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2SM001001 Después de la muerte de Saúl, cuando hacía dos días que David, victorioso de los amalecitas, estaba en Siceleg, 2SM001002 llegó el tercer día al campamento un hombre que venía del campo de Saúl, desgarrados los vestidos y cubierta la cabeza de polvo. Guando estuvo cerca de David, se echó a tierra, prosternándose, 2SM001003 y David le preguntó: “¿De dónde vienes?” El respondió: “Vengo huido del campamento de Israel.” 2SM001004 David preguntó: “¿Qué ha sucedido? Guéntamelo.” El respondió: “El pueblo huyó de la batalla y gran número de hombres han caído. Saúl mismo y Jonatán, su hijo, han sido muertos.” 2SM001005 David dijo al joven que le daba estas noticias: “¿Y cómo sabes tú que han muerto Saúl y su hijo Jonatán?” 2SM001006 El joven que le daba las noticias respondió: “Yo me hallaba por casualidad en el monte Gelboé, y vi a Saúl apoyado sobre su lanza, mientras se acercaban a él carros y caballeros, que estaban ya para alcanzarle;' 2SM001007 y volviéndose, me vio y me llamó. Yo respondí: “Aquí me tienes.” 2SM001008 Me dijo: “¿Quién eres tú?” Yo le respondí: “Soy un amalecita.” 2SM001009 Y él me dijo: “Acércate a mí y mátame, porque me siento presa de una angustia, mientras todavía tengo en mí toda la vida.” 2SM001010 Yo me acerqué a él y le maté, pues sabía muy bien que no sobreviviría a su derrota; y tomando la diadema que llevaba en la cabeza y el brazalete que tenía en su brazo, se los he traído aquí a mi señor.” 2SM001011 David, tomando sus vestiduras, las rasgó, y también todos los hombres que con él estaban, 2SM001012 Hicieron duelo, llorando y ayunando hasta la tarde, por Saúl, por su hijo Jonatán y por el pueblo de Yahvé, que habían caído a la espada, 2SM001013 David dijo al joven que le había traído las noticias: “¿De dónde eres tú?” El respondió: “Soy hijo de un extranjero, de un amalecita.” 2SM001014 Y David le dijo: “¿Y cómo te atreviste a tender tu mano para dar muerte al ungido de Yahvé?” 2SM001015 Y llamando a uno de los suyos, le dijo: “Échate sobre él y mátale.” El hombre hirió al amalecita, que murió. 2SM001016 David dijo: “Caiga tu sangre sobre tu cabeza. Tu misma boca ha atestiguado contra ti al decir: Yo he dado la muerte al ungido de Yahvé.” 2SM001017 David cantó una elegía por Saúl y Jonatán, su hijo, 2SM001018 Está escrita en el libro del Justo, para que la aprendan los niños de Judá: 2SM001019 “Tu gloria, Israel, ha perecido en tus montes. ¿Cómo cayeron los héroes? 2SM001020 No lo propaléis en Gat, no lo publiquéis por las calles de Ascalón; que no se regocijen las hijas de los filisteos V no salten de júbilo las hijas de los incircuncisost' 2SM001021 ¡Montes de Gelboé! No caiga sobre vosotros ni rocío ni lluvi ni seáis campos de primicias, porque allí fue abatido el escudo de los héroes, el escudo de Saúl, como si no fuera ungido con el óleo. 2SM001022 De la sangre de los muertos, de la grasa de los valientes, el arco de Jonatán no se hartaba nunca, la espada de Saúl no se blandía en vano. 2SM001023 Saúl y Jonatán, amados y queridos, inseparables en vida, tampoco se separaron en la muerte, más ágiles que las águilas, más fuertes que los leones. 2SM001024 Hijas de Israel, llorad por Saúl, que os vestía de lino fino y adornaba de oro vuestros vestidos. 2SM001025 ¿Cómo han caído los héroes en medio de la batalla? ¿Cómo fue traspasado Jonatán en las alturas? 2SM001026 Angustiado estoy por ti, ¡oh Jonatán, hermano mío! Me eras carísimo, y tu amor era para mí dulcísimo, más que el amor de las mujeres. 2SM001027 ¿Cómo han caído los héroes? ¿Cómo han perecido las armas del combate?” 2SM002001 Después de esto, consultó David a Yahvé, diciendo: “¿He de subir a alguna de las ciudades de Judá?” Y Yahvé respondió: “Sube.” Preguntó David: “¿A cuál de ellas subiré?” Y Yahvé respondió: “A Hebrón.” 2SM002002 Subió, pues, allá David con sus dos mujeres, Ajinoam de Jezrael y Abigaíl del Carmel, mujer de Nabal. 2SM002003 Hizo también que subieran los que estaban con él, cada uno con su familia, y habitaron en las ciudades de Hebrón. 2SM002004 Vinieron los hombres de Judá y ungieron allí a David rey de la casa de Judá. Supo David que las gentes de Jabes Galaad habían dado sepultura a Saúl;' 2SM002005 y David envió mensajeros a los hombres de Jabes Galaad que les dijeran: “Benditos seáis de Yahvé por la misericordia que habéis hecho con vuestro señor Saúl dándole sepultura. 2SM002006 Que haga Yahvé con vosotros misericordia y verdad. Yo también os pagaré con favores lo que habéis hecho. 2SM002007 Fortaleced vuestras manos y tened valor, pues que, muerto Saúl, los hombres de Judá me han ungido por rey suyo.” 2SM002008 Pero Abner, hijo de Ner, jefe del ejército de Saúl, tomó a Isbaal, hijo de Saúl, y, llevándole a Majanaím, 2SM002009 le alzó por rey de Galaad, de Aser, de Jezrael, de Efraím, de Benjamín y de todo Israel. 2SM002010 Cuarenta años tenía Isbaal, hijo de Saúl, cuando comenzó a reinar en Israel, y reinó dos años. Sólo la casa de Judá seguía a David. 2SM002011 El tiempo que David reinó en Hebrón sobre la casa de Judá fue de siete años y seis meses. 2SM002012 Abner, hijo de Ner, y los seguidores de Isbaal, hijo de Saúl, salieron de Majanaím para Gabaón. 2SM002013 Joab, hijo de Sarvia, y los seguidores de David se pusieron en marcha. Encontráronse cerca del estanque de Gabaón y acamparon los unos de un lado del estanque, los otros del otro, 2SM002014 Abner dijo a Joab: “Salgan unos cuantos jóvenes y combatan a nuestra vista.” Joab respondió: “Que salgan.” 2SM002015 Y salieron, avanzando en igual número, doce de Benjamín, por Isbaal, hijo de Saúl, y doce de los seguidores de David;' 2SM002016 y cogiendo cada uno a su adversario por la cabeza, le hundió la espada en el costado y cayeron todos a una, llamándose por eso aquel lugar Campo de las Rocas, que está en Gabaón. 2SM002017 Hubo aquel día muy recia batalla, y Abner y los hombres de Israel fueron vencidos por los seguidores de David. 2SM002018 Estaban allí los tres hijos de Sarvia: Joab, Abisaí y Azael. Azael era ligero de pies, como un corzo de los campos, 2SM002019 y persiguió a Abner, sin apartarse de en pos de él ni a la derecha ni a la izquierda. 2SM002020 Abner miró detrás de sí y le dijo: “¿Eres tú, Azael?” El respondió: “Yo soy.” 2SM002021 Y Abner le dijo: “Apártate o a la derecha o a la izquierda, coge a uno de esos mozos y toma sus despojos.” Pero Azael no quiso apartarse de él, 2SM002022 y Abner dijo entonces a Azael: “Apártate de en pos de mí o te derribo en tierra, y ¿cómo podría yo levantar mis ojos delante de Joab, tu hermano?” 2SM002023 Pero Azael rehusó retirarse, y Abner le hirió entonces, sin volverse, con la lanza en el abdomen, saliéndole la lanza por detrás, y allí cayó y murió. Todos, al llegar al lugar donde había caído Azael, se detenían. 2SM002024 Joab y Abisaí persiguieron a Abner, llegando, al ponerse del sol, a la colina de Amma, que está frente a Guiaj, del lado del desierto de Gabaón. 2SM002025 Los hijos de Benjamín se reunieron detrás de Abner en apretado haz y se apostaron en lo alto de la colina;' 2SM002026 y Abner, llamando a Joab, le dijo a voces: “¿Hasta cuándo no dejará de devorar la espada? ¿No sabes que al fin viene la desesperación? ¿A cuándo esperas para decir a los tuyos que dejen de perseguir a sus hermanos?” 2SM002027 Y Joab respondió: “Por Dios vivo que, si no hubieras hablado tú, el pueblo no habría dejado de perseguir a sus hermanos hasta mañana.” 2SM002028 Y Joab hizo sonar la trompeta, y el pueblo se detuvo, y no persiguieron ya a Israel, cesando el combate. 2SM002029 Abner y sus gentes, después de marchar toda la noche por el Araba, pasaron el Jordán, cruzaron todo el Bitrón y llegaron a Majanaím. 2SM002030 joab, cesando en la persecución de Abner, reunió a todo el pueblo. Faltaban de los servidores de David diecinueve hombres y Azael. 2SM002031 Los seguidores de David habían herido de muerte a trescientos sesenta hombres de los de Benjamín, de los de Abner. 2SM002032 Lievarón a Azael y le sepultaron en el sepulcro de su padre en Belén. Joab y sus hombres marcharon toda la noche y llegaron a Hebrón al despuntar el día. 2SM003001 Fue larga la guerra entre la casa de David y la casa de Saúl; pero David iba fortaleciéndose cada vez más, y la casa de Saúl cada vez más debilitándose.' 2SM003002 En Hebrón naciéronle hijos a David: su primogénito fue Amnón, hijo de Ajinoam de Jez-rael;' 2SM003003 el segundo, Dodiya, de Abigaíl del Carmel, mujer de Nabal; el tercero, Absalón, hijo de Maaca, hija de Talmai, rey de Guesur;' 2SM003004 el cuarto, Adonías, hijo de Agit; el quinto, Safatía, hijo de Abital;' 2SM003005 el sexto, Jetram, de Egla, mujer de David. Estos son los hijos que nacieron a David en Hebrón. 2SM003006 Durante la guerra entre la casa de Saúl y la casa de David, era Abner el que tenía fuerte por la casa de Saúl. 2SM003007 Había tenido Saúl una concubina, de nombre Resfa, hija de Aya; e Isbaal dijo a Abner: “¿Por qué has entrado en la concubina de mi padre ?” 2SM003008 Abner, muy irritado por lo que le decía Isbaal, respondió: “¿Soy yo acaso hoy una cabeza de perro? Hasta hoy he favorecido yo a la casa de Saúl, tu padre, y a sus hermanos y amigos, y no te he puesto en las manos de David, ¿y tú me recriminas hoy por causa de esa mujer? 2SM003009 Así haga Dios a Abner y así le añada si no hago yo con David conforme a lo que le ha jurado Yahvé, 2SM003010 que quitaría el reino a la casa de Saúl y confirmaría el trono de David sobre Israel y sobre Judá, desde Dan hasta Berseba.” 2SM003011 No pudo Isbaal responder a Abner palabra, porque le temía. 2SM003012 Envió, pues, Abner mensajeros de su parte a David para que le dijeran: “Haz alianza conmigo, y mi mano te ayudará a traer a ti a todo Israel.” 2SM003013 David respondió: “Está bien, yo haré alianza contigo; pero te pido una cosa: que no vengas a verme sin traer contigo a Micol, la hija de Saúl, cuando vengas a verme.” 2SM003014 Después de esto mandó David mensajeros a Isbaal, hijo de Saúl, que le dijeran: “Devuélveme mi mujer, Micol, que adquirí a costa de cien prepucios de filisteos.” 2SM003015 Mandó Isbaal a quitársela a su marido Paltiel, hijo de Lais, y 2SM003016 el marido se fue tras ella, siguiéndola y llorando hasta Bajurim. Abner le dijo: “Anda y vuélvete”; y él entonces se volvió.' 2SM003017 Habló Abner a los ancianos de Israel' diciendo: “No es de ayer vuestro deseo de que David reinase sobre vosotros;' 2SM003018 cumplidlo, pues, ahora, pues que Yahvé ha hablado a David, diciendo: Por mano de mi siervo David libraré yo a mi pueblo Israel de la mano de los filisteos y de la mano de todos sus enemigos.” 2SM003019 Habló también Abner a los hijos de Benjamín, y fue luego a Hebrón a comunicar a David la disposición en que estaba Israel y toda la casa de Benjamín. 2SM003020 Vino, pues, Abner a David, a Hebrón, con veinte hombres, y David dio un banquete a Abner y a los que con él habían venido. 2SM003021 Y Abner dijo a David: “Voy a levantarme, y partiré para reunir a todo Israel y traerle a mi señor el rey. Ellos harán alianza contigo y tú reinarás como deseas.” David despidió luego a Abner, y éste se fue en paz. 2SM003022 Vinieron los servidores de David y Joab, de vuelta de una expedición, trayendo consigo gran botín. No estaba ya Abner con David en Hebrón; ya le había despedido David y ya se había ido él en paz;' 2SM003023 pero, al llegar Joab con el ejército que mandaba, dieron aviso a Joab, diciendo: “Abner, hijo de Ner, ha venido a estar con el rey, y éste le ha despedido, y él se ha ido en paz.” 2SM003024 Vino entonces Joab al rey y le dijo: “¿Cómo has hecho esto? Ha venido a estar contigo Abner; ¿por qué, pues, le has dejado irse en paz?' 2SM003025 ¿No sabes tú que Abner, hijo de Ner, ha venido a engañarte y a espiarte en tus entradas y salidas y sorprender tus planes?” 2SM003026 Y en saliendo de estar con David, mandó Joab algunos tras Abner, que le trajeron desde la cisterna de Sira sin que David supiera nada. 2SM003027 Cuando Abner estuvo de vuelta en Hebrón, Joab, llevándole aparte dentro de la puerta, como para hablarle en secreto, le hirió en el vientre y le mató, en venganza de la sangre de Azael, su hermano. 2SM003028 Al saberlo David, dijo: “Inocente soy yo para siempre, yo y mi reino, delante de Yahvé, de la sangre de Abner, hijo de Ner. 2SM003029 Caiga su sangre sobre la cabeza de Joab y sobre toda la casa de su padre. Haya siempre en la casa de Joab quien padezca el flujo, leproso, quien ande con báculo, quien muera a cuchillo, quien carezca de pan.” 2SM003030 Joab y Abisaí, su hermano, mataron a Abner porque éste había muerto a Azael, hermano de los dos, en la batalla de Gabaón. 