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1SM001001 Hubo un hombre en la ciudad de Ramataimsofín, en las montañas de Efraím, cuyo nombre era Elcana, hijo de Jeroham, hijo de Eliú, hijo de Tohú, hijo de Suf, de la tribu de Leví, domiciliado en la de Efraím. 1SM001002 Y tenía dos mujeres, una llamada Anna, y la otra Fenenna. Fenenna tenía hijos, más Anna carecía de ellos. 1SM001003 Subía este hombre desde su ciudad a Silo en los días señalados, a adorar y ofrecer sacrificios al Señor de los ejércitos. Allí residían entonces los dos hijos de Helí, Ofni, y Finees, sacerdotes del Señor. 1SM001004 Venido uno de dichos días solemnes, ofreció Elcana su sacrificio, y distribuyó después lo que le correspondía de la víctima entre su mujer Fenenna y todos sus hijos e hijas; dándoles las porciones de ella. 1SM001005 Pero a Anna, que no tenía hijos, diole una sola porción, entristecido, porque la amaba, aunque el Señor la había hecho estéril. 1SM001006 Además Fenenna, su rival, la mortificaba también y angustiaba en gran manera; en tanto grado, que la echaba en rostro que el Señor la había hecho estéril. 1SM001007 Y así lo hacía todos los años cuando, llegado el tiempo, subían al templo del Señor, y de este modo la zahería. Con esto Anna se ponía a llorar y no probaba la comida. 1SM001008 Díjole, pues, Elcana, su marido: Anna, ¿por qué lloras? ¿Cómo es que no comes? ¿Y por qué se aflige así tu corazón? ¿Acaso no soy yo para ti mejor que diez hijos que tuvieses? 1SM001009 Y después de haber comido y bebido en Silo, levantóse Anna; y estando el Sumo sacerdote Helí sentado en su silla, o audiencia, delante de la puerta del templo o Tabernáculo del Señor, 1SM001010 vino Anna con el corazón lleno de amargura, y oró al Señor derramando copiosas lágrimas, 1SM001011 e hizo un voto diciendo: Señor Dios de los ejércitos, si te dignares volver los ojos para mirar la aflicción de tu sierva, y te acordares de mí, y no olvidándote de tu esclava, dieres a tu sierva un hijo varón, le consagraré al Señor por todos los días de su vida, y no pasará jamás navaja por su cabeza. 1SM001012 Como repitiese muchas veces sus ruegos delante del Señor, Helí estuvo observando el movimiento de sus labios; 1SM001013 porque Anna hablaba sólo en su corazón; por manera que únicamente movía sus labios, pero no se le oía ni siquiera una palabra. Y así Helí la tuvo por ebria, 1SM001014 y le dijo: ¿Hasta cuándo durará tu embriaguez? Vete a digerir un poco el vino de que estás llena. 1SM001015 Respondióle Anna: No es, mi señor, lo que decís; la verdad es que yo soy una mujer afligidísima; y no es que haya bebido vino, ni cosa que pueda embriagar, sino que estaba derramando mi corazón en la presencia del Señor; 1SM001016 no tengas a tu sierva por alguna de las hijas licenciosas de Belial; porque sola la vehemencia de mi dolor y aflicción es la que me ha hecho hablar así hasta ahora. 1SM001017 Entonces Helí le dijo: Vete en paz, y el Dios de Israel te conceda la petición que le has hecho. 1SM001018 Respondióle Anna: ¡ojalá tu sierva halle gracia en tus ojos!. Fuese después la mujer a su posada, y tomó alimento, y desde entonces ya no se vio melancólico su semblante. 1SM001019 Por la mañana se levantaron todos, adorando al Señor, y regresaron a su casa de Ramata. Elcana conoció a Anna su mujer, y el Señor se acordó de ella y de su oración. 1SM001020 Luego concibió Anna, y, a su tiempo, parió un hijo, a quien puso por nombre Samuel, por haberle pedido fervorosamente al Señor. 1SM001021 Subió, pues, Elcana, su marido, con toda su familia a ofrecer al Señor una hostia solemne y cumplir su voto. 1SM001022 Pero Anna no fue, habiendo dicho a su marido: No iré hasta que el niño esté destetado y le lleve yo para presentarle al Señor, y se quede allí para siempre. 