo. NHM001008 Pero acuérdate de la palabra que confiaste a Moisés tu siervo: “Si sois infieles, yo os dispersaré entre los pueblos; NHM001009 pero si, volviéndoos a mí guardáis mis mandamientos y los ponéis en práctica, aunque vuestros desterrados estuvieron en los confines de los cielos, yo los reuniré de allí y los conduciré de nuevo al Lugar que he elegido para morada de mi Nombre.” NHM001010 Aquí tienes a tus siervos y a tu pueblo que tú has rescatado con tu gran poder y tu fuerte mano. NHM001011 ¡Ea, Señor, estén atentos tus oídos a la oración de tu siervo, a la oración de tus servidores, que desean venerar tu Nombre! Concede ahora, te suplico, gracia a tu siervo y haz que encuentre favor ante ese hombre.» Era yo entonces copero del rey. NHM002001 En el mes de Nisán, el año veinte del rey Artajerjes, siendo yo encargado del vino, tomé vino y se lo ofrecí al rey. Anteriormente nunca había estado yo triste. NHM002002 Me dijo, pues, el rey: «¿Por qué ese semblante tan triste? Tú, enfermo no estás. ¿Acaso tienes alguna preocupación en el corazón?» Yo quedé muy turbado, NHM002003 y dije al rey: «¡Viva por siempre el rey! ¿Cómo no ha de estar triste mi semblante, cuando la ciudad donde están las tumbas de mis padres está en ruinas, y sus puertas devoradas por el fuego?» NHM002004 Replicóme el rey: «¿Qué deseas, pues?» Invoqué al Dios del cielo, NHM002005 y respondí al rey: «Si le place al rey y estás satisfecho de tu siervo, envíame a Judá, a la ciudad de las tumbas de mis padres, para que yo la reconstruya.» NHM002006 El rey me preguntó, estando la reina sentada a su lado: «¿Cuánto durará tu viaje? ¿Cuándo volverás?» Yo le fijé un plazo que pareció aceptable al rey, y él me envió. NHM002007 Añadí al rey: «Si le place al rey, que se me den cartas para los gobernadores de Transeufratina, para que me faciliten el camino hasta Judá; NHM002008 y asimismo una carta para Asaf, el encargado de los parques reales, para que me proporcione madera de construcción para las puertas de la ciudadela del Templo, la muralla de la ciudad y la casa en que yo me he de instalar.» El rey me lo concedió, pues la mano bondadosa de mi Dios estaba conmigo. NHM002009 Me dirigí, pues, a los gobernadores de Transeufratina y les entregué las cartas del rey. El rey me había hecho escoltar por oficiales del ejército y gente de a caballo. NHM002010 Al enterarse de ello Samballat el joronita y Tobías el servidor ammonita, les sentó muy mal que alguien viniera a procurar el bienestar de los israelitas. NHM002011 Llegué a Jerusalén y me quedé allí tres días. NHM002012 Luego me levanté de noche con unos pocos hombres, sin comunicar a nadie lo que mi Dios me había inspirado que hiciera por Jerusalén, y sin llevar conmigo más que la cabalgadura en que iba montado. NHM002013 Saliendo, pues, de noche por la puerta del Valle, me dirigí hacia la Fuente del Dragón y hacia la puerta del Muladar: inspeccioné la muralla de Jerusalén por donde tenía brechas, y las puertas que habían sido devoradas por el fuego. NHM002014 Continué luego hacia la puerta de la Fuente y la alberca del Rey, pero no había paso para mi cabalgadura. NHM002015 Volví a subir, pues, de noche, por el Torrente, inspeccionando la muralla, y volví a entrar por la puerta del Valle. Así regresé a casa. NHM002016 Los consejeros no supieron dónde había ido ni lo que había hecho. Hasta entonces no había dicho nada a los judíos: ni a los sacerdotes ni a los notables ni a los consejeros ni a los funcionarios; NHM002017 entonces les dije: «Vosotros mismos veis la triste situación en que nos encontramos, pues Jerusalén está en ruinas, y sus puertas devoradas por el fuego. Vamos a reconstruir la muralla de Jerusalén, y no seremos más objeto de escarnio.» NHM002018 Y les referí cómo la mano bondadosa de mi Dios había estado conmigo, y les relaté también las palabras que el rey me había dicho. Ellos dijeron: «¡Levantémonos y construyamos!» Y se afianzaron en su buen propósito. NHM002019 Al enterarse de ello Samballat el joronita, Tobías el siervo ammonita y Guésem el árabe, se burlaron de nosotros y vinieron a decirnos: «¿Qué hacéis? ¿Es que os habéis rebelado contra el rey?» NHM002020 Yo les respondí: «El Dios del cielo nos hará triunfar. Nosotros sus siervos, vamos a ponernos a la obra. En cuanto a vosotros, no tenéis parte ni derecho ni recuerdo en Jerusalén.» NHM003001 El sumo sacerdote Elyasib y sus hermanos los sacerdotes se encargaron de construir la puerta de las Ovejas: la armaron, fijaron sus hojas, barras y goznes, y continuaron hasta la torre de los Cien y hasta la torre de Jananel. NHM003002 Al lado de ellos construyeron los de Jericó; a su lado construyó Zakkur, hijo de Imrí. NHM003003 Los hijos de Hassenáa construyeron la puerta de los Peces: la armaron y fijaron sus hojas, barras y goznes. NHM003004 A su lado reparó Meremot, hijo de Urías, hijo de Haqcós; a continuación reparó Mesullam, hijo de Berekías, hijo de Mesezabel; a su lado reparó Sadoq, hijo de Baaná. NHM003005 Junto a él repararon los de Técoa, pero sus notables se negaron a poner su cuello al servicio de sus señores. NHM003006 La puerta del Barrio nuevo la repararon Yoyadá, hijo de Paséaj, y Mesullam, hijo de Besodías: la armaron y fijaron sus hojas, barras y goznes. NHM003007 A continuación de éstos repararon Melatías de Gabaón y Yadón de Meronot, así como los de Gabaón y de Mispá, a expensas del gobernador de Transeufratina. NHM003008 A su lado reparó Uzziel, miembro del gremio de los orfebres, y a continuación reparó Jananías, del gremio de los perfumistas: ellos reconstruyeron Jerusalén hasta el muro de la Plaza. NHM003009 A continuación reparó Refaías, hijo de Jur, jefe de la mitad del distrito de Jerusalén. NHM003010 A continuación reparó Yedaías, hijo de Harumaf, delante de su casa; a continuación reparó Jattús, hijo de Hasabneías. NHM003011 Malkiyías, hijo de Jarim, y Jassub, hijo de Pajat Moab, repararon la parte siguiente, hasta la torre de los Hornos. NHM003012 A continuación de éstos reparó, con sus hijos, Sallum, hijo de Hallojés, jefe de la mitad del distrito de Jerusalén. NHM003013 Repararon la puerta del Valle, Hanún y los habitantes de Zanóaj: la construyeron, fijaron sus hojas, barras y goznes, e hicieron mil codos de muro, hasta la puerta del Muladar. NHM003014 La puerta del Muladar la reparó Malkiyías, hijo de Rekab, jefe del distrito de Bet Hakkérem, con sus hijos: fijó sus hojas, barras y goznes. NHM003015 La puerta de la Fuente la reparó Sallum, hijo de Kol Jozé, jefe del distrito de Mispá: la construyó, la cubrió y fijó sus hojas, barras y goznes. También restauró el muro de la alberca del canal, que está junto al huerto del rey, hasta