2SM003031 David dijo a Joab y a todo el pueblo que con él estab “Rasgad vuestras vestiduras, ceñios de saco y haced duelo Abner.” Y el rey David iba detrás del féretro. 2SM003032 Sepultaron1 Abner en Hebrón. Y lloró el rey en alta voz sobre la turnb de Abner, y todo el pueblo lloró con él. 2SM003033 El rey cantó una elegía por Abner y dijo: “¿Ha muerto Abner la muerte del insensato? 2SM003034 No estaban atadas tus manos ni encadenados tus pies. Caíste como caen los malvados.” Todo el pueblo siguió llorando a Abner, 2SM003035 y se acercaron a David para hacerle tomar algún alimento antes de que acabase el día; pero David juró: “Hágame esto Yahvé y esto me añada si como nada antes de la puesta del sol.” 2SM003036 Todo el pueblo lo supo, viendo con agrado lo que hacía el rey;' 2SM003037 y comprendió aquel día que no había sido obra del rey la muerte de Abner hijo de Ner. 2SM003038 El rey dijo a sus servidores: “¿No veis que ha caído hoy en Israel un gran capitán y un gran hombre ? 2SM003039 Por lo que a mí hace, yo soy todavía débil, aunque ungido, y esos hombres, los hijos de Sarvia, son más duros que yo. Que Yahvé pague al que ha hecho el mal, según su malicia.” 2SM004001 Cuando supo Isbaal que Abner había muerto en Hebrón, se le cayeron los brazos, y todo Israel quedó consternado. 2SM004002 Estaban con el hijo de Saúl dos jefes de bandidos, uno de nombre Baña y otro de nombre Recab, hijos de Rimón de Berot, de los hijos de Benjamín, pues Berot se cuenta también como parte de Benjamín. 2SM004003 Estos berptitas habían huido de Guitaím y habían habitado allí hasta entonces. 2SM004004 Un hijo de Jonatán, hijo de Saúl, tenía cinco años; y al llegar de Jezrael la noticia de la muerte de Saúl y Jonatán, le tomo la nodriza para huir con él, y en la precipitación de la fuga le dejó caer y quedó rengo; se llamaba Mefibaal.' 2SM004005 Los hijos de Rimón de Berot, Recab y Baña, vinieron durante las horas del calor 2SM004006 y entraron en la casa de Isbaal, que estaba durmiendo la siesta; la portera, limpiando trigo, se había dormido; y Recab y Baña Allegaron sin ser vistos hasta la alcoba donde Isbaal dormía, e hiriéndole, le mataron, y cortándole la cabeza, se la llevaron y huyeron por el camino del Araba toda la noche.' 2SM004007 (TEXTO OMITIDO) 2SM004008 Trajeron a David, a Hebrón, la cabeza de Isbaal, y dijeron al rey: “Ahí tienes la cabeza de Isbaal, hijo de Saúl, tu enemigo, que te perseguía; Yahvé ha vengado hoy a mi señor, el rey, de Saúl y de su descendencia.” 2SM004009 Pero David, respondiendo a Recab y Dana, su hermano, hijos de Rimón de Berot, les dijo: “Vive Yahvé, que me salvó de toda angustia, 2SM004010 que si al que me anunció, diciendo: Ha muerto Saúl, creyendo anunciarme cosa grata para mí, le tome y le maté en Siceleg, cuando parecía que era digno de albricias por la noticia, 2SM004011 ¿cuánto más ahora, que unos malvados han quitado la vida a un hombre inocente, en su casa, en su lecho, no habré de demandar su sangre de vuestras manos, exterminándoos de sobre la tierra?” 2SM004012 Dio, pues, orden David a sus gentes de matarlos, y, cortándoles manos y pies, los colgaron junto a la piscina de Hebrón. La cabeza de Isbaal la tomaron y la sepultaron en el sepulcro de Abner, en Hebrón. 2SM005001 Vinieron a David, a Hebrón, todas las tribus de Israel, y hablaron, diciendo: “Hueso tuyo y carne tuya somos;' 2SM005002 ya antes, cuando reinaba Saúl sobre nosotros, tú sacabas a Israel y entrabas con él. Además, Yahvé te ha dicho: Apacienta mi pueblo y sé el jefe de Israel.” 2SM005003 Vinieron, pues, todos los ancianos de Israel a David, a Hebrón; y David hizo con ellos alianza en Hebrón ante Yahvé, y ungieron a David rey sobre todo Israel.' 2SM005004 Treinta años tenía David cuando comenzó a reinar, y reinó cuarenta años. 2SM005005 Reinó en Hebrón, sobre Judá, siete años y seis meses, y treinta y tres años en Jerusalén, sobre todo Israel y Judá. 2SM005006 El rey se dirigió con su gente a Jerusalén, contra los jebuseos, que habitaban la tierra, que dijeron a David: “No entrarás tú aquí; ciegos y rengos bastarán para impedírtelo.” Con lo que querían decir: “Jamás entrará David aquí.” 2SM005007 Pero David se apoderó de la fortaleza de Sión, que es la ciudad de David. 2SM005008 Pues había dicho: “¿Quién, batiendo al jebuseo, llegará a alcanzar por el túnel a los ciegos y rengos, aborrecidos del alma de David?” Por eso quedó en proverbio: “No entrarán en la casa los ciegos y los rengos.” 2SM005009 David estableció su residencia en la fortaleza, y la llamó la ciudad de David y edificó en derredor, desde el terraplén para adentro. 2SM005010 David iba creciendo en poder cada vez más, y Yahvé, Dios Sebaot, estaba con él. 2SM005011 Hiram, rey de Tiro, envió a David una embajada y maderas de cedro, carpinteros y canteros, que edificaron la casa de David. 2SM005012 Conoció David que Yahvé le había confirmado rey de Israel y que realzaba su reino por amor de Israel, su pueblo. 2SM005013 Tomó David más concubinas y mujeres en Jerusalén después de venir de Hebrón, y le nacieron hijos e hijas. 2SM005014 He aquí los nombres de los que le nacieron en Jerusalén: Samúa, Sobab, Natán, Salomón, 2SM005015 Jibjar, Eliua, Nefeg, Jafia, 2SM005016 Elisama, Elijada y Elifelet. 2SM005017 Cuando los filisteos supieron que David había sido ungido rey de todo Israel, subieron todos en busca suya, y David, que lo supo, bajó a la fortaleza. 2SM005018 Los filisteos hicieron una incursión en el valle de Refaím, 2SM005019 y David consultó a Yahvé, diciendo: “¿Subiré contra los filisteos? ¿Los entregarás en mis manos?” Y Yahvé dijo a David: “Sube, pues de cierto los entregaré en tus manos.” 2SM005020 Vino, pues, David a Baal Parasim, donde los derrotó, y dijo: “Yahvé ha roto a mis enemigos como rompen las aguas.” Por eso se dio a aquel lugar el nombre de Baal Parasim. 2SM005021 Dejaron allí sus ídolos, que David y su gente se llevaron. 2SM005022 Volvieron los filisteos a subir y a invadir el valle de Refaím. 2SM005023 Consultó David a Yahvé: “¿Subiré contra los filisteos? ¿Los entregarás en mis manos?” Y El le respondió: “No subas a su encuentro; rodea por detrás de ellos y atácalos por la espalda desde el lado de las balsameras.' 2SM005024 Cuando entre las balsameras oigas ruido de pasos, ataca fuertemente, porque es Yahvé que marcha delante de ti para derrotar al ejército de los filisteos.” 2SM005025 David hizo lo que Yahvé le mandó, y batió a los filisteos desde Gabaón hasta Guezer. 2SM006001 Volvió a reunir David a los selectos de Israel, treinta mil hombres, 2SM006002 y, acompañado de todo el pueblo congregado tras él, se puso en marcha desde Baalat Judá, para subir el arca de Dios, sobre la cual se invoca el nombre de Yahvé Sebaot, sentado entre los querubines. 2SM006003 Pusieron sobre un carro nuevo el arca de Dios y la sacaron de la casa de Abinadab, que está sobre la colina. Oza y Ajio, hijos de Abinadab, guiaban el carro. 2SM006004 Iba Oza al lado del arca de Dios, y Ajio iba delante;' 2SM006005 David y toda la casa de Israel iban danzando delante de Yahvé con todas sus fuerzas, con arpas, salterios, adufes, flautas y címbalos. 2SM006006 Cuando llegaron a la era de Nacón, tendió Oza la mano hacia el arca de Dios y la tomo, porque los bueyes daban sacudidas. 2SM006007 Encendióse de pronto contra Oza la cólera de Yahvé, y cayó allí muerto, junto al arca de Dios. 2SM006008 Entristecióse David de que hubiese herido Yahvé a Oza, y fue llamado aquel lugar Peres Oza, hasta hoy. 2SM006009 Atemorizóse entonces David de Yahvé y dijo: “¿Corno voy a llevar a mí el arca de Yahvé?” 2SM006010 Y desistió ya de llevar a sí el arca de Yahvé a la ciudad de David, y la hizo llevar a la casa de Obededom de Gat. 2SM006011 Tres meses estuvo el arca de Yahvé en casa de Obededom de Gat, y Yahvé le bendijo a él y a toda su casa. 2SM006012 Dijéronle a David: “Yahvé ha bendecido a la casa de Obededom y a cuanto tiene con él por causa del arca de Dios”; y poniéndose David en camino, subió el arca de Dios de la casa de Obededom a la ciudad de David, con un jubiloso cortejo.' 2SM006013 Como los que llevaban el arca de Yahvé hubieron andado seis pasos, sacrificaba un buey y un carnero cebado. 2SM006014 David danzaba con toda su fuerza delante de Yahvé y vestía un efod de lino. 2SM006015 Así subieron David y toda la casa de Israel, entre gritos de júbilo y sonar de trompetas. 2SM006016 Cuando el arca de Yahvé llegó a la ciudad de David, Micol, hija de Saúl, miró por la ventana; y al ver al rey David saltando y danzando delante de Yahvé, le menospreció en su corazón.' 2SM006017 Una vez que el arca de Yahvé fue introducida y puesta en su lugar, en medio del tabernáculo que David había alzado para ella, David ofreció a Yahvé holocaustos y sacrificios eucarísticos. 2SM006018 Acabado que hubo de ofrecer los holocaustos y los sacrificios eucarísticos, bendijo al pueblo en nombre de Yahvé Sebaot. 2SM006019 Repartió a todo el pueblo, a toda la muchedumbre de Israel, hombres y mujeres, a cada uno una torta, un pedazo de carne y un racimo de uvas, y el pueblo se fue cada uno a su casa. 2SM006020 Cuando se volvió David a la suya para bendecirla, Micol, la hija de Saúl, le salió al encuentro, diciendo: “¡Qué gloria hoy para el rey de Israel haberse desnudado a los ojos de las siervas de sus siervos como se desnuda un juglar!” 2SM006021 David respondió a Micol: “Delante de Yahvé, que con preferencia a tu padre y a toda su casa me eligió para hacerme jefe de su pueblo, de Israel, danzaré yo, 2SM006022 y aún más vil que esto quiero parecer todavía y rebajarme más a tus ojos, y seré así honrado a los ojos de las siervas de que tú has hablado.” 2SM006023 Y ya Micol, hija de Saúl, no tuvo más hijos hasta el día de su muerte. 2SM007001 Cuando el rey se hubo establecido en su casa y le hubo dar Yahvé el descanso, librándole de todos sus enemigos en derredor, 2SM007002 dijo a Natán, profeta: “Ya ves; yo habito en casa de cedro, y el arca de Yahvé está en una tienda.” 2SM007003 Natán respondió al rey: “Anda, haz lo que tienes en tu corazón, pues que Yahvé está contigo.” 2SM007004 Pero aquella misma noche tuvo Natán palabra de Yahvé: “Anda 2SM007005 y ve a decir a David, mi siervo: Así habla Yahvé: ¿Vas a edificarme tú una casa para que yo habite en ella? 2SM007006 Mira, yo no he habitado en casa desde el día en que saqué de Egipto a los hijos de Israel hasta hoy, sino que he andado en una tienda, en un tabernáculo. 2SM007007 Y en todo el tiempo en que anduve con los hijos de Israel, ¿he dicho yo palabra a ninguno de los jefes de Israel, a quienes mandé que apacentaran mi pueblo de Israel, de hacerme una casa de cedro? 2SM007008 Di, pues, a David, mi siervo: Así habla Yahvé Sebaot: Yo te tomé de la majada, de detrás de las ovejas, para que fueses príncipe de mi pueblo, de Israel. 2SM007009 He estado contigo por dondequiera que has ido; he exterminado delante de ti a todos tus enemigos y te estoy haciendo un nombre grande, como el de los grandes de la tierra,' 2SM007010 estableciendo a mi pueblo, Israel, y plantándolo en su lugar para que habite en él y no sea perturbado y los hijos de la iniquidad no le aflijan como antes. 2SM007011 “Desde el día en que constituí jueces sobre mi pueblo, Israel, y dándote descanso de todos tus enemigos. Hácete, pues, saber Yahvé que él te edificará casa a ti;' 2SM007012 y que cuando se cumplieren tus días y te duermas con tus padres, suscitaré a tu linaje después de ti, el que saldrá de tus entrañas, y afirmaré su reino. 2SM007013 El edificará casa a mi nombre y yo estableceré su trono por siempre. 2SM007014 Yo le seré a él padre y él me será a mí hijo. Si obrare el mal, yo le castigaré con varas de hombres y con azotes de hijos de hombres;' 2SM007015 pero no apartaré de él mi misericordia, como la aparté de Saúl, arrojándole de delante de ti. 2SM007016 Permanente será tu casa para siempre ante mi rostro, y tu trono estable por la eternidad.” 2SM007017 Conforme a todas estas palabras y a toda esta visión habló Natán a David;' 2SM007018 y entrándose el rey David, puesto delante de Yahvé, dijo: “Mi Señor, Yahvé, ¿quién soy yo y qué es mi casa para que hasta tal punto me hayas traído? 2SM007019 Y aun esto ha sido poco a tus ojos, mi Señor, Yahvé, y has hablado acerca de la casa de tu siervo para lo por venir, aventajándome sobre los otros hombres, ¡mi Señor, Yahvé! 2SM007020 ¿Qué más podrá decirte David? Tú, ¡oh mi Señor, Yahvé! conoces a tu siervo. 2SM007021 Todas estas grandezas las haces según tu palabra y según tu corazón, y se las has dado a conocer a tu siervo. 2SM007022 ¡Qué grande eres, mi Señor, Yahvé! No hay nadie que se te asemeje ni hay Dios fuera de ti, como lo hemos oído con nuestros oídos. 