1SM001023 Díjole Elcana, su marido: Haz lo que mejor te parezca, y quédate hasta destetarle; yo suplico al Señor que se digne perfeccionar su obra. Quedóse, pues, Anna en su casa, y dio de mamar al hijo, hasta que le destetó; 1SM001024 y destetado, llevóle consigo, con tres becerros, y tres modios de harina, y un cántaro de vino a la casa del Señor en Silo. El niño era todavía pequeñito. 1SM001025 Y sacrificaron un becerro y presentaron el niño a Helí, 1SM001026 diciendo Anna: Óyeme, señor mío, por vida tuya: Yo soy, mi señor, aquella mujer que estuve aquí orando al Señor delante de ti. 1SM001027 Por este niño oré, y el Señor otorgóme la súplica que le hice; 1SM001028 por lo tanto, se lo tengo ofrecido, a fin de que le sirva mientras viva. Con esto adoraron al Señor; y Anna estando orando, prorrumpió en este cántico. 1SM002001 Saltó de gozo en el Señor mi corazón y mi Dios me ha ensalzado; ya puedo responder a boca llena a mis enemigos, pues toda la causa de mi alegría es, ¡oh Señor!, la salud que he recibido de ti. 1SM002002 Nadie es santo, como lo es el Señor; no hay otro Dios fuera de ti; ninguno es fuerte como nuestro Dios. 1SM002003 Cesad, pues, de hablar con soberbia y jactancia; no uséis ya de aquel vuestro lenguaje; porque Dios, que todo lo sabe, Él solo es el Señor, y Él lleva a efecto sus altísimos designios. 1SM002004 Quebróse el arco o la fortaleza de los fuertes, y los flacos han sido revestidos de vigor 1SM002005 Los que estaban antes colmados de bienes, se han alquilado por un pedazo de pan; y los que se hallaban acosados de hambre han sido plenamente saciados. La que era estéril ha venido a ser madre de muchos hijos, y la que estaba rodeada de ellos, perdió todos sus bríos. 1SM002006 Porque el Señor es el que da la muerte y da la vida; el que conduce al sepulcro y libra de él. 1SM002007 El Señor el que empobrece y enriquece; el que abate y ensalza. 1SM002008 Levanta del polvo al mendigo, y del estiércol ensalza al pobre, para que se siente entre los príncipes y ocupe un trono de gloria. Porque del Señor son los polos o cimientos de la tierra, y Él asentó sobre ellos el mundo: 1SM002009 Él dirigirá todos los pasos de sus santos; mas los impíos serán por Él reducidos a silencio en medio de tinieblas; porque no estará firme el hombre por su propia fuerza. 1SM002010 Temblarán delante del Señor sus adversarios. Tronará desde el cielo y lanzará rayos sobre ellos. El Cielo juzgará a toda la tierra, y dará el imperio de ella a su rey, y ensalzará la gloria y el poder de su Cristo. 1SM002011 Después de esto volvióse Elcana a su casa en Ramata; y el niño servía en el Tabernáculo, en la presencia del Señor, bajo la dirección del sumo sacerdote Helí. 1SM002012 Mas los hijos de Helí eran hijos de Belial, que no conocían o respetaban al Señor, 1SM002013 ni la obligación de los sacerdotes para con el pueblo; sino que cuando alguno, fuese el que fuese, había inmolado una víctima, venía el criado del sacerdote, mientras se cocían las carnes, y trayendo en su mano un garfio u horquilla de dientes, 1SM002014 le metía en el perol, o en el caldero, o en la olla, o en la marmita, y todo lo que prendía con él, lo tomaba para sí el sacerdote. Esto hacían con todos los de Israel que venían a Silo. 1SM002015 Y aun antes que quemasen la grosura de la víctima, venía el criado del sacerdote, y decía al que inmolaba: Dame de la carne para guisársela yo al secerdote, según su gusto; pues no he de tomar de ti la carne cocida, sino la cruda. 