las escaleras que bajan de la Ciudad de David. NHM003016 Después de él Nehemías, hijo de Aztuq, jefe de la mitad del distrito de Bet Sur, reparó hasta enfrente de las tumbas de David, hasta la alberca artificial y hasta la Casa de los Valientes. NHM003017 A continuación repararon los levitas: Rejum, hijo de Baní; a su lado reparó Jasabías, jefe de la mitad del distrito de Queilá, en su distrito; NHM003018 a continuación repararon sus hermanos: Binnuy, hijo de Jenadad, jefe de la mitad del distrito de Queilá; NHM003019 a continuación Ezer, hijo de Josué, jefe de Mispá, reparó otra sección frente a la subida del Arsenal del Angulo. NHM003020 Después de él Baruc, hijo de Zabbay, reparó otro sector, desde el Angulo hasta la puerta de la casa del sumo sacerdote Elyasib. NHM003021 Después de él Meremot, hijo de Urías, hijo de Haqcós, reparó otro sector, desde la puerta de la casa de Elyasib hasta el término de la misma. NHM003022 Después de él prosiguieron la reparación los sacerdotes que habitaban en la Vega. NHM003023 Repararon a continuación Benjamín y Jassub frente a sus casas. Después de ellos Azarías, hijo de Maaseías, hijo de Ananías, reparó junto a su casa. NHM003024 Después de él Binnuy, hijo de Jenadad, reparó otra sección, desde la casa de Azarías hasta el Angulo y la esquina. NHM003025 A continuación Palal, hijo de Uzay, reparó enfrente del Angulo y de la torre en saliente de la casa del rey, la de arriba que da al patio de la cárcel. Después de él Pedaías, hijo de Parós, reparó NHM003026 hasta la puerta de las Aguas hacia Oriente y hasta delante de la torre en saliente. NHM003027 A continuación los de Técoa repararon otro sector frente a la torre grande en saliente hasta el muro del Ofel. NHM003028 Desde la puerta de los Caballos repararon los sacerdotes, cada uno frente a su casa. NHM003029 Después de ellos reparó Sadoq, hijo de Immer, frente a su casa. Después de él reparó Semaías, hijo de Sekanías, encargado de la puerta Oriental. NHM003030 Después de él, Jananías, hijo de Selemías, y Janún, sexto hijo de Salaf, repararon otro sector. A continuación reparó Mesullam, hijo de Berekías, frente a su vivienda. NHM003031 Después de él Malkiyías, del gremio de los orfebres, reparó hasta la casa de los donados y de los comerciantes, frente a la puerta de la Inspección, hasta la cámara alta del ángulo. NHM003032 Y entre la cámara alta del ángulo y la puerta de las Ovejas, repararon los orfebres y los comerciantes. NHM004001 (TEXTO OMITIDO) NHM004002 (TEXTO OMITIDO) NHM004003 (TEXTO OMITIDO) NHM004004 (TEXTO OMITIDO) NHM004005 (TEXTO OMITIDO) NHM004006 (TEXTO OMITIDO) NHM004007 Cuando Samballat, Tobías, los árabes, los ammonitas y los asdoditas se enteraron de que la reparación de la muralla de Jerusalén adelantaba - pues las brechas comenzaban a taparse - se enfurecieron mucho; NHM004008 y se conjuraron todos a una para venir a atacar a Jerusalén y a humillarme a mí. NHM004009 Pero invocamos a nuestro Dios y montamos guardia contra ellos de día y de noche. NHM004010 Judá decía: «¡Flaquean las fuerzas de los cargadores: hay demasiado escombro; nosotros no podemos reconstruir la muralla!» NHM004011 Y nuestros enemigos decían: «¡Antes que se enteren o se den cuenta, iremos contra ellos, y los mataremos y pararemos la obra!» NHM004012 Pero algunos judíos que vivían junto a ellos vinieron a advertirnos por diez veces: «Vienen contra nosotros desde todos los lugares que habitan.» NHM004013 Se apostó, pues, el pueblo en los puntos más bajos, detrás de la muralla y en los lugares descubiertos, y coloqué a la gente por familias, cada uno con sus espadas, sus lanzas y sus arcos. NHM004014 Al ver su miedo, me levanté y dije a los notables, a los consejeros y al resto del pueblo: «¡No les tengáis miedo; acordaos del Señor, grande y terrible, y combatid por vuestros hermanos, vuestros hijos y vuestras hijas, vuestras mujeres y vuestras casas!» NHM004015 Cuando nuestros enemigos supieron que estábamos advertidos y que Dios había desbaratado sus planes, se retiraron, y todos nosotros volvimos a la muralla, cada cual a su trabajo. NHM004016 Pero desde aquel día, sólo la mitad de mis hombres tomaban parte en el trabajo; la otra mitad, provistos de lanzas, escudos, arcos y corazas, se mantenía detrás de toda la casa de Judá NHM004017 que construía la muralla. También los cargadores estaban armados: con una mano cuidaba cada uno de su trabajo, con la otra empuñaba el arma. NHM004018 Cada uno de los constructores tenía ceñida a la cintura su espada mientras trabajaba. Había un corneta junto a mí para sonar el cuerno. NHM004019 Dije a los notables, a los consejeros y al resto del pueblo: «La obra es importante y extensa, y nosotros estamos diseminados a lo largo de la muralla, lejos unos de otros: NHM004020 corred a reuniros con nosotros al lugar donde oigáis el sonido del cuerno, y nuestro Dios combatirá por nosotros.» NHM004021 Así organizábamos el trabajo desde el despuntar del alba hasta que salían las estrellas. NHM004022 Dije también entonces al pueblo: «Todos pasarán la noche en Jerusalén con sus criados, y así haremos guardia de noche y trabajaremos de día.» NHM004023 Pero ni yo ni mis hermanos ni mis gentes mi los hombres de guardia que me seguían nos quitábamos la ropa; todos nosotros teníamos el arma en la mano. NHM005001 Un gran clamor se suscitó entre la gente del pueblo y sus mujeres contra sus hermanos judíos. NHM005002 Había quienes decían: «Nosotros tenemos que dar en prenda nuestros hijos y nuestras hijas para obtener grano con que comer y vivir.» NHM005003 Había otros que decían: «Nosotros tenemos que empeñar nuestros campos, nuestras viñas y nuestras casas para conseguir grano en esta penuria.» NHM005004 Y otros decían: «Tenemos que pedir prestado dinero a cuenta de nuestros campos y de nuestras viñas para el impuesto del rey; NHM005005 y siendo así que tenemos la misma carne que nuestros hermanos, y que nuestros hijos son como sus hijos, sin embargo tenemos que entregar como esclavos a nuestros hijos y a nuestras hijas; ¡hay incluso entre nuestras hijas quienes son deshonradas! Y no podemos hacer nada, ya que nuestros campos y nuestras viñas pertenecen a otros.» NHM005006 Yo me indigné mucho al oír su queja y estas palabras. NHM005007 Tomé decisión en mi corazón de reprender a los notables y a los consejeros, y les dije: «¡Qué carga impone cada uno de vosotros a su hermano!» Congregué contra ellos una gran asamblea, NHM005008 y les dije: «Nosotros hemos rescatado, en la medida de nuestras posibilidades, a nuestros hermanos judíos que habían sido vendidos a las naciones. ¡Y ahora sois vosotros los que vendéis a vuestros hermanos para que nosotros