2SM007023 ¿Y hay sobre la tierra un pueblo como tu pueblo, Israel, que haya rescatado Dios para hacerle el pueblo suyo, dándole su nombre y haciendo por él tan terribles y portentosas maravillas como en favor de tu pueblo hiciste, redimiéndole de Egipto y expulsando las gentes? 2SM007024 Has confirmado a tu pueblo, Israel, por pueblo tuyo, para que sea tu pueblo para siempre jamás y seas tú su Dios. 2SM007025 Manten, pues, siempre, mi Señor, Yahvé, la palabra que has dicho de tu siervo y de su casa, y obra según tu palabra 2SM007026 y sea glorificado por siempre tu nombre; y dígase: Yahvé Sebaot es el Dios de Israel. Sea firme ante ti la casa de tu siervo David,' 2SM007027 pues que tú mismo, Yahvé Sebaot, Dios de Israel, te has revelado a tu siervo, diciendo: Yo te edificaré a ti casa. 2SM007028 Por esto se atreve tu siervo a dirigirte esta plegaria: ¡Oh mi Señor, Yahvé! Tú eres Dios, y tus palabras son verdaderas y has prometido a tu siervo hacerle esta gracia. 2SM007029 Tenlo, pues, a bien y bendice la casa de tu siervo para que subsista siempre delante de ti; porque tú, mi Señor, Yahvé, has hablado, y con tu bendición será por siempre bendita la casa de tu siervo.” 2SM008001 Después de esto batió David a los filisteos y los humilló, arrebatando de las manos de los filisteos las ciudades de la costa. 2SM008002 Batió también a los moabitas, y, haciéndolos postrarse en tierra, los midió echando sobre ellos las cuerdas; y dos de las medidas las condenó a muerte y a la otra le dejó la vida. Los moabitas quedaron sometidos a David y le pagaron tributo.' 2SM008003 Batió a Hadadezer, hijo de Rojob, rey de Soba, cuando iba camino para restablecer su dominio hasta el Eufrates. 2SM008004 Tomóle David mil setecientos caballeros y veinte mil infantes; desjarretó a todos los caballos de los carros de guerra, no dejando más de cien tiros de carros.' 2SM008005 Habiendo venido en socorro de Hada-dezer, rey de Soba, los sirios de Damasco, batió David a veinte mil de ellos;' 2SM008006 puso guarniciones en la Siria de Damasco, y se le sometieron los sirios, haciéndose tributarios. Yahvé dio a David la victoria por dondequiera que fue. 2SM008007 Tomó David los escudos de oro que llevaban los de Hadadezer y los trajo a Jerusalén. 2SM008008 Tomó también gran cantidad de bronce en Tebaj y Berotai, ciudades de Hadadezer. 2SM008009 Cuando Tou, rey de Jamat, supo que David había derrotado a todas las fuerzas de Hadadezer, 2SM008010 mandó a Hadurán, su hijo, al rey David para saludarle y felicitarle por haber atacado y vencido a Hadadezer, pues Tou estaba constantemente en guerra con Hadadezer. Hadurán trajo vasos de oro, vasos de plata y vasos de bronce;' 2SM008011 y el rey David los consagró también a Yahvé, como había hecho con la plata y el oro de las gentes que había sometido, 2SM008012 de Edom, de Moab, de los hijos de Ammón, de los filisteos, de Amalee, y el botín que había tomado a Hadadezer, hijo de Rojob, rey de Soba. 2SM008013 David adquirió gran fama, y, de vuelta de la victoria de Siria, combatió en el valle de la Sal, derrotando a dieciocho mil edomitas. 2SM008014 Puso guarniciones en Edom, y todo Edom le quedó sometido. Yahvé le daba la victoria por dondequiera que iba. 2SM008015 Reinó David sobre todo Israel, haciendo derecho y justicia a todo su pueblo. 2SM008016 Joab, hijo de Sarvia, era el jefe del ejército; Josafat, hijo de Ajilud, era cronista;' 2SM008017 Sadoc y Abiatar, hijo de Ajimelec, hijo de Ajitub, eran sacerdotes; y Saraya, secretario.' 2SM008018 Banayas, hijo de Joyada, era el jefe de los cereteos y los feleteos, y los hijos de David eran sacerdotes. 2SM009001 David preguntó: “¿Queda todavía alguno de la casa de Saúl a quien pueda favorecer por amor a Jonatán?” 2SM009002 Había un servidor de la casa de Saúl, de nombre Siba; hiciéronle, pues, venir a David, y el rey le dijo: “¿Eres tú Siba?” El respondió: “Tu siervo.” 2SM009003 El rey le preguntó: “¿No queda ninguno de la casa de Saúl a quien pueda yo hacer misericordia de Dios?” Siba respondió al rey: “Queda todavía un hijo de Jonatán, que está lisiado de ambos pies.” 2SM009004 “¿Dónde está?” preguntó el rey; y Siba respondió: “Está en casa de Maquir, hijo de Amiel, en Lodabar.” 2SM009005 El rey David mandó a buscarle a la casa de Maquir, hijo de Amiel, a Lodabar;' 2SM009006 y, llegado a David Mefibaal, hijo de Jonatán, hijo de Saúl, se echó sobre su rostro, prosternándose, y David le dijo: “Mefibaal.” El respondió: “Aquí tienes a tu siervo.” 2SM009007 David le dijo: “Nada temas, porque quiero favorecerte por amor a Jonatán, tu padre. Te devolveré todas las tierras de Saúl, tu padre, y comerás siempre a mi mesa.” 2SM009008 El se prosternó y dijo: “¿Qué es tu siervo para que pongas tu vista en un perro muerto como yo?” 2SM009009 El rey llamó a Siba, servidor de Saúl, y le dijo: “Todo cuanto pertenece a Saúl y a toda su casa, se lo doy al hijo de tu amo. 2SM009010 Tú cultivarás para él las tierras, tú, tus hijos y tus siervos, y le traerás la cosecha, para que la casa de tu amo tenga de qué vivir, y Mefibaal, tu amo, comerá siempre a mi mesa.” Siba tenía quince hijos y veinte siervos;' 2SM009011 y dijo al rey: “Todo se hará como el rey, mi señor, se lo manda a su siervo.” Mefibaal comía a la mesa de David, como uno de los hijos del rey. 2SM009012 Mefibaal tenía un hijo pequeño, que se llamaba Mica, y todos los que vivían en la casa de Siba eran siervos de Mefibaal;' 2SM009013 pero éste moraba en Jerusalén, porque comía siempre a la mesa del rey; era cojo de ambos pies.' 2SM010001 Después de esto murió el rey de los hijos de Amón, y le sucedió Janón, su hijo. 2SM010002 David dijo: “Voy a mostrar benevolencia a Janón, hijo de Najas, como su padre me la mostró a mí.” Y envió David embajadores para darle el pésame por la muerte de su padre. Cuando los embajadores de David llega-ron a la tierra de los hijos de Amón, 2SM010003 dijeron los príncipes de los hijos de Amón a su señor: “¿Crees tú que para honrar a tu padre ha mandado David consoladores? ¿No los ha mandado más bien para explorar la ciudad con el fin de destruirla?” 2SM010004 Entonces Janón, tomando a los embajadores de David, rapóles la mitad de la barba y les cortó los vestidos hasta la mitad de las nalgas, y los despachó. 2SM010005 En cuanto lo supo David, mandó quienes les salieran al encuentro, porque aquéllos estaban en gran confusión, y les dijeran: “Quedaos en Jericó hasta que os vuelva a crecer la barba, y entonces volveréis.” 2SM010006 Viendo los hijos de Amón que se habían hecho odiosos a David, concertaron tomar a sueldo a veinte mil infantes de los sirios de Bet-Rojob y de Soba y doce mil de los reyes de Maaca y de Tob. 2SM010007 Súpolo David, y mandó salir contra ellos a Joab con todo el ejército y sus veteranos. 2SM010008 Salieron los hijos de Amón, y se ordenaron en batalla a la entrada de la puerta; los sirios de Soba y de Rojob, así como las gentes de Tob y de Maaca, estaban aparte en el campo.' 2SM010009 Al ver Joab que tenía un frente de batalla delante de sí y otro detrás, eligio entre lo mejor de su ejército un cuerpo que oponer a los sirios, 2SM010010 y puso el resto del pueblo a las órdenes de Abisaí, su hermano, para hacer cara a los hijos de Amón, 2SM010011 y dijo: “Si ves que los sirios me superan, vienes en mi ayuda, y si los hijos de Amón te superan a ti, yo iré a socorrerte. 2SM010012 Esfuérzate y luchemos valientemente por nuestro pueblo y por las ciudades de nuestro Dios, y que haga Yahvé lo que mejor le parezca.” 2SM010013 Avanzó Joab con su hueste para atacar a los sirios, pero éstos se pusieron en fuga ante él;' 2SM010014 y los hijos de Amón, viendo que huían los sirios, huyeron también ellos ante Abisaí, entrándose en la ciudad. Joab se volvió contra los hijos de Amón y retornó a Jerusalén;' 2SM010015 pero los sirios, viéndose vencidos por Israel, reconcentraron sus fuerzas;' 2SM010016 y Hadadezer hizo venir a los sirios que estaban al otro lado del río, que vinieron a Jelam, mandados por Sobac, jefe del ejército de Hadadezer. 2SM010017 Súpolo David, y, reuniendo a todo Israel, pasó el Jordán y vino a Jelam. Los sirios presentaron batalla a David y se trabó el combate;' 2SM010018 pero huyeron delante de Israel, y David les mató los caballos de setecientos carros, mil caballeros y cuarenta mil hombres de a pie. Mató también al jefe del ejército, Sobac, que quedó muerto allí. 2SM010019 Todos los reyes vasallos de Hadadezer, viéndose vencidos por Israel, hicieron la paz con Israel y se le sometieron, y los sirios no osaron ya socorrer a los hijos de Amón. 2SM011001 Al año siguiente, al tiempo en que los reyes suelen ponerse en campaña, mandó David a Joab con todos sus servidores y todo Israel. Mataron a los hijos de Amón y pusieron sitio en Raba, pero David se quedó en Jerusalén. 2SM011002 Una tarde levantóse del lecho y se puso a pasear en la terraza de la casa real, y vio desde allí a una mujer que estaba bañándose y era muy bella. 2SM011003 Hizo preguntar David quién era aquella mujer, y le dijeron: “Es Betsabé, hija de Eliam, mujer de Urías el jeteo.” 2SM011004 David envió gentes en busca suya; vino ella a su casa y él durmió con ella. Purificada de su inmundicia, volvióse a su casa.' 2SM011005 Quedó encinta y lo hizo saber a David, mandando a decirle: “Estoy encinta.” 2SM011006 Entonces David expidió a Joab esta orden: “Mándame a Urías el jeteo.” Y Joab mandó a Urías a David. 2SM011007 Presentóse Urías a David, y el rey le pidió nuevas de Joab, del ejército y de las operaciones militares, 2SM011008 y después dijo a Urías: “Baja a tu casa y lávate los pies.” Salió Urías de la casa del rey, y detrás de él un obsequio del rey;' 2SM011009 pero Urías se acostó a la puerta del palacio real, con los demás servidores de su señor, y no bajó a su casa. 2SM011010 Dijéronle a David: “Urías no ha bajado a su casa.” Y David le dijo: “Después de haber estado fuera, ¿cómo no has bajado a tu casa?” 2SM011011 Urías respondió a David: “El arca, Israel y Judá habitan en tiendas; mi señor, Joab y los servidores de mi señor acampan al raso, ¿e iba yo a entrar en mi casa para comer y beber y dormir con mi mujer? Por tu vida y por la vida de tu alma que no haré yo cosa semejante.” 2SM011012 David dijo a Urías: “Quédate aquí todavía hoy, y mañana te despacharé.” Quedóse, pues, Urías en Jerusalén aquel día;' 2SM011013 y al día siguiente David le convidó a comer con él, y Urías se embriagó, y salió ya tarde a acostarse con los servidores de su señor y no bajó a su casa. 2SM011014 A la mañana siguiente escribió David a Joab una carta y se la mandó por mano de Urías. 2SM011015 En esta carta había escrito: “Poned a Urías en el punto donde más dura sea la lucha, y cuando arrecie el combate, retiraos y dejadle solo, para que caiga muerto.” 2SM011016 Joab, que asediaba la ciudad, puso a Urías en el sitio donde sabía que estaban los más valerosos defensores. 2SM011017 Los de la ciudad hicieron una salida contra Joab, y cayeron muchos del pueblo, de los servidores de David, y entre ellos cayó muerto Urías el jeteo. 2SM011018 Joab mandó uno que informara a David de lo sucedido en el combate, 2SM011019 y le dio esta orden: “Cuando hayas acabado de contar al rey lo sucedido en el combate, 2SM011020 si se enciende su cólera y dice: “¿Por qué os habéis acercado a la ciudad para trabar combate? ¿No sabíais que los sitiados habían de arrojar sus tiros contra vosotros? 2SM011021 ¿Quién mató a Abimelec, hijo de Jerobaal? ¿No fue una mujer, que lanzó sobre él un pedazo de rueda de molino, de cuya herida murió en Tebes? ¿Por qué, pues, os acercasteis a la muralla?” le dirás: Tu siervo Urías el jeteo ha muerto también.” 2SM011022 Partió el mensajero al rey a Jerusalén, y a su llegada contó a David todo lo que Joab le había ordenado y todos los episodios del combate. David se dejó llevar de la cólera contra Joab y dijo al mensajero: “¿Por qué os habéis acercado a la ciudad? ¿No sabíais que lanzarían proyectiles desde lo alto de la muralla? Pues ¿quién hirió a Abimelec, hijo de Jerobaal? ¿No fue una mujer, que lanzó una muela de molino desde lo alto de la muralla y le hizo morir en Tebes? ¿Por qué, pues, os habéis acercado a la muralla?” 2SM011023 El mensajero dijo a David: “Porque aquellas gentes, en más número que nosotros, hicieron una salida, pero los rechazamos hasta la puerta. 2SM011024 Sus arqueros tiraban contra tus servidores desde lo alto de la muralla, y muchos de los servidores del rey fueron muertos: entre ellos tu siervo Urías el jeteo quedó muerto también.” 2SM011025 David dijo al mensajero: “He aquí lo que dirás a Joab: No te apures demasiado por este asunto, porque la espada devora unas veces a uno, otras veces a otro. Refuerza el ataque contra la ciudad y destruyela.” Y alentóle así. 2SM011026 La mujer de Urías supo la muerte de su marido y le lloró. 