1SM002016 Decíale el que inmolaba: Quémese ahora primero la grosura, según el rito, y llévate después todo lo que quisieres. Mas él respondía diciendo: No; ahora me la has de dar, de lo contrario te la quitaré yo por la fuerza. 1SM002017 Era, pues, el pecado de estos hijos de Helí enormísimo a los ojos del Señor; por cuanto retraían a la gente de sacrificar al Señor. 1SM002018 Entretanto, el niño Samuel, revestido de un efod de lino, ejercía su ministerio en la presencia del Señor. 1SM002019 Y hacíale su madre una túnica pequeña, y se la llevaba los días solemnes, cuando subía con su marido a ofrecer el anual sacrificio solemne. 1SM002020 Y bendijo Helí a Elcana y a su mujer, diciéndole a él: El Señor te conceda sucesión de esta mujer en pago de la prenda que has consagrado y depositado en manos del Señor. Después de lo cual se volvieron a su casa. 1SM002021 En efecto, el Señor visitó a Anna, la cual concibió y parió tres hijos y dos hijas. Entretanto, el niño Samuel iba haciéndose grande en la presencia del Señor. 1SM002022 Helí, empero, era muy viejo; y llegó a saber el modo de portarse de sus hijos con todo el pueblo; y que dormían con las mujeres que venían a velar y orar en la puerta del Tabernáculo; 1SM002023 y les dijo únicamente: ¿Por qué me hacéis todas estas cosas que me dicen de vosotros? ¿Esos crímenes detestables de que habla todo el pueblo? 1SM002024 No más, hijos míos: que es muy desagradable lo que ha llegado a mis oídos de que hacéis prevaricar al pueblo del Señor. 1SM002025 Si un hombre peca contra otro hombre, puédese alcanzar de Dios el perdón; mas si aquel hombre que ha de ser mediador peca contra el Señor, ¿quién rogará por él? No escucharon los hijos de Helí la voz de su padre; porque el Señor había resuelto quitarles la vida. 1SM002026 Entretanto, el niño Samuel iba adelantando y creciendo, y era grato no menos al Señor que a los hombres. 1SM002027 Vino a la sazón un varón de Dios a Helí, y dijóle: Esto dice el Señor: ¿No es así que Yo manifesté visiblemente a la familia de Aarón, tu padre, cuando estaba en la casa y bajo el yugo de Faraón: 1SM002028 y que le escogí entre todas las tribus de Israel por sacerdote mío, para que subiese a ofrecer sobre mi altar, y me quemase perfumes, y anduviese vestido del efod en mi presencia; y di a la casa de tu padre una parte de todos los sacrificios de los hijos de Israel? 1SM002029 Pues, ¿cómo habéis hollado o envilecido mis víctimas y mis dones, que Yo mandé ofrecer en el templo; y has tenido tú más respeto a tus hijos que no a Mí, comiendo con ellos lo principal o mejor de todos los sacrificios de mi pueblo de Israel? 1SM002030 Por lo tanto, el Señor Dios de Israel dice: Yo había declarado y prometido que tu familia, y la familia de tu padre, serviría el ministerio del sumo sacerdocio delante de Mí perpetuamente. Mas ahora dice el Señor: Lejos de mí tal cosa; porque yo honraré a todo el que Me glorificare; pero los que Me menospreciaren, serán deshonrados. 1SM002031 He aquí que llega el tiempo en que cortaré tu brazo o poder, y el brazo de la casa de tu padre; de suerte que no haya anciano en vuestra familia. 1SM002032 Y cuando todo Israel estará en medio de la prosperidad, verás a tu rival en el templo mientras en tu casa no habrá jamás anciano. 1SM002033 Con todo no apartaré absolutamente a tus descendientes de mi altar; pero será para que, viéndolo, llores continuamente de envidia y se consuma de dolor tu alma; y una gran parte de tu casa morirá al llegar a la edad varonil. 1SM002034 Y serviráte de señal esto que ha de acontecer a tus dos hijos Ofni y Finees, a saber, que en un día morirán ambos. 1SM002035 Y yo me proveeré de un sacerdote fiel, que obre según mi corazón y mi alma; y le fundaré una casa sólida y duradera, y caminará siempre delante de mi ungido. 