los rescatemos!» Ellos callaron sin saber qué responder. NHM005009 Y yo continué: «No está bien lo que estáis haciendo. ¿No queréis caminar en el temor de nuestro Dios, para evitar los insultos de las naciones enemigas? NHM005010 También yo, mis hermanos y mi gente, les hemos prestado dinero y trigo. Pues bien, condonemos estas deudas. NHM005011 Restituidles inmediatamente sus campos, sus viñas, sus olivares y sus casas, y perdonadles la deuda del dinero, del trigo, del vino y del aceite que les habéis prestado.» NHM005012 Respondieron ellos: «Restituiremos y no les reclamaremos ya nada; haremos como tú has dicho.» Entonces llamé a los sacerdotes y les hice jurar que harían seguir esta promesa. NHM005013 Luego sacudí los pliegues de mi manto diciendo: «¡Así sacuda Dios, fuera de su casa y de su hacienda, a todo aquel que no mantenga esta palabra: así sea sacudido y despojado!» Toda la asamblea respondió: «¡Amén!», y alabó a Yahveh. Y el pueblo cumplió esta palabra. NHM005014 Además, desde el día en que el rey me mandó ser gobernador del país de Judá, desde el año veinte hasta el 32 del rey Artajerjes, durante doce años, ni yo ni mis hermanos comimos jamás del pan del gobernador. NHM005015 En cambio los gobernadores anteriores que me precedieron gravaban al pueblo: cada día percibían de él, como contribución por el pan, cuarenta siclos de plata; también sus servidores oprimían al pueblo. Pero yo, por temor de Dios, no hice nunca esto. NHM005016 Además he ayudado a la obra de la reparación de esta muralla, y, aunque no he adquirido campos, toda mi gente estaba también allí colaborando en la tarea. NHM005017 A mi mesa se sentaban los jefes y los consejeros en número de 150 sin contar los que venían a nosotros de las naciones vecinas. NHM005018 Diariamente se aderezaban a expensas mías un toro, seis carneros escogidos y aves; y cada diez días se traía cantidad de odres de vino. Y a pesar de todo, jamás reclamé el pan del gobernador, porque un duro trabajo gravaba ya al pueblo. NHM005019 ¡Acuérdate, Dios mío, para mi bien, de todo lo que he hecho por este pueblo! NHM006001 Cuando Samballat, Tobías, Guésem el árabe, y los demás enemigos nuestros se enteraron de que yo había reconstruido la muralla y de que ya no quedaba en ella brecha alguna - aunque en aquel tiempo no estaban colocadas las hojas de las puertas - NHM006002 Samballat y Guésem mandaron a decirme: «Ven a entrevistarte con nosotros en Hakkefirim, en el valle de Onó.» Pero ellos tramaban hacerme mal. NHM006003 Por eso les envié mensajeros para decirles: «Estoy ocupado en una obra importante y no puedo bajar; ¿por qué voy a dejar que la obra se pare abandonándola para bajar donde vosotros?» NHM006004 Cuatro veces me enviaron el mismo recado, y yo di la misma respuesta. NHM006005 Entonces Samballat me envió a decir por quinta vez lo mismo por un criado suyo que traía una carta abierta NHM006006 en la que estaba escrito: «Se oye entre las naciones, y así lo afirma Gasmu, el rumor de que tú y los judíos estáis pensando sublevaros; que para ello reconstruyes la muralla y tratas de hacerte su rey, NHM006007 que incluso has designado profetas para proclamar acerca de ti en Jerusalén: ¡Judá tiene rey! Estos rumores van a ser oídos por el rey; así que ven para que tomemos consejo juntos.» NHM006008 Pero yo les mandé decir: «No hay nada de eso que dices; son invenciones de tu corazón.» NHM006009 Porque lo que querían era meternos miedo, pensando: «Desfallecerán sus manos y no acabarán la obra.» Pero, por el contrario, yo me reafirmé más. NHM006010 Había ido yo a casa de Semaías, hijo de Delaías, hijo Mehetabel, que se encontraba detenido. Dijo él: «Démonos cita en la Casa de Dios, en el interior del santuario; cerremos las puertas del santuario; porque van a venir a matarte, esta misma noche vienen a matarte.» NHM006011 Pero yo respondí: «¿Un hombre como yo va a huir? ¿Qué hombre que sea como yo entraría en el santuario para salvar su vida? No iré.» NHM006012 Pues comprendí que él no había sido enviado por Dios, sino que había dicho esta profecía sobre mí porque Tobías le había comprado, NHM006013 para que yo, llevado del miedo, lo hiciera así y pecase; y esto me diera mala fama y pudieran burlarse de mí. NHM006014 Acuérdate, Dios mío, de Tobías, por lo que ha hecho; y también de Noadía, la profetisa, y de los demás profetas que trataron de asustarme. NHM006015 La muralla quedó terminada el día veinticinco de Elul, en 52 días. NHM006016 Cuando se enteraron todos nuestros enemigos y todas las naciones de alrededor lo vieron, les pareció una gran maravilla y reconocieron que esta obra había sido realizada por nuestro Dios. NHM006017 En aquellos mismos días, los notables de Judá multiplicaron sus cartas dirigidas a Tobías y recibían las de éste; NHM006018 porque tenía en Judá muchos aliados, por ser yerno de Sekanías, hijo de Ará, y por estar casado su hijo Yehojanán con la hija de Mesullam, hijo de Berekías. NHM006019 Incluso llegaron a hablar bien de Tobías en mi presencia y le repetían mis palabras. Y Tobías mandaba cartas para intimidarme. NHM007001 Reconstruida la muralla, y una vez que hube fijado las hojas de las puertas, se colocaron guardias en las puertas (cantores y levitas). NHM007002 Puse al frente de Jerusalén a mi hermano Jananí y a Jananías, jefe de la ciudadela, porque era un hombre fiel y temeroso de Dios como pocos; NHM007003 y les dije: «No se abrirán las puertas de Jerusalén hasta que el sol comience a calentar; y cuando todavía esté alto, se cerrarán y se echarán las barras a las puertas; y se establecerán puestos de guardia de entre los habitantes de Jerusalén, unos en su puesto y otros delante de su casa.» NHM007004 La ciudad era espaciosa y grande, pero tenía muy poca población y no se fundaban nuevas familias. NHM007005 Me puso Dios en el corazón reunir a los notables, a los consejeros y al pueblo, para hacer el registro genealógico. Hallé el registro genealógico de los que habían venido al principio, y encontré escrito en él: NHM007006 Estas son las personas de la provincia que regresaron del cautiverio, aquellos que Nabucodonosor, rey de Babilonia, había deportado y que volvieron a Jerusalén y Judea, cada uno a su ciudad. NHM007007 Vinieron con Zorobabel, Josué, Nehemías, Azarías, Raamías, Najamaní, Mardoqueo, Bilsán, Mispéret, Bigvay, Nejum y Baaná. Lista de los hombres del pueblo de Israel: NHM007008 los hijos de Parós: 2.172; NHM007009 los hijos de Sefatías: 372; NHM007010 los hijos de Araj: 652; NHM007011 los hijos de Pajat Moab, por parte de los hijos de Josué y de Joab: 2.818; NHM007012 los hijos de Elam: 1.254; NHM007013 los hijos de Zattú: 845; NHM007014 los hijos de