2SM011027 Pasado el duelo, mandó David a buscarla y la introdujo en su casa y la tomó por mujer, y ella le dio un hijo. Lo que había hecho David fue desagradable a los ojos de Yahvé. 2SM012001 Yahvé le envió el profeta Natán para decirle: “Juzga este caso: Había en una ciudad dos hombres, el uno rico y el otro pobre. 2SM012002 El rico tenía muchas ovejas y muchas vacas, 2SM012003 y el pobre no tenía más que una sola ovejuela, que él había comprado y criado, que con él y con sus hijos había crecido juntamente, comiendo de su pan y bebiendo de su vaso y durmiendo en su seno, y era para él como una hija. 2SM012004 Llegó un viajero a casa del rico, y éste, no queriendo tocar a sus ovejas ni a sus bueyes para dar de comer al viajero que a su casa llegó, tomó la ovejuela del pobre y se la aderezó al huésped.” 2SM012005 Encendido David fuertemente en cólera contra aquel hombre, dijo a Natán: “¡Vive Yahvé, que el que tal hizo es digno de la muerte, 2SM012006 y que ha de pagar la oveja con cuatro tantos encima por haber hecho tal cosa, obrando sin piedad!” 2SM012007 Natán dijo entonces a David: “¡Tú eres ese hombre! He aquí lo que dice Yahvé, Dios de Israel: Yo te ungí rey de Israel y te libré de las manos de Saúl;' 2SM012008 yo te he dado la casa de tu señor, y he puesto en tu seno las mujeres de tu señor, y te he dado la casa de Israel y de Judá; y, por si esto fuera poco, te añadiría todavía otras cosas mucho mayores.' 2SM012009 ¿Cómo, pues, menospreciando a Yahvé, has hecho lo que es malo a sus ojos? Has herido a espada a Urías, jeteo; tomaste por mujer a su mujer, y a él le mataste con la espada de los hijos de Amón.' 2SM012010 Por eso no se apartará ya de tu casa la espada, por haberme menospreciado, tomando por mujer a la mujer de Urías, jeteo. 2SM012011 Así dice Yahvé: “Yo haré surgir el mal contra ti de tu misma casa, y tomaré ante tus mismos ojos tus mujeres y se las daré a otro, que yacerá con ellas a la cara misma de este sol;' 2SM012012 porque tú has obrado ocultamente, pero yo haré esto a la presencia de todo Israel y a la cara del sol.” 2SM012013 David dijo a Natán: “He pecado contra Yahvé.” Y Natán dijo a David: “Yahvé te ha perdonado tu pecado. No morirás;' 2SM012014 mas, por haber hecho con esto que menospreciasen a Yahvé sus enemigos, el hijo que te ha nacido morirá.” 2SM012015 Y Natán se fue a su casa. Hirió Yahvé al niño que había dado a luz la mujer de Urías, que enfermó gravemente. 2SM012016 Entonces rogó David a Dios por el niño y ayunó y se recogió, pasando las noches acostado en tierra. 2SM012017 Los ancianos de su casa fueron a él para hacer que se levantase de la tierra, mas él no quiso, y ni comía con ellos. 2SM012018 Al séptimo día murió el niño, y los servidores no se atrevían a darle la noticia de su muerte, pues se decían: “Si cuando aún vivía el niño le hablábamos y no quería oír nuestra voz, ¿cuánto más no lo hará cuando le digamos que el niño ha muerto?” 2SM012019 Mas David, al ver que sus servidores cuchicheaban entre sí, comprendió que el niño había muerto, y preguntó a sus servidores: “¿Ha muerto el niño?” Y ellos le respondieron: “Ha muerto.” 2SM012020 Levantóse entonces de tierra David; se bañó, se ungió, se mudó sus ropas y, entrando en la casa de Yahvé, oró. Vuelto a casa, pidió que le trajeran de comer, y comió.' 2SM012021 Dijéronle sus servidores: “¿Qué es lo que haces? Cuando el niño aún vivía, ayunabas por él y llorabas, y ahora que ha muerto te has levantado y has comido.” 2SM012022 Y él respondió: “Cuando aún vivía el niño, ayunaba y lloraba, diciendo: i Quién sabe si Yahvé se apiadará de mí y hará que el niño viva! 2SM012023 Ahora que ha muerto, ¿para qué he de ayunar? ¿Podré ya volverle la vida? Yo iré a él, pero él no vendrá más a mí.” 2SM012024 Consoló David a Betsabé, su mujer, y, entrando a ella, durmió con ella, y ella le dio un hijo, a quien llamó Salomón, 2SM012025 al que amó Yahvé, que envió a Natán profeta, el cual le dio el nombre de Jedidia por causa de Yahvé. 2SM012026 Joab, que asediaba Raba, de los hijos de Amón, se apoderó de la ciudad de las aguas 2SM012027 y mandó mensajeros a David para decirle: “He atacado a Raba y ya me he apoderado de la ciudad de las aguas;' 2SM012028 reúne, pues, al pueblo todo y ven a acampar contra la ciudad, para que no sea yo quien por mí mismo la tome y sea llamada con mi nombre.” 2SM012029 David reunió al pueblo, y, marchando contra Raba, la atacó y se apoderó de ella. 2SM012030 Quitó la corona de Milcom de sobre su cabeza, que pesaba un talento de oro. Tenía una piedra preciosa, y fue puesta en la cabeza de David, que tomó de la ciudad muy gran botín. 2SM012031 A los habitantes los sacó de la ciudad y los puso a las sierras, a los trillos herrados, a las hachas, a los molinos y a los hornos de ladrillos. Eso mismo hizo con todas las ciudades de los hijos de Amón. Después se tornó David a Jerusalén con todo el pueblo. 2SM013001 Después de esto sucedió que, teniendo Absalón, hijo de David, una hermana, que era muy bella y se llamaba Tamar, se prendó de ella Amnón, hijo de David. 2SM013002 Amnón andaba por ella atormentado, hasta enfermar por Tamar, su hermana; pues siendo ella virgen, le parecía a Amnón difícil obtener nada de ella.' 2SM013003 Tenía Amnón un amigo de nombre Jonadab, hijo de Simea, hermano de David, que era muy astuto, 2SM013004 y que le dijo: “Hijo de rey, ¿cómo y por qué de día en día vas enflaqueciendo? ¿No me lo descubrirás a mí?” Y Amnón le dijo: “Es que estoy enamorado de Tamar, la hermana de Absalón, mi hermano.” 2SM013005 Jonadab le dijo: “Métete en cama y hazte el enfermo, y cuando tu padre venga a verte, dile: Ruégote que venga mi hermana Tamar para darme de comer, y preparando delante de mí algún manjar, lo coma yo de su mano.” 2SM013006 Amnón se metió en cama, fingiéndose enfermo. Vino el rey a verle, y Amnón le dijo: “Te ruego que Tamar, mi hermana, venga a hacerme delante de mí un par de hojuelas y las coma yo de su mano.” 2SM013007 David mandó a decir a Tamar a sus habitaciones: “Vete a las habitaciones de tu hermano Amnón a prepararle algo de comer.” 2SM013008 Fue Tamar a las habitaciones de Amnón, que estaba en la cama, y, tomando la harina, la amasó, hizo las hojuelas delante de él, 2SM013009 y, tomando la sartén, las frió y se las presentó; pero él no quiso comerlas, y dijo: “Que salgan todos de aquí,” y todos se salieron.' 2SM013010 Entonces dijo Amnón a Tamar: “Trae las hojuelas a la alcoba, para que yo las coma allí de tu mano,” y, tomando Tamar las hojuelas que había preparado, se las llevó a su hermano a la alcoba. 2SM013011 Cuando se las puso delante para que las comiese, él, cogiéndola, le dijo: “Ven, hermana mía, acuéstate conmigo.” 2SM013012 Ella le dijo: “No, hermano mío, no me hagas fuerza; mira que no se hace eso en Israel. No hagas tal infamia,' 2SM013013 porque ¿adonde iría yo con mi deshonra? Y tú serías uno de los perversos de Israel. Mira, habla al rey, que seguramente no rehusará darme a ti.” 2SM013014 Pero él no quiso darle oídos, y, como era más fuerte que ella, la violentó y se echó con ella. 2SM013015 Aborrecióla luego Amnón con tan gran aborrecimiento, que el odio que le tomó fue todavía mayor que el amor con que la había amado; y le dijo: “Levántate y vete.” 2SM013016 Ella le respondió• “No, hermano mío, porque, si me echas, este mal será mayor que el que acabas de cometer contra mí.” Pero él no quiso oírla, 2SM013017 y, llamando al mozo que le servía, le dijo: “Échame a ésta fuera de aquí y cierra la puerta.” 2SM013018 Estaba ella vestida con una túnica de mangas, traje que llevaban en otro tiempo las hijas del rey vírgenes. El criado la echó fuera y cerró tras ella la puerta. 2SM013019 Tamar echó ceniza sobre su cabeza, rasgó la amplia túnica que vestía y, puestas sobre la cabeza las manos, se fue gritando. 2SM013020 Su hermano Absalón le dijo: “¿De modo que tu hermano Amnón ha estado contigo? Pues calla por ahora, hermana; es tu hermano; no des demasiada importancia a la cosa; y Tamar se quedó desconsolada en la casa de Absalón, su hermano.' 2SM013021 Cuando el rey supo todo esto, enojóse grandemente, pero no quiso castigar a Amnón, porque le amaba como a primogénito. 2SM013022 Absalón no dijo a Amnón nada, ni de bueno ni de malo, pero le odió por la violación de su hermana Tamar. 2SM013023 Al cabo de dos años tenía Absalón el esquileo en Baljasor, que está cerca de Efraím, y quiso convidar Absalón a todos los hijos del rey. 2SM013024 Vino Absalón al rey y le dijo: “Tu siervo tiene ahora el esquileo; te ruego que venga el rey y sus siervos a la casa de tu siervo.” 2SM013025 El rey respondió a Absalón: “No, hijo mío, no iremos todos para no serte gravosos.” Y aunque le porfió, no quiso ir, y le bendijo. 2SM013026 Entonces le dijo Absalón: “Al menos permite que venga Amnón, mi hermano.” “Y qué ha de ir?” le dijo el rey;' 2SM013027 (TEXTO OMITIDO) 2SM013028 y había dado orden a sus criados, diciendo: “Estad atentos, y cuando el corazón de Amnón se haya alegrado con el vino y os diga yo: Herid a Amnón, matadle, y no temáis, que yo os lo mando. Esforzaos, pues, y tened valor.” 2SM013029 Los criados de Absalón hicieron con Amnón lo que Absalón les había mandado; y luego todos los hijos del rey se levantaron, montaron en sus mulos y huyeron.' 2SM013030 Cuando todavía no estaban de vuelta, llegó a oídos de David el rumor de que Absalón había matado a todos los hijos del rey, sin que ninguno quedara;' 2SM013031 y, levantándose David, rasgó sus vestiduras y se echó en tierra, y todos sus servidores rasgaron delante de él sus vestiduras. 2SM013032 Jonadab, hijo de Simea, hermano de David, habló y dijo: “No crea mi señor que han muerto todos los jóvenes hijos del rey; es Amnón sólo el que ha muerto, porque era cosa que estaba en los labios de Absalón desde que Amnón forzó a Tamar, su hermana.' 2SM013033 No crea, pues, mi señor el rey ese rumor que dice: “Han muerto todos los hijos del rey,” porque es sólo Amnón el muerto. 2SM013034 Y Absalón huyó.” El joven que hacía de centinela, alzando los ojos, vio venir gran tropel de gentes por el camino de Joronaím, en la bajada, y lo anunció al rey: “He visto gentes que vienen por el camino de Joronaím, por la falda de la montaña.” 2SM013035 Entonces dijo Jonadab al rey: “Ya vienen los hijos del rey; es lo que tu siervo ha dicho”;' 2SM013036 y apenas acabó de hablar, llegaron los hijos del rey, y, alzando la voz, lloraron. También el rey y sus servidores lloraron con grandes lamentos. 2SM013037 Absalón fuese huido a Talmai, hijo de Amiud, rey de Guesur, a la tierra de Maaca, y David lloraba todos los días la ausencia de su hijo. 2SM013038 Estuvo allí Absalón, después que huyó a Guesur, tres años;' 2SM013039 y rey David se consumía por ver a Absalón, pues de Amnón el muerto, ya se había consolado. 2SM014001 Conociendo Joab, hijo de Sarvia, que el corazón del rey estaba por Absalón, 2SM014002 mandó a Tecua y trajo de allí una mujer ladina, y le dijo: “Mira, enlútate, vístete las ropas de duelo, no te unjas con óleo, antes preséntate como mujer que de tiempo atrás lleva luto por un muerto, 2SM014003 y, entrando al rey, habíale de esta manera”; y puso Joab en boca de la mujer lo que había de decir.' 2SM014004 Entró, pues, la mujer de Tecua al rey; y postrándose en tierra, le hizo reverencia y dijo: “¡Oh rey, sálvame!” 2SM014005 El rey le dijo: “¿Qué tienes?”; y ella respondió: “Soy una mujer viuda, murió mi marido,' 2SM014006 y tenía tu sierva dos hijos. Riñeron los dos en el campo, donde no había quien los separase, y el uno, hiriendo al otro, le mató;' 2SM014007 y he aquí que toda la parentela, alzándose contra tu sierva, dice: Entréganos al que mató a su hermano, para que le demos muerte por la vida de su hermano, a quien mató él; y quieren matar al heredero, apagando así el ascua que me ha quedado y no dejando a mi marido ni nombre ni sobreviviente sobre la tierra.” 2SM014008 El rey dijo a la mujer: “Vete a tu casa, que ya daré yo órdenes sobre lo tuyo.” 2SM014009 Entonces dijo la mujer de Tecua al rey: “Rey, mi señor, yo querría que la responsabilidad recayera sobre mí y sobre la casa de mi padre, no sobre el rey y sobre su trono.” 2SM014010 El rey entonces respondió: “Si alguno sigue inquietándote, tráelo a mí, que no te inquietará más.” 2SM014011 Ella entonces dijo: “Ruégote, oh rey! que interpongas el nombre de Yahvé, tu Dios, y no dejes que el vengador de la sangre aumente la ruina matando a mi hijo.” Y él respondió: “Vive Yahvé que no caerá en tierra ni un cabello de la cabeza de tu hijo.” 2SM014012 La mujer añadió: “Permite, ¡oh rey! a tu sierva que diga una palabra a mi señor.” El rey dijo: “Habla.” 