1SM002036 Entonces sucederá que todo aquel que hubiere quedado de tu casa y familia, vendrá para que se interceda por él con el Sumo Sacerdote, a fin de que se le dé una pequeña moneda de plata y una torta de pan; y dirá: Suplicóte que me admitas a algún ministerio sacerdotal, para poder así tener de que comer un bocado de pan. 1SM003001 Entretanto, el joven Samuel proseguía sirviendo al Señor bajo la dirección de Helí; y la palabra del Señor o revelación era rara, y, por consiguiente, de mucha estima; no era común en aquellos días la profecía. 1SM003002 Sucedió, pues, un día que estando Helí, cuyos ojos habían perdido ya la facultad de ver, acostado en su aposento, 1SM003003 y Samuel durmiendo junto a él en el templo del Señor, donde estaba el Arca de Dios, he aquí que el Señor, antes que fuese apagada la lámpara de Dios, o candelero de oro, 1SM003004 llamó a Samuel; y respondiendo éste: Aquí estoy; 1SM003005 corrió al punto a Helí y dijo: Heme aquí, ya que me has llamado. Helí dijo: No te he llamado, vuélvete a dormir. Fuese Samuel y acostóse de nuevo. 1SM003006 Volvió el Señor por segunda vez a llamar a Samuel, y, levantándose éste, fue a Helí y le dijo: Heme aquí pues me has llamado. Helí le respondió: Hijo mío, yo no te he llamado; vuélvete a dormir. 1SM003007 Y es que Samuel no conocía todavía la voz del Señor, pues hasta entonces no le había sido revelada la palabra del Señor. 1SM003008 Repitió el Señor y llamó por tercera vez a Samuel, el cual, levantándose, volvió a Helí, 1SM003009 diciendo: Heme aquí, pues que me has llamado. Con esto reconoció Helí que era el Señor quien llamaba al joven, y dijo a Samuel: Vete a dormir, y si te llamare otra vez, responderás: Hablad, ¡oh Señor!, que vuestro siervo escucha. Volvióse, pues, Samuel a su aposento, y se puso otra vez a dormir. 1SM003010 Vino entonces el Señor, y llegándose a Samuel, le llamó como las otras veces: Samuel, Samuel. A lo que respondió Samuel: Hablad, Señor, que vuestro siervo os escucha. 1SM003011 Y dijo el Señor a Samuel: Mira, Yo voy a hacer una cosa en Israel que a todo aquel que la oyere, le retiñirán de terror ambos oídos. 1SM003012 En aquel día Yo verificaré cuanto tengo dicho contra Helí y su casa; daré principio a ello, y lo concluiré. 1SM003013 Porque ya le predije que había de castigar perpetuamente su casa por causa de su iniquidad; puesto que, sabiendo lo indignamente que se portan sus hijos, no los ha corregido como debía. 1SM003014 Por lo cual he jurado a la casa de Helí que su iniquidad no se expiará jamás ni con víctimas ni con ofrendas. 1SM003015 Durmió después Samuel hasta la mañana, y a su tiempo abrió las puertas de la casa del Señor; pero temía descubrir a Helí la visión. 1SM003016 Llamóle, pues, Helí, y le dijo: Samuel, hijo mío. El cual respondió: Aquí estoy. 1SM003017 Y le preguntó Helí: ¿Qué es lo que te ha dicho el Señor? Ruégote no me encubras nada; el Señor te castigue severamente si me ocultares alguna cosa de cuanto se te ha dicho. 1SM003018 Manifestóle, pues, Samuel, una por una todas las palabras, sin ocultarle nada; y Helí respondió: Él es el Señor; haga lo que sea agradable a sus ojos. 1SM003019 Samuel, empero, iba creciendo, y el Señor estaba con él; y de todas su predicciones ni una siquiera dejó de verificarse. 1SM003020 Con lo que conoció todo Israel, desde Dan hasta Bersabee, que Samuel era un verdadero profeta del Señor. 1SM003021 Y el Señor prosiguió apareciendosele en Silo, porque en Silo fue en donde se manifestó a Samuel la primera vez, conforme a la palabra del Señor. Y cumplióse cuanto dijo Samuel a todo el pueblo de Israel. 