Zakkay: 760; NHM007015 los hijos de Binnuy: 648; NHM007016 los hijos de Bebay: 628; NHM007017 los hijos de Azgad: 2.322; NHM007018 los hijos de Adonicam: 667; NHM007019 los hijos de Bigvay: 2.067; NHM007020 los hijos de Adín: 655; NHM007021 los hijos de Ater, de Ezequías: 98; NHM007022 los hijos de Jalum: 328; NHM007023 los hijos de Besay: 324; NHM007024 los hijos de Jarif: 112; NHM007025 los hijos de Gabaón: 95; NHM007026 los hombres de Belén y de Netofá: 188; NHM007027 los hombres de Anatot: 128; NHM007028 los hombres de Bet Azmávet: 42; NHM007029 los hombres de Quiryat Yearim, Kefirá y Beerot: 743; NHM007030 los hombres de Ramá y Gueba: 621; NHM007031 los hombres de Mikmás: 122; NHM007032 los hombres de Betel y de Ay: 123; NHM007033 los hombres de Nebo: 52; NHM007034 los hijos del otro Elam: 1.254; NHM007035 los hijos de Jarim: 320; NHM007036 los hombres de Jericó: 345; NHM007037 los hijos de Lod, Jadid y Onó: 721; NHM007038 los hijos de Senaá: 3.930. NHM007039 Sacerdotes: los hijos de Yedaías, de la casa de Josué: 973; NHM007040 los hijos de Immer: 1.052; NHM007041 los hijos de Pasjur: 1.247; NHM007042 los hijos de Jarim: 1.017. NHM007043 Levitas: los hijos de Josué y Cadmiel, de los hijos de Hodías: 74. NHM007044 Cantores: los hijos de Asaf: 148. NHM007045 Porteros: los hijos de Sallum, los hijos de Ater, los hijos de Talmón, los hijos de Aqcub, los hijos de Jatitá, los hijos de Sobay: 138. NHM007046 Donados: los hijos de Sijá, los hijos de Jasufá, los hijos de Tabbaot, NHM007047 los hijos de Querós, los hijos de Siá, los hijos de Padón, NHM007048 los hijos de Lebaná, los hijos de Jagabá, los hijos de Salmay, NHM007049 los hijos de Janán, los hijos de Guiddel, los hijos de Gajar, NHM007050 los hijos de Reaías, los hijos de Resín, los hijos de Necodá, NHM007051 los hijos de Gazzam, los hijos de Uzzá, los hijos de Paséaj, NHM007052 los hijos de Besay, los hijos de los meunitas, los hijos de los nefusitas, NHM007053 los hijos de Baqbuq, los hijos de Jacufá, los hijos de Jarjur, NHM007054 los hijos de Baslit, los hijos de Mejidá, los hijos de Jarsá, NHM007055 los hijos de Barcós, los hijos de Sisrá, los hijos de Témaj, NHM007056 los hijos de Nesíaj, los hijos de Jatifá. NHM007057 Los hijos de los siervos de Salomón: los hijos de Setay, los hijos de Soféret, los hijos de Peridá, NHM007058 los hijos de Yaalá, los hijos de Darcón, los hijos de Guiddel, NHM007059 los hijos de Sefatías, los hijos de Jattil, los hijos de Pokéret Hassebayim, los hijos de Amón. NHM007060 Total de los donados y de los hijos de los siervos de Salomón: 392. NHM007061 Y estos eran los que venían de Tel Mélaj, Tel Jarsá, Kerub, Addón e Immer, y que no pudieron probar si su familia y su estirpe eran de origen israelita: NHM007062 los hijos de Belaías, los hijos de Tobías, los hijos de Necodá: 642. NHM007063 Y entre los sacerdotes, los hijos de Jobayías, los hijos Haqcós, los hijos de Barzillay - el cual se había casado con una de las hijas de Barzillay el galaadita, cuyo nombre adoptó -. NHM007064 Estos investigaron en su registro genealógico, pero no figuraban; por lo cual se les excluyó del sacerdocio como ilegítimos, NHM007065 y el Gobernador les prohibió comer de las cosas sacratísimas hasta que no se presentara un sacerdote para el Urim y el Tummim. NHM007066 La asamblea ascendía a 42.360 personas, NHM007067 sin contar sus siervos y siervas en número de 7.337; tenían también 245 cantores y cantoras. NHM007068 Tenían (736 caballos, 245 mulos) 435 camellos NHM007069 y 6.720 asnos. NHM007070 Algunos de los cabezas de familia hicieron ofrendas para la obra. El Gobernador entregó al tesoro mil dracmas de oro, 50 copas y 30 túnicas sacerdotales. NHM007071 Entre los cabezas de familia entregaron al tesoro de la obra 20.000 dracmas de oro y 2.200 minas de plata. NHM007072 Lo que entregó el resto del pueblo ascendía a 20.000 dracmas de oro, 2.000 minas de plata y 67 túnicas sacerdotales. NHM007073 Los sacerdotes, los levitas, los porteros, los cantores, los donados y todos los demás israelitas se establecieron en sus ciudades. Llegado el mes séptimo, NHM008001 todo el pueblo se congregó como un solo hombre en la plaza que está delante de la puerta del Agua. Dijeron al escriba Esdras que trajera el libro de la Ley de Moisés que Yahveh había prescrito a Israel. NHM008002 Trajo el sacerdote Esdras la Ley ante la asamblea, integrada por hombres, mujeres y todos los que tenían uso de razón. Era el día uno del mes séptimo. NHM008003 Leyó una parte en la plaza que está delante de la puerta del Agua, desde el alba hasta el mediodía, en presencia de los hombres, las mujeres y todos los que tenían uso de razón; y los oídos del pueblo estaban atentos al libro de la Ley. NHM008004 El escriba Esdras estaba de pie sobre un estrado de madera levantado para esta ocasión; junto a él estaban: a su derecha, Matitías, Semá, Anaías, Urías, Jilquías y Maaseías, y a su izquierda, Pedaías, Misael, Malkías, Jasum, Jasbaddaná, Zacarías y Mesul-lam. NHM008005 Esdras abrió el libro a los ojos de todo el pueblo - pues estaba más alto que todo el pueblo - y al abrirlo, el pueblo entero se puso en pie. NHM008006 Esdras bendijo a Yahveh, el Dios grande; y todo el pueblo, alzando las manos, respondió: «¡Amén! ¡Amén!»; e inclinándose se postraron ante Yahveh, rostro en tierra. NHM008007 (Josué, Baní, Serebías, Yamín, Aqcub, Sabtay, Hodiyías, Maaseías, Quelitá, Azarías, Yozabad, Janán, Pelaías, que eran levitas, explicaban la Ley al pueblo que seguía en pie.) NHM008008 Y Esdras leyó en el libro de la Ley de Dios, aclarando e interpretando el sentido, para que comprendieran la lectura. NHM008009 Entonces (Nehemías - el Gobernador - y) Esdras, el sacerdote escriba (y los levitas que explicaban al pueblo) dijeron a todo el pueblo: «Este día está consagrado a Yahveh vuestro Dios; no estéis tristes ni lloréis»; pues todo el pueblo lloraba al oír las palabras de la Ley. NHM008010 Díjoles también: «Id y comed manjares grasos, bebed bebidas dulces y mandad su ración a quien no tiene nada preparado. Porque este día está consagrado a nuestro Señor. No estéis tristes: la alegría de Yahveh es vuestra fortaleza.» NHM008011 También los levitas tranquilizaban al pueblo diciéndole: «Callad: este día es santo. No estéis tristes.» NHM008012 Y el pueblo entero se fue a comer y beber, a repartir raciones y hacer gran festejo, porque habían comprendido las palabras que les habían enseñado. NHM008013 El segundo día los cabezas de familia de todo el pueblo, los sacerdotes y levitas se reunieron junto al escriba Esdras para comprender las palabras de la Ley. NHM008014 Y encontraron escrito en la Ley que Yahveh había mandado por medio de