2SM014013 Y la mujer entonces dijo: “¿Por qué, pues, piensas tú de otro modo contra el pueblo de Dios? Pues con el juicio que el rey ha pronunciado se hace como reo por no hacer el rey que vuelva su fugitivo. 2SM014014 Porque todos morimos y somos como agua que se derrama en la tierra, que no puede volver a recogerse; que Dios no hace volver las almas. Medite, pues, el rey cómo el fugitivo no quede arrojado de su presencia.' 2SM014015 Si he venido yo a decir esto al rey, mi señor, es porque el pueblo me dio miedo” y me dije: “Voy a hablar al rey, a ver si hace lo que su sierva le diga. 2SM014016 Seguramente el rey escuchará a su sierva y la librará de la mano del que quiere raerme a mí, juntamente con mi hijo, de la heredad de Dios, 2SM014017 Tu sierva ha dicho: Que me tranquilice la palabra de mi señor el rey, ya que es el rey, mi señor, como el ángel de Dios para discernir entre lo bueno y lo malo. Y ahora que Yahvé, tu Dios, sea contigo.” 2SM014018 El rey entonces dijo a la mujer: “Mira, no me ocultes nada de lo que voy a preguntarte.” Y la mujer respondió: “Hable el rey, mi señor.” 2SM014019 El rey le dijo: “¿No anda en todo esto la mano de Joab?” Y la mujer respondió: “Por tu vida, oh rey, mi señor! que no se aparta lo que el rey, mi señor, dice ni a la derecha ni a la izquierda. Joab, tu siervo, me ha mandado y ha puesto en la boca de tu sierva todas estas palabras. 2SM014020 Joab, tu siervo, ha hecho esto para ver de mudar el aspecto de las cosas. Pero mi señor es sabio, con la sabiduría de un ángel de Dios, para conocer cuanto pasa en la tierra.” 2SM014021 Entonces el rey dijo a Joabí “Voy a hacer según tu deseo. Ve, pues, y haz que vuelva el joven Absalón.” 2SM014022 Joab se echó rostro a tierra y se prosternó, y, bendiciendo al rey, dijo: “Ahora comprendo que tu siervo ha hallado gracia a tus ojos, ¡oh rey, mi señor! pues ha hecho el rey lo que su siervo le ha dicho.” 2SM014023 Levantóse luego Joab y se fue a Guesur, y trajo consigo a Absalón a Jerusalén. 2SM014024 Pero el rey dijo: “Que se vaya a su casa y no se me presente,” y fuese Absalón a su casa sin ver al rey. 2SM014025 No había en todo Israel hombre tan hermoso como Absalón; desde la planta de los pies hasta la cabeza no había en él defecto;' 2SM014026 y cuando se cortaba el pelo, cosa que hacía al fin de cada año, porque le molestaba, y por eso se lo cortaba, pesaba el cabello de su cabeza doscientos siclos, peso real. 2SM014027 Naciéronle a Absalón tres hijos y una hija, de nombre Tamar, que era hermosísima. 2SM014028 por dos años estuvo Absalón en Jerusalén sin poder ver al rey. 2SM014029 Mandó Absalón por Joab para enviarle al rey, pero Joab se negó a ir, y aunque por segunda vez le llamó, no quiso ir. 2SM014030 Entonces dijo a sus siervos: “Ya sabéis que el campo de Joab está junto al mío y que tiene allí su cebada; id y prended-le fuego.” Y los siervos de Absalón pegaron fuego a las tierras de Joab. Vinieron entonces los siervos de Joab, rasgadas las vestiduras, y le dijeron: “Los siervos de Absalón han pegado fuego a tu campo.” 2SM014031 Levantóse Joab y vino a casa de Absalón, y le dijo: “¿Por qué han pegado fuego tus siervos a mis tierras?” 2SM014032 Y Absalón le respondió: “Dos veces te he mandado a llamar para que vinieses y fueses por mí al rey a decirle: ¿Para qué he venido de Guesur? Mejor me hubiera sido estarme allí. Que pueda yo ver la faz del rey, y si soy culpable, máteme.” 2SM014033 Fue, pues, Joab al rey y le dijo esto, y el rey llamó a Absalón, que inclinó a tierra su rostro ante el rey, y el rey besó a Absalón. 2SM015001 Después de esto se hizo Absalón con un carro y caballos, y cincuenta hombres iban delante de él. 2SM015002 Levantábase Absalón bien de mañana, y, poniéndose junto al camino de la Puerta, a cualquiera que tenía un pleito y venía a juicio ante el rey, le llamaba Absalón y le decía: “¿De dónde eres?” Y él contestaba: “Tu siervo es de tal o cuál de las tribus de Israel.” 2SM015003 Entonces Absalón le decía: “Mira, tu causa es buena y justa, pero no tendrás quien por el rey te oiga. 2SM015004 ¡Quién me pusiera a mí por juez de la tierra, para que viniesen a mí cuantos tienen algún pleito o algún negocio, y yo les haría justicia!” 2SM015005 Y cuando alguno quería postrarse ante él, él le tendía la mano, le cogía y le besaba. 2SM015006 De esta suerte obraba Absalón con todos los israelitas que venían al rey en demanda de justicia, y así robaba el corazón de Israel. 2SM015007 Al cabo de cuatro años dijo Absalón al rey: “Te ruego que me permitas ir a Hebrón, a cumplir un voto que he hecho a Yahvé;' 2SM015008 porque cuando tu siervo estaba en Guesur, en Siria, prometí: Si Yahvé me vuelve a Jerusalén, sacrificaré a Yahvé.” 2SM015009 El rey le dijo: “Ve en paz”; y él se levantó y se fue a Hebrón.' 2SM015010 Absalón mandó mensajeros por todas las tribus de Israel, diciendo: “Cuando oigáis sonar la trompeta, gritad: Absalón reina en Hebrón.” 2SM015011 De Jerusalén fueron con Absalón doscientos hombres invitados, con corazón sencillo, que nada sabían. 2SM015012 También mandó llamar Absalón a Ajitofel, guilonita, del consejo de David, a su ciudad de Güilo, que estuvo con él mientras hacía sus sacrificios. La conjuración iba creciendo, y llegó a ser grande, pues iban aumentando los secuaces de Absalón. 2SM015013 Vinieron a avisar a David, diciendo: “Todo Israel se va tras Absalón.” 2SM015014 Entonces David dijo a todos sus servidores, que estaban con él en Jerusalén: “Levantaos y huyamos, porque no podríamos escapar delante de Absalón. Daos prisa a salir, no sea que nos sorprenda él y eche sobre nosotros el mal, y pase la ciudad a filo de espada.” 2SM015015 Los servidores le dijeron: “Tus siervos están dispuestos a hacer cuanto mande el rey nuestro señor.” 2SM015016 Partióse, pues, el rey a pie, seguido de toda su familia” dejando diez concubinas al cuidado de la casa. 2SM015017 El rey salió con toda su gente a pie, y se detuvieron en una casa alejada. 2SM015018 Todos sus servidores iban a sus lados; los cereteos, los feleteos y las gentes de Itaí, jeteo, en número de seiscientos, que desde Gat le habían seguido, marchaban a pie delante del rey.' 2SM015019 El rey dijo a Itaí el jeteo: “¿Por qué has de venir tú también con nosotros? Vuélvete y quédate con el rey, pues tú eres un extranjero y estás fuera de tu tierra sin domicilio. 2SM015020 Ayer llegaste, ¿y voy a hacerte hoy errar con nosotros, cuando ni yo mismo sé siquiera adonde voy? Vuélvete y lleva contigo a tus hermanos, y Yahvé use contigo de gracia y de verdad. 2SM015021 Pero Itaí respondió al rey, diciendo: “Vive Dios, y vive mi señor el rey, que donde mi señor esté, vivo o muerto, allí estará tu siervo.” 2SM015022 Entonces dijo David a Itaí: “Ven y pasa”; y pasó Itaí, jeteo, con toda su gente y su familia.' 2SM015023 Todos iban llorando en alta voz, y pasaron el torrente de Cedrón el rey y todo el pueblo, siguiendo el camino del olivar que se halla en el desierto. 2SM015024 Iban también Sadoc y Abiatar, y con ellos todos los levitas, que llevaban el arca de la alianza de Dios. Detuviéronse con el arca de la alianza de Dios hasta que toda la gente se hubo salido de la ciudad. 2SM015025 Entonces dijo el rey a Sadoc y a Abiatar: “Volved el arca de Dios a la ciudad y quédese en su lugar. Si hallo gracia a los ojos de Yahvé, El me volverá a traer y me hará volver a ver el arca y el tabernáculo. 2SM015026 Pero si El dice: No me complazco en ti, aquí me tiene, haga El conmigo lo que bien le parezca.” 2SM015027 Y siguió diciendo a Sadoc: “Tú y Abiatar volveos en paz a la ciudad con Ajimas, tu hijo, y con Jonatán, hijo de Abiatar. Vayan vuestros dos hijos con vosotros. 2SM015028 Yo esperaré en las llanuras del desierto hasta que me llegue de vosotros algún aviso.” 2SM015029 Volviéronse entonces Sadoc y Abiatar a Jerusalén, llevando el arca de Dios, y se quedaron allí. 2SM015030 Subía David la pendiente del monte de los Olivos, y subía llorando, cubierta la cabeza y descalzos los pies. También cuantos le seguían cubriéronse todos la cabeza, y subían llorando. 2SM015031 Dieron aviso a David de que Ajitofel estaba entre los conjurados, y dijo David: “Confunde, ¡oh Yahvé! el consejo de Ajitofel.” 2SM015032 Cuando llegó David a la cumbre, donde se adora a Yahvé, llegó ante él Cusaí el arquita, amigo de David, rasgadas las vestiduras y cubierta de polvo la cabeza, 2SM015033 y le dijo David: “Si vienes eonmigo, me serías una carga;' 2SM015034 si, por el contrario, te vuelves a la ciudad y dices a Absalón: ¡Oh rey, siervo tuyo soy; como he servido a tu padre, así te serviré a ti! podrás confundir el consejo de Ajitofel en favor mío;' 2SM015035 tendrás contigo a los sacerdotes Sadoc y Abiatar y podrás comunicarles cuanto sepas de la casa del rey. 2SM015036 Y como tendrán consigo a sus dos hijos, Ajimas, hijo de Sadoc, y Jonatán, hijo de Abiatar, por ellos podréis informarme de lo que sepáis.” 2SM015037 Cusaí, amigo de David, se tornó a la ciudad cuando Absalón hacía su entrada en ella. 2SM016001 Cuando David hubo traspuesto la cumbre, Siba, el siervo de Mefibaal, vino a él con dos asnos aparejados y cargados de doscientos panes, cien colgajos de uvas pasas y un pellejo de vino;' 2SM016002 y dijo el rey a Siba: “¿Qué es esto?” Y Siba respondió: “Los asnos son para la familia del rey, para que monte en ellos; los panes y las tortas de higos y las pasas, para que coman; y el vino, para que beban los que desfallezcan en el desierto.” 2SM016003 El rey le preguntó: “¿Con quién está el hijo de tu amo?”; y Siba respondió: “Se ha quedado en Jerusalén, diciendo: Hoy me devolverá la casa de Israel el reino de mi padre.” 2SM016004 Y el rey dijo a Siba: “Tuyo será cuanto fue de Mefibaal.” Siba respondió: “Que halle yo gracia a los ojos del rey, mi señor.” 2SM016005 Cuando llegó el rey a Bajurim, salióle al encuentro un hombre de los de la casa de Saúl, de nombre Semeí, hijo de Güera, que se adelantó profiriendo maldiciones 2SM016006 y tirando piedras a David y a los servidores de David, aunque iban los hombres de guerra a la derecha y a la izquierda del rey. 2SM016007 Semeí decía maldiciendo: “¡Vete, vete, hombre sanguinario y malvado 2SM016008 Yahvé hace recaer sobre tu cabeza toda la sangre de la casa de Saúl, cuyo reino has usurpado, y ha entregado tu reino en manos de Absalón, tu hijo. Te ha dado lo que tú mereces, porque eres un hombre sanguinario.” 2SM016009 Entonces Abisaí, hijo de Sarvia, dijo al rey: “¿Cómo se atreve ese maldito perro muerto a maldecir al rey? Déjame, te ruego, que vaya a cortarle la cabeza”;' 2SM016010 pero el rey le respondió: “¿Qué tenéis que ver conmigo, hijos de Sarvia? Dejadle que maldiga, que si Yahvé le ha dicho: Maldice a David, ¿quién va a decirle: Por qué lo haces?” 2SM016011 David dijo a Abisaí y a todos sus seguidores: “Ya veis que mi hijo, salido de mis entrañas, busca mi vida; con mucha más razón ese hijo de Benjamín. Dejadle maldecir, pues se lo ha mandado Yahvé.' 2SM016012 Quizá Yahvé mirará mi aflicción y me pagará con favores las maldiciones de hoy.” 2SM016013 Y David y sus gentes prosiguieron su camino, mientras iba Semeí por el lado del monte, detrás de David, sin dejar de maldecirle y tirarle piedras y tierra. 2SM016014 El rey y los que con él iban llegaron extenuados, y descansaron allí. 2SM016015 Cuando Absalón, llevando con él a Ajitofel, entró en Jerusalén con todo el pueblo, los hombres de Israel, 2SM016016 Cusaí el arquita, amigo de David, vino a su encuentro, diciendo: “I Viva el rey, viva el rey!” 2SM016017 Absalón dijo a Cusaí: “¿Es ese el pago que das a tu amigo? ¿Por qué no te has ido con tu amigo?” 2SM016018 Cusaí dijo a Absalón: “No, yo soy de aquel a quien Yahvé y todo su pueblo, todos los hombres de Israel, han elegido, y con ése quiero estar. 2SM016019 Por lo demás, ¿a quién voy a servir? ¿No es a un hijo suyo? Como servía a tu padre, así te serviré a ti.” 2SM016020 Absalón dijo a Ajitofel: “Tened consejo para ver lo que conviene hacer”;' 2SM016021 y Ajitofel dijo a Absalón: “Entra a las concubinas que tu padre ha dejado al cuidado de la casa, y así sabrá todo Israel que has roto del todo con tu padre, y se fortalecerán las manos de cuantos te siguen. 2SM016022 Levantóse, pues, para Absalón una tienda en la terraza, y entró a las concubinas de su padre a los ojos de todo Israel. 2SM016023 Consejo que daba Ajitofel era mirado como si fuera palabra de Yahvé; tal era la confianza que el consejo de Ajitofel inspiraba lo mismo a David que a Absalón.' 