1SM004001 Sucedió por aquellos días que los filisteos se juntaron para hacer la guerra a los israelitas. Israel se puso también en campaña para combatir a los filisteos, y acampó junto a la piedra llamada después piedra del socorro. Los filisteos, por su parte, avanzaron hasta Afec, 1SM004002 y presentaron a Israel la batalla. Comenzada ésta, Israel volvió las espaldas a los filisteos, quienes mataron en aquel choque, y dejaron tendidos por los campos, al pie de cuatro mil hombres. 1SM004003 Vuelto el grueso del ejército al campamento, dijeron los ancianos de Israel: ¿Cómo es que el Señor nos ha derrotado hoy delante de los filisteos? Traigamos aquí de Silo el Arca de la Alianza del Señor, y venga en medio de nosotros, para que nos salve de la mano de nuestros enemigos. 1SM004004 Envió, pues, el pueblo a Silo, y trajeron de allí el Arca de la Alianza del Señor de los ejércitos, que está sentado sobre los querubines; y los dos hijos de Helí, Ofni y Finees, acompañaban el Arca de la Alianza de Dios. 1SM004005 Luego que el Arca de la Alianza del Señor llegó al campamento, dio voces todo Israel con grande algazara, que resonaron por todo el país, 1SM004006 Y, oyéndolas los filisteos, dijeron: ¿Qué gritería es esta que se oye en el campamento de los hebreos? Y supieron que era por haber llegado al campamento el Arca del Señor. 1SM004007 Con esto se atemorizaron los filisteos y dijeron: El Dios de ellos ha venido a sus reales; y añadían gimiendo: 1SM004008 ¡Ay de nosotros! No estaban, no, ni ayer ni anteayer con tanta alegría. ¡Tristes de nosotros! ¿Quién nos librará de la mano de ese Dios excelso? Ése es aquel Dios que castigó al Egipto con toda suerte de plagas, y que condujo a Israel por el desierto. 1SM004009 Pero, ánimo, filisteos, tened valor; no seáis esclavos de los hebreos, como ellos lo han sido de vosotros tantos años. Esforzaos y pelead con denuedo. 1SM004010 Dieron, pues, los filisteos la batalla, y quedó derrotado Israel; y todos los que pudieron huyeron a sus casas. El destrozo de los israelitas fue tan grande, que quedaron muertos treinta mil infantes. 1SM004011 Fue tomada el Arca de Dios y muertos los dos hijos de Helí, Ofni y Finees. 1SM004012 Aquel mismo día un soldado de la tribu de Benjamín, escapando de la batalla, vino corriendo a Silo, rasgado el vestido y cubierto de polvo la cabeza en señal de dolor. 1SM004013 Al tiempo que llegó, estaba Helí sentado en su silla de audiencias, a la entrada del templo, mirando hacia el camino; porque su corazón se hallaba en un continuo sobresalto por el Arca del Señor. Habiendo entrado, pues, aquel soldado, publicó luego la noticia por la ciudad, y toda la gente prorrumpió en grandes alaridos. 1SM004014 Helí, oído el clamor general dijo: ¿Qué ruido tumultuoso es ése? Llegó entonces aquel hombre a toda prisa a Helí, y diole la noticia. 1SM004015 Helí tenía a la sazón noventa y ocho años, y sus ojos habían cegado, de suerte que no podía ver. 1SM004016 Dijo, pues, el soldado a Helí: Yo soy el que acabo de venir de la batalla, y yo el que hoy escapé del combate. Díjole Helí: ¿Qué ha sucedido, hijo mío? 1SM004017 A lo que respondió el hombre que había traído la nueva, diciendo: Huyó Israel delante de los filisteos, y ha sido grande el destrozo del ejército; y, además, han quedado muertos tus dos hijos Ofni y Finees, y el Arca de Dios ha sido cogida. 1SM004018 Apenas el hombre hubo nombrado el Arca de Dios, cayó Helí de espaldas de la silla junto a la puerta, y, quebrándose la cerviz, murió, siendo como era ya hombre anciano y de una edad decrépita. Fue Helí juez de Israel cuarenta años. 1SM004019 Estaba preñada una nuera suya, mujer de Finees, y cercana al parto; la cual, al oír la noticia del cautiverio del Arca de Dios y de la muerte de su suegro y de su marido, sorprendida repentinamente de los dolores, inclinóse y parió. 