Moisés que los hijos de Israel habitaran en cabañas durante la fiesta del séptimo mes. NHM008015 En cuanto lo oyeron, hicieron pregonar en todas las ciudades y en Jerusalén: «Salid al monte y traed ramas de olivo, de pino, de mirto, de palmera y de otros árboles frondosos, para hacer cabañas conforme a lo escrito.» NHM008016 Salió el pueblo y trajeron ramas y se hicieron cabañas, cada uno en su terrado, en sus patios, en los atrios de la Casa de Dios, en la plaza de la puerta del Agua y en la plaza de la puerta de Efraím. NHM008017 Toda la asamblea, los que habían vuelto del cautiverio, construyó cabañas y habitó en ellas - cosa que los israelitas no habían hecho desde los días de Josué, hijo de Nun, hasta aquel día - y hubo gran regocijo. NHM008018 Esdras leyó en el libro de la Ley de Dios diariamente, desde el primer día al último. Durante siete días, se celebró fiesta; al octavo tuvo lugar, según la norma, una asamblea solemne. NHM009001 El día veinticuatro de aquel mismo mes, se congregaron los israelitas para ayunar, vestidos de sayal y la cabeza cubierta de polvo. NHM009002 La raza de Israel se separó de todos los extranjeros; y puestos en pie, confesaron sus pecados y las culpas de sus padres. NHM009003 (De pie y cada uno en su sitio, leyeron en el libro de la Ley de Yahveh su Dios, por espacio de un cuarto de día; durante otro cuarto hacían confesión y se postraban ante Yahveh su Dios.) NHM009004 (Josué, Binnuy, Cadmiel, Sebanías, Bunní, Serebías, Baní y Quenaní subieron al estrado de los levitas y clamaron en alta voz hacia Yahveh su Dios, NHM009005 y los levitas Josué, Cadmiel, Baní, Jasabneías, Serebías, Hodiyías, Sebanías y Petajías dijeron: «¡Levantaos, bendecid a Yahveh nuestro Dios!») ¡Bendito seas, Yahveh Dios nuestro, de eternidad en eternidad! ¡Y sea bendito el Nombre de tu Gloria que supera toda bendición y alabanza! NHM009006 ¡Tú, Yahveh, tú el único! Tú hiciste los cielos, el cielo de los cielos y toda su mesnada, la tierra y todo cuanto abarca, los mares y todo cuanto encierran. Todo esto tú lo animas, y la mesnada de los cielos ante ti se prosterna. NHM009007 Tú, Yahveh, eres el Dios que elegiste a Abram, le sacaste de Ur de Caldea y le diste el nombre de Abraham. NHM009008 Hallaste su corazón fiel ante ti, con él hiciste alianza, para darle el país del cananeo, del hitita y del amorreo, del perizita, del jebuseo y del guirgasita, a él y a su posteridad. Y has mantenido tu palabra, porque eres justo. NHM009009 Tú viste la aflicción de nuestros padres en Egipto, y escuchaste su clamor junto al mar de Suf. NHM009010 Contra Faraón obraste señales y prodigios, contra sus siervos y todo el pueblo de su país, pues supiste que eran altivos con ellos. ¡Te hiciste un nombre hasta el día de hoy! NHM009011 Tú hendiste el mar ante ellos: por medio del mar pasaron a pie enjuto. Hundiste en los abismos a sus perseguidores, como una piedra en aguas poderosas. NHM009012 Con columna de nube los guiaste de día, con columna de fuego por la noche, para alumbrar ante ellos el camino por donde habían de marchar. NHM009013 Bajaste sobre el monte Sinaí y del cielo les hablaste; les diste normas justas, leyes verdaderas, preceptos y mandamientos excelentes; NHM009014 les diste a conocer tu santo sábado; les ordenaste mandamientos, preceptos y Ley por mano de Moisés, tu siervo. NHM009015 Del cielo les mandaste el pan para su hambre, para su sed hiciste brotar el agua de la roca. Y les mandaste ir a apoderarse de la tierra que tú juraste darles mano en alto. NHM009016 Altivos se volvieron nuestros padres, su cerviz endurecieron y desoyeron tus mandatos. NHM009017 No quisieron oír, no recordaron los prodigios que con ellos hiciste; endurecieron la cerviz y se obstinaron en volver a Egipto y a su servidumbre. Pero tú eres el Dios de los perdones, clemente y entrañable, tardo a la cólera y rico en bondad. ¡No los desamparaste! NHM009018 Ni siquiera cuando se fabricaron un becerro de metal fundido y exclamaron: «¡Este es tu dios que te sacó de Egipto!» (grandes desprecios te hicieron). NHM009019 Tú, en tu inmensa ternura, no los abandonaste en el desierto: la columna de nube no se apartó de ellos, para guiarles de día por la ruta, ni la columna de fuego por la noche, para alumbrar ante ellos el camino por donde habían de marchar. NHM009020 Tu Espíritu bueno les diste para instruirles, el maná no retiraste de su boca, y para su sed les diste agua. NHM009021 Cuarenta años los sustentaste en el desierto, y nada les faltó: ni sus vestidos se gastaron ni se hincharon sus pies. NHM009022 Reinos y pueblos les donaste y las tierras vecinas repartiste: se apoderaron del país de Sijón, rey de Jesbón, y del país de Og, rey de Basán. NHM009023 Y multiplicaste sus hijos como estrellas del cielo, los llevaste a la tierra que a sus padres dijiste que entrarían a poseer. NHM009024 Llegaron los hijos y tomaron el país, y tú ante ellos aplastaste a los habitantes del país, los cananeos, los pusiste en sus manos, con sus reyes y las gentes del país, para que los trataran a merced de su capricho. NHM009025 Ciudades fuertes conquistaron y una tierra generosa; y heredaron casas de toda suerte de bienes rebosantes, cisternas ya excavadas, viñas y olivares, árboles frutales sin medida: comieron, se saciaron, engordaron, se deleitaron en tus inmensos bienes. NHM009026 Pero después, indóciles, se rebelaron contra ti, arrojaron tu Ley a sus espaldas, mataron a los profetas que les conjuraban a convertirse a ti; (grandes desprecios te hicieron). NHM009027 Tú los entregaste en poder de sus enemigos que los oprimieron. Durante su opresión clamaban hacia ti, y tú los escuchabas desde el cielo; y en tu inmensa ternura les mandabas salvadores que los libraron de las manos opresoras. NHM009028 Pero, apenas en paz, volvían a hacer el mal ante ti, y tú los dejabas en mano de sus enemigos que los oprimían. Ellos de nuevo gritaban hacia ti, y tú escuchabas desde el cielo: ¡muchas veces, por ternura, los salvaste! NHM009029 Les conminaste para volverlos a tu Ley, pero ellos en su orgullo no escucharon tus mandatos; contra tus normas pecaron, contra aquellas que, cumplidas, dan la vida; dieron la espalda, endurecieron su cerviz y no escucharon. NHM009030 Tuviste paciencia con ellos durante muchos años; les advertiste por tu Espíritu, por boca de tus profetas; pero ellos no escucharon. Y los pusiste en manos de las gentes de los países. NHM009031 Mas en tu inmensa ternura no los acabaste, no los abandonaste, porque eres tú Dios clemente y lleno de ternura. NHM009032 Ahora, pues, oh Dios nuestro, tú, Dios grande, poderoso y temible, que mantienes la alianza y el amor, no menosprecies esta miseria