2SM017001 Ajitofel dijo a Absalón: “Voy a elegir doce mil hombres para salir esta noche en persecución de David, 2SM017002 y cargaré sobre él cuando esté cansado y flaco de fuerzas; le atemorizaré, y cuantos le siguen huirán, y heriré al rey solo.' 2SM017003 y haré que vengan a ti todos sus partidarios, el pueblo todo, como viene la novia a su novio. Es el alma de un solo hombre la que tú buscas, y todo el pueblo quedará en paz.” 2SM017004 Agradó este consejo a Absalón y a todos los ancianos de Israel;' 2SM017005 pero Absalón dijo: “Llamad a Cusaí el arquita y sepamos su parecer.” 2SM017006 Vino Cusaí a Absalón, y Absalón le dijo: “Esto ha dicho Ajitofel. ¿Hemos de hacer lo que él dice? Si no, habla tú.” 2SM017007 Y Cusaí respondió a Absalón: “Por esta vez el consejo de Ajitofel no es bueno.” 2SM017008 Tú sabes bien que tu padre y sus gentes son unos valientes, y exasperarlos sería co*no si en el campo a una osa le arrebataran su cría, o como un jabalí enfurecido en el desierto. Tu padre es hombre de guerra, y seguramente no pasará la noche entre los suyos. 2SM017009 De cierto que estará escondido en alguna caverna o en otro lugar, y si a los comienzos cayeran algunos de los tuyos, los que lo oyeran seguramente dirían: Han sido derrotados los secuaces de Absalón;' 2SM017010 y entonces aun el valiente cuyo corazón sea como el corazón de un león desmayaría, porque todo Israel sabe que tu padre es un valiente, y que son valientes también los que con él están. 2SM017011 Aconsejóte, pues, que reúnas a todo Israel, desde Dan hasta Berseba, en muchedumbre como las arenas que están a la orilla del mar, y que tú en persona vayas a darle la batalla. 2SM017012 Entonces le atacaremos dondequiera que esté, y daremos sobre él como rocío que cae sobre la tierra, y no dejaremos ni uno de cuantos con él están. 2SM017013 Y si se acogiere a la ciudad, todos los de Israel llevarán allá cuerdas, y la arrastraremos al arroyo, hasta no quedar en ella piedra sobre piedra. 2SM017014 Entonces Absalón y todos los de Israel dijeron: “El consejo de Cusaí el arquita es mejor que el de Ajitofel”; porque había dispuesto Yahvé frustrar el acertado consejo de Ajitofel para traer Yahvé el mal sobre Absalón.' 2SM017015 Dijo luego Cusaí a Sadoc y a Abiatar, sacerdotes: “Esto y esto ha aconsejado Ajitofel a Absalón y a los ancianos de Israel y esto y esto aconsejé yo. 2SM017016 Enviad, pues, inmediatamente a dar aviso a David, diciendo: “No te quedes esta noche en el campo del desierto; pasa en seguida, para que no sea destruido el rey con todos los que le siguen.” 2SM017017 Jonatán y Ajimas estaban junto a la fuente de Roguel, porque no podían dejarse ver viniendo a la ciudad; y allá fue una sierva para darles aviso y que ellos lo hicieran luego llegar al rey David.' 2SM017018 Viólos, sin embargo, un mozo, que dio cuenta de ello a Absalón; pero ellos se apresuraron y llegaron a la casa de un hombre de Bajurim que tenía un pozo en el patio, y en él se metieron.' 2SM017019 Tomó la mujer una manta y cubrió con ella la boca del pozo, poniendo sobre ella el grano trillado, y así nadie pudo percatarse de la cosa. 2SM017020 Llegaron los seguidores de Absalón a la casa de la mujer y le preguntaron: “¿Dónde están Ajimas y Jonatán?” Y la mujer respondió: “Ya han pasado el arroyo.” Y, aunque los buscaron, no los hallaron y se volvieron a Jerusalén. 2SM017021 Cuando se hubieron ido, salieron del pozo y fuéronse luego a dar el aviso a David, diciéndole: “Pasad luego el vado, porque Ajitofel ha dado este consejo contra vosotros.” 2SM017022 Levantóse entonces David con todo el pueblo que con él estaba, y pasaron el Jordán, y al alba no quedaba uno que no hubiera pasado el Jordán. 2SM017023 Ajitofel, viendo que no se había seguido su consejo, aparejó su asno, levantóse, se fue a su casa de la ciudad y, después de tomar disposiciones acerca de su casa, se ahorcó, y, muerto, fue sepultado en el sepulcro de su padre. 2SM017024 Llegó David a Majanaím, y Absalón pasó el Jordán con toda la gente de Israel. 2SM017025 Absalón hizo jefe de su ejército a Amasa en vez de Joab. Era Amasa hijo de un varón ismaelita llamado Jitra, casado con Abigal, hija de Isaí, hermana de Sarvia, madre de Joab. 2SM017026 Asentó su campo Israel con Absalón en tierra de Galaad;' 2SM017027 y en cuanto llegó David a Majanaím, 2SM017028 Sobi, hijo de Najas, de Raba, de los hijos de Amón, y Maquir, hijo de Amiel, de Lodabar, con Barzilai, galadita, de Roguelim, trajeron a David y a la gente que con él estaba camas, alfombras, calderas y vasijas de barro, trigo, cebada y harina, grano tostado, habas, lentejas y legumbres tostadas, 2SM017029 miel, manteca, ovejas y quesos de vaca, y ofrecieron todo esto a David y a los que con él estaban para que comiesen, pues se dijeron: “Seguramente están hambrientos, fatigados y sedientos en el desierto.” 2SM018001 David revistó las tropas y puso al frente de ellas jefes de millares y de centenas;' 2SM018002 una tercera parte, a las órdenes de Joab; una tercera, a las de Abisaí, hijo de Sarvia, hermano de Joab, y la otra tercera a las de Itaí el jeteo. El rey dijo a su gente: “Yo saldré también con vosotros.” 2SM018003 Pero la gente respondió: “No, no salgas tú, porque, si somos vencidos, no importaría mucho aunque sucumbiéramos la mitad de nosotros. Pero tú, tú eres para nosotros como diez mil, y es mejor que puedas salir de la ciudad a socorrernos.” 2SM018004 El rey respondió: “Haré como os parece.” Estúvose el rey cerca de la puerta, mientras por grupos de mil y de ciento salía la gente, 2SM018005 y dio esta orden a Joab, a Abisaí y a Itaí: “Preservad por amor mío la vida del joven Absalón”; y todo el pueblo oyó esta orden que dio David a todos los jefes.' 2SM018006 Salió, pues, la gente al campo contra Israel y trabóse la batalla en los bosques de Efraím. 2SM018007 Allí sucumbió el pueblo de Israel ante los seguidores de David y se hizo una gran matanza, de veinte mil hombres. 2SM018008 Dispersóse la gente por toda aquella tierra, y fueron más los que devoró el bosque que los que aquel día hirió la espada. 2SM018009 Al encontrarse Absalón con las gentes de David, iba montado en un mulo; y al pasar en el mulo debajo de una encina muy grande y copuda, quedó aprisionada su cabeza entre las ramas de la encina, quedando colgado entre el cielo y la tierra, mientras el mulo en que iba montado escapaba.' 2SM018010 Vio esto uno, y le dijo a Joab: “He visto a Absalón pendiente de una encina.” 2SM018011 Joab le dijo: “¿Y por qué no le echaste a tierra, y yo te hubiera regalado diez siclos de plata y un talabarte?” 2SM018012 Pero aquel hombre le dijo: “Aunque me pesaras mil de plata, no pondría yo la mano sobre el hijo del rey, pues bien oímos todos que a ti, a Abisaí y a Itaí os dijo el rey: “Guardadme a Absalón.” 2SM018013 Además, haría yo traición a mi vida, pues al rey nada se le esconde, y tú mismo testificarías contra mí.” 2SM018014 Joab le dijo entonces: “No será así, yo mismo le atravesaré delante de ti”; y cogiendo tres dardos en sus manos, se los clavó en el corazón a Absalón, que todavía vivía, pendiente de la encina.' 2SM018015 Cercáronle luego diez mozos, escuderos de Joab, que hirieron a Absalón, acabándole. 2SM018016 Entonces tocó Joab la trompeta, y el pueblo cesó en la persecución de Israel, porque Joab dio esta orden;' 2SM018017 y cogiendo a Absalón, echáronle en un gran hoyo en el bosque y lo cubrieron con un gran montón de piedras, e Israel huyó cada uno a su casa. 2SM018018 Habíase alzado Absalón en vida un monumento en el valle del rey, diciendo: “Para que se conserve la memoria de mi nombre, pues que no tengo hijos,” y dio al monumento su nombre, y así se llama hoy todavía el cipo de Absalón. 2SM018019 Ajimas, hijo de Sadoc, dijo: “Déjame correr al rey para darle la noticia de que Yahvé le ha hecho justicia de las manos de sus enemigos.” 2SM018020 Joab le dijo: “No le llevarás hoy tú la noticia, ya se la llevarás otra vez; pero no lo hagas hoy, pues que ha muerto el hijo del rey.” 2SM018021 Y Joab dijo a un cusita: “Ve y anuncia al rey lo que has visto.” El cusita se prosternó ante Joab y corrió. 2SM018022 Ajimas, hijo de Sadoc, dijo, a pesar de todo, a Joab: “Ocurra lo que ocurra, déjame que corra tras el eusita.” Y Joab le dijo: “¿Por qué te empeñas en correr a él, hijo mío? Este mensaje no te aprovecharía.” 2SM018023 “Ocurra lo que ocurra, yo voy,” repuso Ajimas, y Joab le respondió: “Ve.” Ajimas corrió por el camino de la Hoya y se adelantó al cusita. 2SM018024 Estaba David sentado entre las dos puertas. El centinela que estaba en la torre sobre la puerta alzó los ojos y miró, y vio al hombre que corría solo hacia la ciudad, 2SM018025 y gritó para advertir al rey. El rey dijo: “Si viene solo, es que trae buenas noticias.” En tanto el hombre siguió acercándose hacia la ciudad, 2SM018026 y el centinela descubrió al otro que corría también, y gritó del lado de la puerta: “Otro que corre solo.” El rey dijo: “Es que también trae buenas noticias.” 2SM018027 El centinela dijo: “Por el modo de correr, el primero me parece Ajimas, hijo de Sadoc.” Y el rey dijo: “Es hombre de bien, seguramente trae buenas noticias.” 2SM018028 Ajimas, gritando, dijo al rey: “IVictoria!” Prosternóse luego ante el rey, rostro en tierra, y dijo: “Bendito Yahvé, tu Dios, que ha entregado a los que alzaban su mano contra mi señor el rey.” 2SM018029 El rey preguntó: “Y el joven Absalón, ¿está bien?” Ajimas respondió: “Yo vi un gran alboroto cuando Joab envió al rey tu siervo, pero no pude saber lo que pasaba.” 2SM018030 Y el rey le dijo: “Pasa y ponte allí.” Pasó él y se paró. 2SM018031 Llegó luego el cusita y dijo: “Recibe, ¡oh rey, mi señor! la nueva de que ha defendido Yahvé hoy tu causa contra todos los que se alzaron contra ti.” 2SM018032 Y el rey preguntó al cusita: “Y el joven Absalón, ¿está bien?” Y el cusita respondió: “Que lo que es de ese mozo sea de los enemigos de mi señor el rey y de todos cuantos para mal se alcen contra ti.” 2SM018033 Turbóse entonces el rey, y, subiendo a la estancia que había sobre la puerta, lloraba y decía: “¡ Absalón, hijo mío! ¡Hijo mío! ¡Hijo mío Absalón! ¡Quién me diera que fuera yo el muerto en vez de ti! ¡Absalón, hijo mío, hijo mío!” 2SM019001 Dijeron a Joab: “El rey llora a su hijo y se lamenta”“ 2SM019002 La victoria se trocó aquel día en luto para todo el pueblo, porque todos supieron que el rey estaba afligido por la muerte de su hijo;' 2SM019003 y la gente entró en la ciudad calladamente, como entra avergonzado el ejército que huye de la batalla. 2SM019004 El rey, cubriendo el rostro, gemía: “¡Absalón, hijo mío! ¡Hijo mío Absalón! ¡Hijo mío!” 2SM019005 Entró Joab en casa del rey y le dijo: “Hoy has llenado de confusión a todos tus siervos, que han salvado tu vida y la vida de tus hijos y tus hijas, la de tus mujeres y tus concubinas. 2SM019006 Amas a los que te aborrecen y aborreces a los que te aman, pues has demostrado hoy que nada te importan tus príncipes y tus siervos, y que, si viviera Absalón, aunque todos nosotros hubiéramos muerto, estarías contento. 2SM019007 Levántate, pues, y sal fuera y habla con el corazón a los que te siguen; pues, de lo contrario, por Yahvé juro que, si no sales, ni uno quedará esta noche contigo; y te habrá de pesar de esto más que de cuantos males han venido sobre ti desde tu mocedad hasta ahora.” 2SM019008 Levantóse el rey, se sentó a la puerta, y todo el pueblo se enteró de que el rey estaba sentado a la puerta, y todos vinieron ante el rey a la puerta. Los de Israel habían huido cada uno a su casa. 2SM019009 Todo el pueblo, en todas las tribus de Israel, se acusaba diciendo: “El rey nos ha librado de la mano de nuestros enemigos; nos ha salvado del poder de los filisteos y ahora ha tenido que huir de la tierra por miedo a Absalón;' 2SM019010 y Absalón, a quien habíamos ungido nosotros, ha muerto en la batalla. ¿Por qué, pues, no tratáis de hacer volver al rey?” 2SM019011 El rey David mandó quien dijera a Sadoc y a Abiatar, sacerdotes: “Hablad a los ancianos de Judá y decidles: ¿Vais a ser vosotros los últimos en volver al rey a su casa?” Pues lo que por todo Israel se decía había llegado a la casa del rey. 2SM019012 “Vosotros sois mis hermanos, sois hueso mío y carne mía. ¿Por qué, pues, habréis de ser los últimos en volver al rey a su casa? 2SM019013 Decid asimismo a Amasa: ¿No eres tú también hueso mío y carne mía? Esto me haga Dios y esto me añada si no te hago jefe de mi ejército para siempre en lugar de Joab.” 2SM019014 Inclinóse el corazón de todos los de Judá, para que como un solo hombre mandasen a decir al rey: “Vuelve con todos tus servidores.” 2SM019015 Volvióse, pues, el rey, y, llegado al Jordán, vino Judá a Caígala a recibir al rey y acompañarle en el paso del Jordán. 