que ha caído sobre nosotros, sobre nuestros reyes y príncipes, nuestros sacerdotes y profetas, sobre todo tu pueblo, desde los tiempos de los reyes de Asiria hasta el día de hoy. NHM009033 Has sido justo en todo lo que nos ha sobrevenido, pues tú fuiste fiel, y nosotros malvados: NHM009034 nuestros reyes y jefes, nuestros sacerdotes y padres no guardaron tu Ley, no hicieron caso de los mandamientos y dictámenes que tú les diste. NHM009035 Mientras vivían en su reino, entre los grandes bienes que tú les regalabas, y en la espaciosa y generosa tierra que tú les habías preparado, no te sirvieron ellos ni se convirtieron de sus malas acciones. NHM009036 Míranos hoy a nosotros esclavos, y en el país que habías dado a nuestros padres para gozar de sus frutos y bienes, mira que aquí en servidumbre nos sumimos. NHM009037 Sus muchos frutos son para los reyes, que por nuestros pecados tú nos impusiste, y que a capricho dominan nuestras personas, cuerpos y ganados. ¡En gran angustia nos hallamos! NHM009038 De acuerdo con todo esto, nosotros tomamos un firme compromiso por escrito. En el documento sellado figuran nuestros jefes, nuestros levitas y nuestros sacerdotes... NHM010001 En el documento sellado figuraban: Nehemías, hijo de Jakalías, y Sedecías. NHM010002 Seraías, Azarías, Jeremías, NHM010003 Pasjur, Amarías, Malkías, NHM010004 Jattús, Sebanías, Malluk, NHM010005 Jarim, Meremot, Abdías, NHM010006 Daniel, Guinnetón, Baruc, NHM010007 Mesullam, Abías, Miyyamín, NHM010008 Maazías, Bilgay, Semaías: estos son los sacerdotes. NHM010009 Luego los levitas: Josué, hijo de Azanías, Binnuy, de los hijos de Jenadad, Cadmiel NHM010010 y sus hermanos Sekanías, Hodavías, Quelitá, Pelaías, Janán, NHM010011 Miká, Rejob, Jasabías, NHM010012 Zakkur, Serebías, Sebanías, NHM010013 Hodiyías, Baní, Quenaní. NHM010014 Los jefes del pueblo: Parós, Pajat Moab, Elam, Zattú, Baní, NHM010015 Bunní, Azgad, Bebay, NHM010016 Adonías, Bigvay, Adín, NHM010017 Ater, Ezequías, Azzur, NHM010018 Hodiyías, Jatum, Besay, NHM010019 Jarif, Anatot, Nobay, NHM010020 Magpiás, Mesullam, Jezir, NHM010021 Mesezabel, Sadoq, Yaddúa, NHM010022 Pelatías, Janán, Hanaías, NHM010023 Oseas, Jananías, Jassub, NHM010024 Hallojés, Piljá, Sobeq, NHM010025 Rejum, Jasabná, Maaseías, NHM010026 Ajías, Janán, Anán, NHM010027 Malluk, Jarim, Baaná. NHM010028 y el resto del pueblo, los sacerdotes y los levitas los porteros, los cantores, los donados y todos los separados de las gentes del país para seguir la Ley de Dios, sus mujeres, sus hijos y sus hijas, cuantos tienen uso de razón, NHM010029 se adhieren a sus hermanos y a los nobles y se comprometen por imprecación y juramento a caminar en la Ley de Dios, que fue dada por mano de Moisés, siervo de Dios, y a guardar y practicar todos los mandamientos de Yahveh nuestro Señor, sus normas y sus leyes. NHM010030 A no dar nuestras hijas a las gentes del país ni tomar sus hijas para nuestros hijos. NHM010031 Si las gentes del país traen, en día de sábado, mercancías o cualquier otra clase de comestibles para vender, nada les compraremos en día de sábado ni en día sagrado. En el año séptimo abandonaremos el producto de la tierra y todas las deudas. NHM010032 Nos imponemos como obligación: Dar un tercio de siclo al año para el servicio de la Casa de nuestro Dios: NHM010033 para el pan que se presenta, para la oblación perpetua y el holocausto perpetuo, para los sacrificios de los sábados, de los novilunios, de las solemnidades, para los alimentos sagrados, para los sacrificios por el pecado como expiación por Israel y para toda la obra de la Casa de nuestro Dios; NHM010034 Hemos echado a suertes - sacerdotes, levitas y pueblo - la ofrenda de la leña que ha de traer a la Casa de nuestro Dios cada familia en su turno, a sus tiempos, cada año, para quemarla sobre el altar de Yahveh nuestro Dios con arreglo a lo escrito en la Ley. NHM010035 y traer cada año a la Casa de Yahveh las primicias de nuestro suelo y las primicias de los frutos de todos los árboles, NHM010036 y los primogénitos de nuestros hijos y de nuestro ganado, conforme a lo escrito en la Ley - los primeros nacidos de nuestro ganado mayor y menor, que se traen a la Casa de nuestro Dios son para los sacerdotes que ejercen el ministerio en la casa de nuestro Dios -. NHM010037 Lo mejor de nuestras moliendas, de los frutos de todo árbol, del vino y del aceite, se lo traeremos a los sacerdotes, a los aposentos de la Casa de nuestro Dios; y el diezmo de nuestro suelo a los levitas, y ellos mismos cobrarán el diezmo en todas las ciudades de nuestra labranza; NHM010038 un sacerdote, hijo de Aarón, irá con los levitas cuando éstos cobren el diezmo; los levitas subirán el diezmo del diezmo a la Casa de nuestro Dios a los aposentos de la casa del tesoro; NHM010039 (TEXTO OMITIDO) NHM011001 Los jefes del pueblo se establecieron en Jerusalén. El resto del pueblo echó a suertes para que de cada diez hombres habitase uno en Jerusalén, la Ciudad Santa, quedando los otros nueve en las ciudades. NHM011002 Y el pueblo bendijo a todos los hombres que se ofrecieron voluntarios para habitar en Jerusalén. NHM011003 Estos son los jefes de la provincia que se establecieron en Jerusalén y en las ciudades de Judá; Israel, sacerdotes, levitas, donados e hijos de los siervos de Salomón, vivían en sus ciudades, cada uno en su propiedad. NHM011004 Habitaban en Jerusalén hijos de Judá e hijos de Benjamín. De los hijos de Judá: Ataías, hijo de Uzzías, hijo de Zacarías, hijo de Amarías, hijo de Sefatías, hijo de Mahalalel, de los hijos de Peres; NHM011005 Maaseías, hijo de Baruc, hijo de Kol Jozé, hijo de Jazaías, hijo de Adaías, hijo de Yoyarib, hijo de Zacarías, el selanita. NHM011006 El total de los hijos de Peres que habitaban en Jerusalén era de 468, hombres vigorosos. NHM011007 Los hijos de Benjamín eran: Sallú, hijo de Mesullam, hijo de Yoed, hijo de Pedaías, hijo de Colaías, hijo de Maaseías, hijo de Itiel, hijo de Isaías, NHM011008 y sus hermanos, hombres vigorosos: 92NHM011008 NHM011009 Joel, hijo de Zikrí, era su encargado y Judá, hijo de Hassenúa, era el segundo jefe de la ciudad. NHM011010 De los sacerdotes: Yedaías, hijo de Yoyaquim, hijo de NHM011011 Seraías, hijo de Jilquías, hijo de Mesullam, hijo de Sadoq, hijo de Merayot, hijo de Ajitub, príncipe de la Casa de Dios, NHM011012 y sus hermanos empleados en la obra de la Casa: 822; Adaías, hijo de Yerojam, hijo de Pelalías, hijo de Amsí, hijo de Zacarías, hijo de Pasjur, hijo de Malkías, NHM011013 y sus hermanos, cabezas de familia: 242; y Amasay, hijo de Azarel, hijo de Ajzay, hijo de Mesillemot, hijo de Immer, NHM011014 y sus hermanos, hombres vigorosos: 128. Su encargado era Zabdiel, hijo de Haggadol. NHM011015 De los levitas: Semaías, hijo de Jassub, hijo de Azricam, hijo de Jasabías, hijo de Bunní; NHM011016 Sabtay y Yozabad, que entre los jefes de los levitas estaban al frente de los servicios exteriores de la Casa de Dios; NHM011017 Mattanías, hijo de Miká, hijo de Zabdí, hijo de Asaf, que dirigía los himnos, entonaba la acción de gracias de la oración; Baqbuquías, el segundo entre sus hermanos; Abdías, hijo de Sammúa, hijo de Galal, hijo de Yedutún. NHM011018 Total de los levitas en la Ciudad santa: 284. NHM011019 Los porteros: Aqcub, Talmón y sus hermanos, que hacían la guardia de las puertas: 172. NHM011020 El resto de los israelitas, de los sacerdotes y levitas, se estableció en todas las ciudades de Judá, cada uno en su heredad. NHM011021 Los donados habitaban el Ofel; Sijá y Guispá estaban al frente de los donados. NHM011022 El encargado de los levitas en Jerusalén era Uzzí, hijo de Baní, hijo de Jasabías, hijo de Mattanías, hijo de Miká; era uno de los hijos de Asaf que estaban encargados del canto según el servicio de la Casa de Dios; NHM011023 porque había acerca de los cantores un mandato del rey y un reglamento que fijaba los actos de cada día. NHM011024 Petajías, hijo de Mesezabel, de los hijos de Zéraj, hijo de Judá, estaba a las órdenes del rey para todos los asuntos del pueblo, NHM011025 y en los poblados situados en sus campos. Parte de los hijos de Judá habitaban en Quiryat Haarbá y sus aldeas anejas, en Dibón y sus aldeas anejas, en Jeqcabsel y sus poblados, NHM011026 en Yesúa, en Moladá, en Bet Pélet, NHM011027 en Jasar Sual, en Berseba y sus aldeas anejas, NHM011028 en Siquelag, en Mekoná y sus aldeas anejas, NHM011029 en Enrimmón, en Soreá, en Yarmut, NHM011030 en Zanóaj, Adullam y sus caseríos; Lakis y su comarca, Azecá y sus aldeas anejas: se establecieron desde Berseba hasta el valle de Hinnón. NHM011031 Algunos hijos de Benjamín habitaban en Gueba, Midmás, Ayyá, Betel y sus aldeas anejas, NHM011032 Anatot, Nob, Ananías, NHM011033 Jasor, Ramá, Guittayim, NHM011034 Jadid, Seboím, Neballat, NHM011035 Lod y Onó, y el valle de los Artesanos. NHM011036 Había grupos de levitas en Judá y en Benjamín. NHM012001 Estos son los sacerdotes y los levitas que subieron con Zorobabel, hijo de Sealtiel, y con Josué: Seraías, Jeremías, Esdras, NHM012002 Amarías, Malluk, Hattús, NHM012003 Sekanías, Rejum, Meremot, NHM012004 Iddó, Guinnetón, Abías, NHM012005 Miyyamín, Maadías, Bilgá, NHM012006 Semaías; además: Yoyarib, Yedaías, NHM012007 Sallú, Amoq, Jilquías, Yedaías. Estos eran los jefes de los sacerdotes y de sus hermanos, en tiempo de Josué. NHM012008 Levitas: Josué, Binnuy, Cadmiel, Serebías, Judá, Mattanías - que dirigía con sus hermanos los himnos de acción de gracias, NHM012009 y Baqbuquías, Unní y sus hermanos les hacían coro en sus ministerios. NHM012010 Josué engendró a Yoyaquim; Yoyaquim engendró a Elyasib; Elyasib engendró a Yoyadá; NHM012011 Yoyadá engendró a Yojanán, y Yojanán engendró a Yaddúa. NHM012012 En los días de Yoyaquim los sacerdotes cabezas de familia eran: de la familia de Seraías: Meraías; de la familia de Jeremías: Jananías; NHM012013 de la de Esdras: Mesullam; de la de Amarías: Yehojanán; NHM012014 de la de Malluk: Jonatán; de la de Sekanías: José; NHM012015 de la de Jarim: Azná; de la de Meremot: Jelcay; NHM012016 de la de Iddó: Zacarías; de la de Guinnetón: Mesullam; NHM012017 de la de Abías: Zikrí; de la de Miyyamín:... de la de Maadías: Piltay; NHM012018 de la de Bilgá: Sammúa; de la de Semaías: Jonatán; NHM012019 además: de la de Yoyarib: Mattenay; de la Yedaías: Uzzí; NHM012020 de la de Sallú: Callay; de la de Amoq: Héber; NHM012021 de la de Jilquías: Jasabías; de la de Yedaías: Natanael. NHM012022 En tiempo de Elyasib, Yoyadá, Yojanán y Yaddúa, los cabezas de familias sacerdotales fueron registrados en el libro de las Crónicas, hasta el reinado de Darío el persa. NHM012023 Los hijos de Leví: Los cabezas de familia fueron registrados en el libro de las Crónicas, hasta el tiempo de Yojanán, nieto de Elyasib. NHM012024 Los jefes de los levitas eran: Jasabías, Serebías, Josué, Binnuy, Cadmiel; y sus hermanos, frente por frente para ejecutar los himnos de alabanza y de acción de gracias, conforme a las instrucciones de David, hombre de Dios, en grupos alternos, NHM012025 eran: Mattanías, Baqbuquías, y Abdías. Y Mesullam, Talmón y Aqcub, porteros, montaban la guardia en los almacenes junto a las puertas. NHM012026 Estos vivían en tiempo de Yoyaquim, hijo de Josué, hijo de Yosadaq, y en tiempo de Nehemías, el gobernador, y de Esdras, el sacerdote - escriba. NHM012027 Cuando la dedicación de la muralla de Jerusalén, se buscó a los levitas por todos los lugares para traerlos a Jerusalén, con el fin de celebrar la dedicación con alegría, con cánticos de acción de gracias y música de címbalos, salterios y cítaras. NHM012028 Los cantores, hijos de Leví, se congregaron de la región circundante de Jerusalén, de los poblados de los netofatíes, NHM012029 de Bet Haguilgal, de los campos de Gueba y de Azmávet; porque los cantores habían construido poblados alrededor de Jerusalén. NHM012030 Sacerdotes y levitas se purificaron, y luego purificaron al pueblo, las puertas y la muralla. NHM012031 Mandé entonces a los jefes de Judá que subieran a la muralla y organicé dos grandes coros. El primero marchaba por encima de la muralla, hacia la derecha, hacia la puerta del Muladar; NHM012032 detrás de ellos iban Hosaías y la mitad de los jefes de Judá, NHM012033 Azarías, Esdras, Mesullam, NHM012034 Judá, Benjamín, Semaías y Jeremías, NHM012035 elegidos entre los sacerdotes y provistos de trompetas; y Zacarías, hijo de Jonatán, hijo de Semaías, hijo de Mattanías, hijo de Miká, hijo de Zakkur, hijo de Asaf, NHM012036 con sus hermanos, Semaías, Azarel, Milalay, Guilalay, Maay, Natanael, Judá, Jananí, con los instrumentos músicos de David, hombre de Dios. Y Esdras el escriba iba al frente de ellos. NHM012037 A la altura de la puerta de la Fuente, subieron a derecho por la escalera de la Ciudad de David, por encima de la muralla, y por la subida de la Casa de David, hasta la puerta del Agua, al Oriente. NHM012038 El segundo coro marchaba por la izquierda; yo iba detrás, con la mitad de los jefes del pueblo, por encima de la muralla, pasando por la torre de los Hornos, hasta la muralla de la Plaza, NHM012039 por encima de la puerta de Efraím, la puerta de los Peces, la torre de Jananel, hasta la puerta de las Ovejas; se hizo alto en la puerta de la Prisión. NHM012040 Luego los dos corros se colocaron en la Casa de Dios. - Tenía yo a mi lado a la mitad de los consejeros, NHM012041 y a los sacerdotes