2SM019016 Semeí, hijo de Cuera, hijo de Benjamín, que era de Ba-jurim, apresuróse a venir con los hombres de Judá a recibir al rey David, 2SM019017 trayendo consigo mil hombres. Asimismo Siba, siervo de la casa de Saúl, con sus quince hijos y sus veinte siervos, que pasaron el Jordán antes que el rey. 2SM019018 Se dispusieron a hacer pasar la familia del rey y a hacer lo que bien le pareciera. Semeí, hijo de Güera, se echó a los pies del rey en el momentó en que el rey iba a pasar el Jordán 2SM019019 y le dijo: “Qué mi señor no me impute la iniquidad y olvide las ofensas de su siervo el día en que mi señor salió de Jerusalén. ¡Oh rey! no atiendas a ellas, 2SM019020 pues tu siervo reconoce que ha pecado, y hoy vengo el primero de toda la casa de José delante del rey mi señor.” 2SM019021 Abisaí, hijo de Sarvia, tomó la palabra y dijo: “Pero ¿no va a morir Semeí por haber maldecido al ungido de Yahvé?” 2SM019022 Mas David respondió: “¿Qué tenéis que ver conmigo, hijos de Sarvia? ¿Por qué habéis de oponeros hoy a mí? ¿Hoy va a morir nadie en Israel? ¿No soy yo hoy rey de Israel?” 2SM019023 Y dijo a Semeí: “No morirás”; y se lo juró el rey.' 2SM019024 También bajó a recibir al rey Mefibaal, hijo de Saúl; no se había hecho el aseo de sus pies, de sus manos y de su bigote, ni había lavado sus vestidos desde el día en que el rey salió de Jerusalén hasta el día en que volvió en paz.' 2SM019025 Vino de Jerusalén a recibir al rey, y éste le dijo: “Mefibaal, ¿por qué no viniste conmigo?” 2SM019026 Y él respondió: “Mi señor y rey, mi siervo me engañó, porque tu servidor le había dicho: Aparéjame la pollina y montaré en ella para ir con el rey — pues que tu siervo está rengo —, 2SM019027 y él ha calumniado a tu siervo ante mi señor el rey; pero mi señor el rey, que es como un ángel de Dios, hará lo que bien le parezca;' 2SM019028 pues todos los de la casa de mi padre no podían esperar de mi señor el rey otra cosa que la muerte, y” sin embargo, tú has puesto a tu siervo entre los que comen a tu mesa. ¿Qué derecho tengo yo a pedir nada al rey? 2SM019029 El rey dijo: “¿Para qué tantas palabras? Ya lo he dicho: Tú y Siba os repartiréis las tierras.” 2SM019030 Y Mefibaal dijo al rey: “Que las toma todas, ya que mi señor el rey ha vuelto a entrar en paz en su casa.” 2SM019031 Barzilai el galadita bajó de Roguelim para acompañar al rey en el paso del río. 2SM019032 Barzilai era muy viejo, tenía ya ochenta años y había proporcionado alimentos al rey durante su estancia en Majanaím, pues era hombre muy rico. 2SM019033 El rey le dijo: “Vente conmigo y yo te mantendré durante tu vejez en Jerusalén.” 2SM019034 Pero Barzilai respondió al rey: “¿Cuántos años voy a vivir yo, para ir con el rey a Jerusalén? 2SM019035 Tengo ya ochenta años. ¿Puedo ya distinguir entre lo bueno y lo malo? ¿Puede tu siervo saborear lo que come y lo que bebe? ¿Puedo ya oír la voz de cantores y cantoras? ¿Y por qué tu siervo tiene que ser una carga para mi señor el rey? 2SM019036 Tu siervo acompañará hasta un poco más allá del Jordán al rey. ¿Y por qué el rey me ha de conceder esta recompensa? 2SM019037 Permite, te lo ruego, que tu siervo se vuelva, y muera yo en mi ciudad, cerca del sepulcro de mi padre y de mi madre. 2SM019038 Pero ahí tienes a tu siervo Quimam; que vaya él con el rey mi señor, y haz por él lo que quieras.” El rey le dijo: “Que venga conmigo Quimam, y yo haré por él cuanto tú quieras, y todo cuanto tú me pidas, yo te lo concederé.” 2SM019039 Cuando todo el pueblo hubo pasado el Jordán, lo pasó también el rey, y el rey abrazó a Barzilai y le bendijo, y Barzilai se volvió a su casa. 2SM019040 Dirigióse luego el rey a Caígala, acompañado de Quimam y de todo el pueblo de Judá y la mitad de Israel, que escoltaban al rey. 2SM019041 pero he aquí que todos los hombres de Israel se llegaron al rey y le dijeron: “¿Por qué nuestros hermanos los hombres de Judá te han secuestrado y han pasado por el Jordán al rey y su casa? ¿No son pueblo de David todas sus gentes?” 2SM019042 Los hombres de Judá respondieron a los de Israel: “Es que el rey nos toca a nosotros más de cerca; ¿por qué os ha de enojar eso? ¿Hemos vivido nosotros a costa del rey? ¿Hemos recibido algo de él?” 2SM019043 (TEXTO OMITIDO) 2SM020001 Había allí un hombre perverso llamado Seba, hijo de Bicri, benjaminita, que se puso a tocar la trompeta, diciendo: “No tenemos nosotros parte con David ni heredad con el hijo de Isaí. ilsrael, a tus tiendas! ¡Cada uno a su casa!” 2SM020002 Y se fueron de con David todos los hombres de Israel, siguiendo a Seba, hijo de Bicri. Pero los de Judá se adhirieron a su rey desde el Jordán hasta Jerusalén. 2SM020003 Cuando llegó David a Jerusalén, tomo a las diez concubinas que había dejado al cuidado de su casa y las puso bajo guardia. Proveyó a su mantenimiento, pero no volvió a entrar a ellas, y encerradas estuvieron hasta el día de su muerte, viviendo como viudas. 2SM020004 El rey dijo a Amasa: “Convócame para dentro de tres días a los hombres de Judá, y hállate tú también aquí presente.” 2SM020005 Fue, pues, Amasa a reunir a Judá, pero se detuvo más del tiempo señalado;' 2SM020006 y David dijo a Abisaí: “Seba, hijo de Bicri, va a hacernos ahora más mal que Absalón. Toma, pues, a los siervos de tu señor y ve tras él, no sea que se acoja a las ciudades fuertes y se escape de nuestra vista.” 2SM020007 Marcharon con Abisaí las gentes de Joab, los cereteos y feleteos y todos los valientes, y, saliendo de Jerusalén, fueron tras Seba, hijo de Bicri. 2SM020008 Cuando llegaron a la gran piedra que hay en Gabaón, les salió al encuentro Amasa. Iba Joab vestido de una túnica, y sobre ella llevaba ceñida a sus lomos una espada en su vaina, y, según avanzó, se cayó de ella la espada. 2SM020009 Joab dijo a Amasa: “¿Estás bien, hermano?”; y con la mano derecha tomó a Amasa de la barba, como para besarle.' 2SM020010 Amasa no hizo atención a la espada que tenía Joab en la mano, y éste le hirió con ella en el vientre, echándole a tierra las entrañas, sin repetir el golpe. Amasa murió. Después Joab y Abisaí, su hermano, fueron en seguimiento de Seba, hijo de Bicri. 2SM020011 Uno de los servidores de Joab se quedó junto a Amasa, y decía: “Los de Joab, los de David, que sigan tras Joab.” 2SM020012 Amasa, bañado en sangre, yacía en el camino. Viendo aquel hombre que todos se paraban, apartó a Amasa del camino, lo llevó al campo y echó sobre él una cubierta, porque vio que cuantos venían se paraban junto a él. 2SM020013 Una vez apartado del camino, iban ya todos tras Joab, en seguimiento de Seba, hijo de Bicri. 2SM020014 Pasó por todas las tribus de Israel, hasta llegar a Abel Bet Maca, y los hombres escogidos que le seguían se reunieron. 2SM020015 Encerraron a Seba en Abel Bet Maca, y alzaron contra la ciudad un baluarte, que llegaba a la explanada de la muralla. 2SM020016 Dio entonces voces desde la ciudad una avisada mujer: “¡Oíd, oíd!” Os pido que digáis a Joab que se llegue aquí, para que yo le hable. 2SM020017 Y una vez que se acercó, le dijo ella: “¿Eres tú Joab” Y él respondió: “Yo soy.” Ella siguió: “Pues oye las palabras de tu sierva.” Y él respondio “Oigo.” 2SM020018 Entonces volvió ella a hablar, diciendo: “En otros tiempos babía costumbre de de decir: “Quien preguntare, pregunte en Abel”, y las querellas se arreglaban. 2SM020019 Yo soy una ciudad pacífica y fiel a Israel, y tú procuras destruir una ciudad que es madre de Israel. ¿Por qué has de destruir la heredad de Yave?” 2SM020020 Joab respondió: “Lejos de mí querer destruirla y arruinarla. 2SM020021 No es eso; es que un hombre de la montaña de Efraím, Seba, hijo de Becri, ha alzado su mano contra el rey David; entregadle a él sólo, y yo me alejaré de la ciudad.” La mujer dijo a Joab: “Se te echará su cabeza por encima de la muralla.” 2SM020022 La mujer se dirigió a todo el pueblo con mucha sabiduría y cortando la cabeza de Seba, hijo de Becri, se la echaron a Joab. Joab hizo sonar la trompeta, y lejos ya de la ciudad, las gentes se dispersaron, cada uno a su casa, y Joab volvió a Jerusalén, al rey. 2SM020023 Joab mandaba todo el ejército de Israel; Banaias, hijo de Joiada era el jefe de los cereteos y feleteos; 2SM020024 Adoram, el inspector de los tributos; Josafat, hijo de Ajilud, cronista; 2SM020025 Siva, escriba: Sadoc y Abiatar, saccerdotes, 2SM020026 e Ira, el jaireíta consejero áulico de David. 2SM021001 Hubo en tiempo de David un hambre que duró tres años continuos; y David consultó a Yahvé, que le respondió: “Es por la casa de Saúl y por la sangre que hay sobre ella, por haber hecho perecer a los gabaonitas.” 2SM021002 El rey llamó a los gabaonitas y les dijo: “Los gabaonitas no eran de los hijos de Israel; eran un resto de los amorreos, con el cual estaban los hijos de Israel ligados con juramento; y, sin embargo, Saúl había procurado extinguirlos, por celo de los hijos de Israel y de Judá.” 2SM021003 Dijo, pues, David a los gabaonitas: “¿Qué queréis que os haga para expiaros y que bendigáis a la heredad de Yahvé?” 2SM021004 Los gabaonitas le dijeron: “Nuestra querella con Saúl y su casa no es cuestión de plata y oro, ni pretendemos que muera nadie en Israel” “Y él preguntó: “Decid, pues, lo que queréis, para que yo lo haga.” 2SM021005 Ellos respondieron al rey: “Aquel hombre nos destruyó y quería exterminarnos, haciéndonos desaparecer de toda la tierra de Israel;' 2SM021006 que se nos entreguen siete de sus hijos para que nosotros los colguemos ante Yahvé en Gabaón, en el monte ante Yahvé.” El dijo: “Os los entregaré.” 2SM021007 No entregó el rey a Mefibaal, hijo de Jonatán, hijo de Saúl, por el juramento de Yahvé que habían hecho entre sí David y Jonatán, hijo de Saúl. 2SM021008 Y tomó el rey a los dos hijos que Risfa, hija de Aya, había dado a Saúl, Armoni y Mefibaal, y a los cinco hijos que Merab, hija de Saúl, había dado a Adriel, hijo de Barzilai, de Abel Me-jola, 2SM021009 y se los entregó a los gabaonitas, que los colgaron en el monte ante Yahvé. Todos siete murieron juntos en los primeros días de la cosecha, al comienzo de la siega de las cebadas. 2SM021010 Risfa, hija de Aya, tomando un saco, se lo tendió sobre la tierra, y estuvo desde el comienzo de la cosecha de las cebadas hasta que sobre ellos cayeron del cielo las aguas de la lluvia, espantando durante el día a las aves del cielo y durante la noche a las bestias del campo. 2SM021011 Dieron noticia a David de lo que había hecho Risfa, hija de Aya, concubina de Saúl;' 2SM021012 y fue David a recoger los huesos de Saúl y los de Jonatán, su hijo, a la ciudad de Jabes, en Galaad, cuyos habitantes los habían tomado de los muros de Betsán, donde los habían colgado los filisteos después de derrotar a Saúl en Gelboé. 2SM021013 Llevó de allí los huesos de Saúl y los de Jonatán, su hijo, y tomo también los de los que habían sido colgados;' 2SM021014 y fueron enterrados los huesos de Saúl y de su hijo Jonatán y los de los que habían sido colgados, en tierra de Benjamín, en Sela, en el sepulcro de Quis, padre de Saúl, cumpliéndose las órdenes del rey. Después de esto se apiadó Yahvé de la tierra. 2SM021015 Hubo todavía guerra entre los filisteos e Israel, y bajó David con los suyos para combatir a los filisteos. En el combate, David, muy cansado, 2SM021016 estaba para ser muerto por Josbi Benob, uno de los hijos de Rafa, que tenía una lanza que pesaba trescientos siclos de bronce y ceñía una espada nueva. 2SM021017 Abisai, hijo de Sarvia, vino en socorro de David, hirió al filisteo y le mató. Entonces las gentes de David le conjuraron, diciendo: “No salgas ya más con nosotros al combate, para que no extingas la lámpara de Israel.” 2SM021018 Hubo después de esto en Gob una batalla con los filisteos, y entonces Sobacai, jusatita, mató a Saf, uno de los hijos de Rafa. 2SM021019 Hubo otra segunda batalla en Gob con los filisteos, y Eljanan, hijo de Jari, betlemita, mató a Lajmi, hermano de Goliat, que tenía una lanza cuya asta era como un enjullo de tejedor. 2SM021020 Hubo también una batalla en Get, en que se halló un hombre de gran talla, que tenía seis dedos en cada mano y en cada pie, veinticuatro en todo, descendiente también de Rafa. 2SM021021 Insultó a Israel, y Jonatán, hijo de Sima, hermano de David, le mató. 2SM021022 Estos cuatro hombres eran de los hijos de Rafa, de Get, y todos perecieron a manos de David y de sus servidores. 2SM022001 David dirigió a Yahvé las palabras de este cántico, cuando le hubo librado Yahvé de la mano de todos sus enemigos y de la mano de Saúl. 2SM022002 Dijo: “Yahvé es mi roca, mi fortaleza, mi refugio, 2SM022003 Mi escudo, el cuerno de mi salvación, mi inaccesible asilo, mi salvador de la violencia. 2SM022004 Yo invoqué, alabándole, a Yahvé y quedé a salvo de mis enemigos. 2SM022005 Ya me rodeaban con estrépito las olas de la muerte, ya me aterrorizaban los torrentes del averno, 2SM022006 ya me aprisionaban las ataduras del sepulcro, ya me habían cogido los lazos de la muerte, 2SM022007 y en mi angustia invocaba a Yahvé, imploraba el auxilio de mi Dios. El oyó mi voz desde su templo, mi clamor llegó a sus oídos. 2SM022008 Conmovióse y tembló la tierra, vacilaron los fundamentos de los montes y se estremecieron, porque se airó contra ellos. 2SM022009 Subía de sus narices el humo de su ira, y de su boca fuego abrasador, carbones encendidos por él. 2SM022010 Y abajó los cielos y descendió, negra obscuridad tenía bajo sus pies. 2SM022011 Subió sobre los querubines y voló, voló sobre las alas de los vientos. 2SM022012 Puso en derredor suyo tinieblas por velo. Se cubrió con calígine acuosa y densas nubes. 2SM022013 Ante su resplandor se deshicieron sus nubes. En granizo y centellas de fuego. 2SM022014 Tronó Yahvé desde los cielos, el Altísimo hizo resonar su voz, 2SM022015 lanzó sus saetas y los desbarató, fulminó sus muchos rayos y los consternó. 2SM022016 Y aparecieron arroyos de aguas, y quedaron al descubierto los fundamentos del orbe ante la increpadora ira de Yahvé, al resoplido del huracán de su furor. 2SM022017 Extendió su mano desde lo alto y me tomo, me sacó de la muchedumbre de las aguas, 2SM022018 me arrancó de mi feroz enemigo, de los que me aborrecían y eran más fuertes que yo. 2SM022019 Querían asaltarme en día fatal para mí. Pero fue Yahvé mi fortaleza, 2SM022020 y me puso en seguro,salvándome, porque se agradó de mí. 2SM022021 Remunerábame Yahvé conforme a mi justicia, según la pureza de mis manos me pagaba, 2SM022022 pues yo había seguido los caminos de Yahvé y no me había impíamente apartado de mi Dios. 2SM022023 Tenía ante mis ojos todos sus mandatos y no rehuía sus leyes, 2SM022024 sino que fui íntegro con él y me guardé de la iniquidad. 2SM022025 Y me retribuyó Yahvé conforme a mi justicia y según la limpieza de mis manos ante sus ojos. 2SM022026 Con el piadoso muéstrase piadoso, íntegro con el íntegro;' 2SM022027 Muéstrase limpio con el limpio, Y sagaz con el perverso astuto. 2SM022028 Tú salvas al humilde, pero humillas al soberbio. 2SM022029 Tú haces lucir mi lámpara, ¡oh Yahvé!; mi Dios, ilumina mis tinieblas.' 2SM022030 Ciertamente, fiado en ti, soy capaz de romper ejércitos; fiado en mi Dios asalto murallas.' 2SM022031 Es perfecto el camino de Dios, la palabra de Yahvé es acrisolada. Es el escudo de cuantos a él se acogen. 2SM022032 ¿Qué Dios hay fuera de Yahvé? ¿Qué roca hay fuera de nuestro Dios? 2SM022033 El Dios fuerte que me ciñó de fortaleza y prosperó mis caminos, 2SM022034 que me dio pies como de ciervo y me puso sobre las alturas, 2SM022035 que adiestró mis manos para la lucha y mis brazos para tender el arco. 2SM022036 Me entregaste tu escudo salvador, tu diestra me fortalecía 2SM022037 me hacías correr a largos pasos, sin que se cansaran mis pies. 2SM022038 Perseguía a mis enemigos y los alcanzaba, y no me volvía sin haberlos desbaratado. 2SM022039 Los machacaba, sin que pudieran levantarse; caían bajo mis pies.' 2SM022040 Me ceñiste de fortaleza para la guerra, sometiste a los que se alzaban contra mí, 2SM022041 obligaste a mis enemigos a darme las espaldas y reducías al silencio a los que me odiaban. 2SM022042 Vociferaban, pero no había quien los socorriese; a Yahvé, pero El no los oía.' 2SM022043 Y los dispersaba como el polvo lo dispersa el viento, y como al lodo de las plazas los pulverizaba. 2SM022044 Me libraste de las sediciones del pueblo, me pusiste por cabeza de gentes. Pueblos que no conocía me servían. 2SM022045 Los extraños me halagaban, obedécenme con diligente oído;' 2SM022046 los extraños desfallecieron y salen temblando de sus refugios. 2SM022047 Viva Yahvé y bendito sea su nombre! Ensalzado sea el Dios, mi salvador. 2SM022048 El es el Dios que me otorga la venganza, el que me somete los pueblos, 2SM022049 el que me libra de mis enemigos, el que me hace superar a los que se alzan contra mí, el que me libra del hombre violento;' 2SM022050 por eso le daré gracias, ¡oh Yahvé! ante las gentes y cantaré yo salmos en tu honor. 2SM022051 El que da grandes victorias a su rey, el que hace misericordia a su ungido, David, y a su descendencia por la eternidad.” 2SM023001 Estas son las últimas palabras de David: “Oráculo de David, hijo de Isaí. Oráculo del hombre puesto en lo alto, del ungido del Dios de Jacob, del dulce cantor de Israel. 2SM023002 El espíritu de Yahvé habla por mi y su palabra está en mis labios. 2SM023003 Ha hablado el Dios de Jacob. La Roca de Israel me ha dicho: Un justo dominador de los hombres, dominador en el temor de Dios, 2SM023004 como la luz de la mañana cuando se levanta el sol en una mañana sin nubes. A sus rayos, después de la lluvia yérguese la hierba de la tierra. 2SM023005 ¿No es así mi casa para con Dios? Porque El ha hecho conmigo una eterna alianza, en todo ordenada y que será cumplida. El hará germinar toda mi salud y todo su buen deseo, 2SM023006 mientras que los impíos serán todos como espinas del desierto, que nadie toca con sus manos. 2SM023007 El que las junta se arma de un hierro o de un asta de lanza y son luego arrojadas al fuego.” 2SM023008 He aquí los nombres de los héroes de David: Jesbaal, jacamonita, era el primero de los tres; éste desnudó su espada contra ochocientos hombres y los derrotó de un solo ímpetu.' 2SM023009 Después de éste, Eleazar, hijo de Dodó, ajojita; era uno de los tres más valientes que estaban con David en Pas Damim cuando los filisteos presentaron allí batalla, y, huyendo los de Israel,' 2SM023010 se quedó él a pie firme, blandiendo su espada, hasta que se le cansó la mano y se le quedó pegada a ella la espada, consiguiendo aquel día Yahvé una gran victoria, pues el pueblo se tornó a donde estaba Eleazar, pero sólo tuvo que recoger los despojos, 2SM023011 Después de él, Sama, hijo de Ela, jaradita. Habíanse concentrado los filisteos en Lejí, en un lugar donde había un trozo de terreno sembrado de lentejas, y el pueblo iba huyendo ante los filisteos;' 2SM023012 Sama se puso en medio del campo aquel, lo defendió y derrotó a los filisteos, obrando Yahvé por él una gran victoria.” 2SM023013 Estos tres, los más valientes de los treinta, habían antes bajado al tiempo de la cosecha a reunirse con David en la caverna de Odulam, mientras acampaba una tropa de filistec en el valle de Refaím. 2SM023014 Estaba entonces David en la fortaleza y los filisteos tenían guarnición en Belén. 2SM023015 Se le antojó a David decir: “¡Quién me diera poder beber agua de la cisterna q está a la puerta de Belén!” 2SM023016 Y luego los tres valientes, atravesando el campamento de los filisteos, tomaron agua de la cisterna de Belén y se la llevaron a David; pero David no la bebió e hizo con ella una libación a Yahvé, diciendo:' 2SM023017 “Lejos de mí, ¡oh Yahvé! hacer tal cosa. ¿No sería beber la sangre de estos hombres, que con peligro de su vida han ido a buscarla?” Y se negó a bebería. Esto hicieron los tres valientes. 2SM023018 Abisaí, hermano de Joab, hijo de Sarvia, era el jefe de los treinta. Blandiendo su lanza contra trescientos hombres, los derrotó, y adquirió gran renombre entre los treinta, 2SM023019 Era el más considerado entre los treinta y jefe de ellos, pero no igualaba a los tres. 2SM023020 Banayas, hijo de Joyada, hombre valiente y hazañoso, de Cabsel. Este mató a los dos Ariel, de Moab, y, bajando a una cisterna en un día de nieve, mató en ella a un león. 2SM023021 También mató a un egipcio de gran talla que blandía una lanza; acometiéndole con un palo, le arrancó de las manos la lanza y con su propia lanza le mató.' 2SM023022 Esto hizo Banayas, hijo de Joyada, de fama entre los treinta 2SM023023 y glorioso entre ellos, pero que no llegaba tampoco a los tres. Hízole David jefe de su guardia. 2SM023024 Azael, hermano de Joab, era de los treinta; también Eljanán, hijo de Dodó, de Belén;' 2SM023025 Sama, de Jarod; Elica, de Jarod;' 2SM023026 Jeles, de Bet Paltí; Ira, hijo de Iques, de Tecua;' 2SM023027 Abiezer, de Anatot; Mebonai, jusatita;' 2SM023028 Selmón, ajojita; Marai, de Netofat;' 2SM023029 Jeleb, hijo de Baña, de Netofat; Itai, hijo de Ribai, de Gueba, de los hijos de Benjamín;' 2SM023030 Banaya, de Paratón; Edi, de los valles de Gas;' 2SM023031 Abi Albón, del Araba; Azmavet, de Barjum;' 2SM023032 Eliajba, de Salabona; Jasen, de Guní;' 2SM023033 Jonatán, de Sama, arodita; Ajiam, hijo de Sarar, arodita;' 2SM023034 Elifelet, hijo de Ajasbai, ma-catita; Eliam, hijo de Ajitofel, de Guilón!' 2SM023035 Jesra, de Carmel; Para, de Arba;' 2SM023036 Jigal, hijo de Natán, y Soba, de Gad;' 2SM023037 Selec, amonita; Najarai, de Betot, escudero de Joab, hijo de Sarvia;' 2SM023038 Ira, jetrita; Gareb, jetrita;' 2SM023039 Urías, jeteo. En total, treinta y siete. 2SM024001 Volvió a encenderse el furor de Yahvé contra Israel, impulsando a David a que hiciera el censo de Israel y de judá. 2SM024002 Dijo, pues, David a Joab, jefe de su ejército: “Recorre todas las tribus de Israel, desde Dan hasta Berseba, y haz el censo del pueblo, para saber su número.” 2SM024003 Joab dijo al rey: “Aumente Yahvé, tu Dios, el pueblo cien veces otro tanto como son y véalo mi señor el rey. Mas ¿para qué quiere esto mi señor el rey?” 2SM024004 Pero prevaleció la orden del rey sobre Joab y sobre los jefes del ejército, y salió Joab, con los jefes del ejército, de la presencia del rey para hacer el censo del pueblo de Israel;' 2SM024005 y pasado el Jordán, comenzaron por Aroer y la ciudad que está en medio del valle y por Gad hasta Jazer. 2SM024006 Y fueron a Galaad y a la tierra de los jéteos, hasta Cades, y luego desde Dan hasta Sidón la grande;' 2SM024007 fueron a la ciudad fuerte de Tiro y a todas las ciudades de los jeveos y cananeos, y, por fin, al Negueb de Judá, a Berseba. 2SM024008 Cuando hubieron así recorrido toda la tierra, volvieron a Jerusalén al cabo de nueve meses y veinte días;' 2SM024009 y Joab remitió al rey el rollo del censo del pueblo. Había en Israel ochocientos mil hombres de guerra que esgrimían la espada, y quinientos mil en Judá. 2SM024010 David sintió latir su corazón cuando hubo hecho el censo del pueblo, y dijo a Yahvé: “He pecado gravemente al hacer esto. Ahora, ¡oh Yahvé! perdona, te ruego, la iniquidad de tu siervo, pues he obrado como un insensato.” 2SM024011 Al día siguiente, cuando se levantó David, había llegado a Gad, profeta, el vidente de David, palabra de Yahvé, diciendo: 2SM024012 “Ve a decir a David: Así habla Yahvé: Te doy a elegir entre tres cosas la que he de hacer yo a tu elección.” 2SM024013 Vino Gad a David y se lo comunicó, diciendo: “¿Qué quieres: tres años de hambre sobre la tierra, tres meses de derrotas ante los enemigos que te persigan o tres días de peste en toda la tierra? Reflexiona, pues, y ve lo que he de responder al que me envía.” 2SM024014 David respondió a Gad: “Estoy en una cruel angustia. Caigamos en las manos de Yahvé, cuya misericordia es grande; pero que no caiga yo en las manos de los hombres.” 2SM024015 David escogió para sí la peste. Eran los días de la mies del trigo cuando la peste comenzó en el pueblo, y murieron, desde Dan a Bersabé, setenta mil hombres del pueblo. 2SM024016 El ángel de Yahvé tendía ya su mano sobre Jerusalén para destruirla pero se arrepintió Yahvé del mal y dijo al ángel que hacía perecer al pueblo: “Basta; retira ya tu mano.” El ángel de Yahvé estaba cerca de la era de Areuna el jebuseo.' 2SM024017 A la vista del ángel que hería al pueblo, dijo David a Yahvé: “Yo he pecado; pero éstos, las ovejas, ¿qué han hecho? Caiga tu mano sobre mí y sobre la casa de mi padre.” 2SM024018 Aquel día vino Gad a David y le dijo: “Sube y alza a Yahvé un altar en la era de Areuna el jebuseo.” 2SM024019 Subió David, conforme a la orden de Gad, como se lo había mandado a éste Yahvé. 2SM024020 Areuna, al mirar, vio al rey y a sus servidores que se dirigían hacia él, y, saliendo, se prosternó delante del rey, rostro a tierra, 2SM024021 diciendo: “¿Cómo mi señor el rey viene a su siervo?” David respondió: “Vengo a comprarte esta era y a alzar en ella un altar a Yahvé, para que se retire la plaga de sobre su pueblo.” 2SM024022 Areuna dijo a David: “Tómela mi señor y ofrezca cuantos sacrificios le plazca. Ahí están los bueyes para el holocausto; los trillos y los yugos darán la leña;' 2SM024023 todo eso, ¡oh rey! se lo regala Areuna al rey. Que Yahvé, tu Dios, te sea favorable.” 2SM024024 Pero el rey respondió a Areuna: “No; quiero comprártelo por precio de plata; no voy a ofrecer yo a Yahvé, mi Dios, holocaustos que no me cuestan nada.” Y compró David la era y los bueyes en cincuenta siclos de plata;' 2SM024025 alzó allí el altar a Yahvé y ofreció holocaustos y sacrificios pacíficos. Así se aplacó Yahvé con su pueblo y cesó la plaga en Israel.
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