Elyaquim, Maaseías, Minyamín, Miká, Elyoenay, Zacarías, Jananías, con trompetas, NHM012042 y Maaseías, Semaías, Eleazar, Uzzí, Yehojanán, Malkiyías, Elam y Ezer -. Los cantores entonaron su canto bajo la dirección de Yizrajías. NHM012043 Se ofrecieron aquel día grandes sacrificios y la gente se entregó a la algazara, pues Dios les había concedido un gran gozo; también se regocijaron las mujeres y los niños. Y el alborozo de Jerusalén se oía desde lejos. NHM012044 En aquel tiempo se puso al frente de los aposentos destinados para almacenes de las ofrendas reservadas, de las primicias y de los diezmos, a hombres que recogiesen en ellos, del territorio de las ciudades, las porciones que la Ley otorga a los sacerdotes y a los levitas. Pues Judá se complacía en ver a los sacerdotes y levitas en sus funciones. NHM012045 Ellos cumplían el ministerio de su Dios y el ministerio de las purificaciones, junto con los cantores y los porteros, conforme a lo mandado por David y su hijo Salomón. NHM012046 Pues ya desde un principio, desde los días de David y de Asaf, había jefes de cantores y cánticos de alabanza y acción de gracias a Dios. NHM012047 Y todo Israel, en tiempo de Zorobabel y en tiempo de Nehemías, daba a los cantores y a los porteros las raciones correspondientes a cada día. A los levitas se les entregaban las cosas sagradas, y los levitas entregaban su parte a los hijos de Aarón. NHM013001 En aquel tiempo se leyó a oídos del pueblo en el libro de Moisés, y se encontró escrito en él: «El ammonita y el moabita no entrarán jamás en la asamblea de Dios, NHM013002 porque no recibieron a los israelitas con pan y agua. Tomaron a sueldo contra ellos a Balaam, para maldecirles, pero nuestro Dios cambió la maldición en bendición.» NHM013003 Así que, en oyendo la Ley, se excluyó de Israel a todo extranjero. NHM013004 Antes de esto, el sacerdote Elyasib había sido encargado de los aposentos de la Casa de nuestro Dios. Como era pariente de Tobías, NHM013005 le había proporcionado un aposento espacioso, donde anteriormente se depositaban las oblaciones, el incienso, los utensilios, el diezmo del trigo, del vino y del aceite, es decir, las porciones de los levitas, los cantores y los porteros, y lo reservado a los sacerdotes. NHM013006 Cuando sucedía esto, yo no estaba en Jerusalén, porque el año 32 de Artajerjes, rey de Babilonia, había ido donde el rey; pero al cabo de algún tiempo el rey me permitió volver; NHM013007 volví a Jerusalén, y me enteré de la mala acción que había hecho Elyasib en favor de Tobías, preparándole un aposento en el atrio de la Casa de Dios. NHM013008 Esto me desagradó mucho; eché fuera del aposento todos los muebles de la casa de Tobías, NHM013009 y mandé purificar los aposentos y volver a poner en ellos los utensilios de la Casa de Dios, las oblaciones y el incienso. NHM013010 Me enteré también de que ya no se entregaban las raciones de los levitas, por lo que ellos se habían marchado cada uno a su campo - los levitas y los cantores encargados del servicio -. NHM013011 Reprendí por ello a los consejeros diciéndoles: «¿Por qué ha sido abandonada la Casa de Dios?» Luego los reuní de nuevo y los restablecí en sus puestos. NHM013012 Y todo Judá trajo a los almacenes el diezmo del trigo, del vino y del aceite. NHM013013 Puse al frente de los almacenes al sacerdote Selemías, al escriba Sadoq y Pedaías, uno de los levitas, y como ayudante, a Janán, hijo de Zakkur, hijo de Mattanías, porque eran considerados como personas fieles; les incumbía distribuir las porciones a sus hermanos. NHM013014 ¡Acuérdate de mí por esto, Dios mío; no borres las obras de piedad que yo hice por la Casa de mi Dios y por sus servicios! NHM013015 Por aquellos días, vi que había en Judá quienes pisaban los lagares en día de sábado; otros acarreaban los haces de trigo y los cargaban sobre los asnos, y también vino, uva, higos y toda clase de cargas, para traerlo a Jerusalén en día de sábado: les advertí que no vendiesen sus mercancías. NHM013016 En Jerusalén, algunos tirios que habitan en ella traían pescado y toda clase de mercancías para vendérselas a los judíos en día de sábado, NHM013017 Reprendí a los notables de Judá diciendo: «¡Qué mala acción cometéis profanando el día del sábado! NHM013018 ¿No fue así como obraron vuestros padres y por lo que nuestro Dios hizo caer toda esta desgracia sobre nosotros y sobre esta ciudad? ¡Y vosotros aumentáis así la Cólera contra Israel profanando el sábado!» NHM013019 Así que ordené que cuando la sombra cubriese las puertas de Jerusalén, la víspera del sábado se cerrasen las puertas, y que no se abriesen hasta después del sábado. Y puse junto a las puertas a algunos de mis hombres para que no entrase carga alguna en día de sábado. NHM013020 Una o dos veces, algunos mercaderes que vendían toda clase de mercancías pasaron la noche fuera de Jerusalén, NHM013021 pero yo les avisé diciéndoles: «¿Por qué pasáis la noche junto a la muralla? ¡Si volvéis a hacerlo, os meteré mano!» Desde entonces no volvían más en sábado. NHM013022 Ordené también a los levitas purificarse y venir a guardar las puertas, para santificar el sábado. ¡También por esto acuérdate de mí, Dios mío, y ten piedad de mí según tu gran misericordia! NHM013023 Vi también en aquellos días que algunos judíos se habían casado con mujeres asdoditas, ammonitas o moabitas. NHM013024 De sus hijos, la mitad hablaban asdodeo o la lengua de uno u otro pueblo, pero no sabían ya hablar judío. NHM013025 Yo les reprendí y les maldije, hice azotar a algunos de ellos y arrancarles los cabellos, y los conjuré en nombre de Dios: «¡No debéis dar vuestras hijas a sus hijos ni tomar ninguna de sus hijas por mujeres ni para vuestros hijos ni para vosotros mismos! NHM013026 ¿No pecó en esto Salomón, rey de Israel? Entre tantas naciones no había un rey semejante a él; era amado de su Dios; Dios le había hecho rey de todo Israel. Y también a él le hicieron pecar las mujeres extranjeras. NHM013027 ¿Se tendrá que oír de vosotros que cometéis el mismo gran crimen de rebelaros contra nuestro Dios casándoos con mujeres extranjeras?» NHM013028 Uno de los hijos de Yoyadá, hijo del sumo sacerdote Elyasib, era yerno de Samballat el joronita. Yo le eché de mi lado. NHM013029 ¡Acuérdate de estas gentes, Dios mío, por haber mancillado el sacerdocio y la alianza de los sacerdotes y levitas! NHM013030 Los purifiqué, pues, de todo lo extranjero. Y establecí, para los sacerdotes y levitas, reglamentos que determinaran la tarea de cada uno, NHM013031 y lo mismo para las ofrendas de leña a plazos fijos y para las primicias. ¡Acuérdate de mí, Dios mío, para mi bien!
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