1SM004020 Cuando estaba ya expirando, dijéronle los que le asistían: Buen ánimo, que has parido un hijo. Mas ella, penetrada de dolor, no les contestó, ni se dio por entendida. 1SM004021 Llamó, sí, al niño Icabob, diciendo: Acabóse la gloria de Israel, a causa de haber sido cogida el Arca de Dios y muertos su suegro y su marido. 1SM004022 Y dijo: Acabóse la gloria de Israel, porque el Arca de Dios había sido cogida. 1SM005001 Tomaron, pues, los filisteos el Arca de Dios y la transportaron de la piedra del socorro a la ciudad de Azoto. 1SM005002 Llevada que fue allá, metiéronla en el templo de Dagón, colocándola junto al ídolo Dagón. 1SM005003 Mas al otro día, habiéndose levantado muy temprano los azocios, hallaron que Dagón yacía boca abajo en el suelo delante del Arca del Señor; y alzaron a Dagón y le pusieron en su lugar. 1SM005004 Al día siguiente, levantándose también de madrugada, encontraron a Dagón tendido en tierra sobre su pecho delante del Arca del Señor; mas la cabeza de Dagón y las dos manos, cortadas del tronco, estaban sobre el umbral de la puerta; 1SM005005 de suerte que sólo el tronco de Dagón había quedado allí donde cayó. Por esta razón, aun en el día de hoy, los sacerdotes de Dagón, y todos los que entran en su templo, no ponen el pie sobre el umbral del templo de Dagón, en Azoto. 1SM005006 Tras esto, la mano del Señor descargó terriblemente sobre los azocios, y los asoló; e hirió a los de Azoto y su comarca en la parte más secreta de las nalgas. Al mismo tiempo las aldeas y campos de aquel país comenzaron a bullir, y apareció una gran multitud de ratones; con lo que toda la ciudad quedó consternada por la gran mortandad que causaban. 1SM005007 Viendo, pues, tal plaga los vecinos de Azoto, dijeron: No quede más entre nosotros el Arca del Dios de Israel; porque es muy pesada su mano sobre nosotros y sobre nuestro dios Dagón. 1SM005008 Y, habiendo enviado a buscar a todos los sátrapas o príncipes de los filisteos, les dijeron: ¿Qué haremos del Arca del Dios de Israel? A lo que respondieron los geteos: Llévese por los contornos. Llevaron, pues, el Arca del Dios de Israel de un lugar a otro. 1SM005009 Y, conforme la iban así conduciendo de ciudad en ciudad, el Señor descargaba su mano sobre ellas, causando una mortandad grandísima: y hería a las moradores de cada pueblo desde el menor hasta el mayor; de modo que sus hemorroides, hinchadas y caídas, se corrompían; por lo que los geteos, discurriendo entre sí, se hicieron unos asientos de pieles. 1SM005010 Y enviaron el Arca de Dios a Acarón. Mas llegada que fue allí, exclamaron los acaronitas, diciendo: Nos han traído el Arca del Dios de Israel para que nos mate a nosotros y a nuestro pueblo. 1SM005011 Por lo cual hicieron que se juntasen todos los sátrapas de los filisteos, los cuales dijeron: Devolved el Arca del Dios de Israel, y restituyase a su lugar; a fin de que no acabe con nosotros y con nuestro pueblo. 1SM005012 Porque se difundía por todas las ciudades el terror de la muerte; y la mano de Dios descargaba terriblemente sobre ellas, pues aun los que no morían, estaban llagados en las partes más secretas de las nalgas; y los alaridos de cada ciudad subían hasta el cielo. 1SM006001 Estuvo, pues, el Arca del Señor en el país de los filisteos por espacio de siete meses. 1SM006002 Y, convocando los filisteos a los sacerdotes y adivinos, les dijeron: ¿Qué haremos del Arca del Señor? Instruidnos en qué forma debamos remitirla a su lugar. A lo que respondieron: 1SM006003 Si remitís el Arca del Dios de Israel, no habéis de remitirla vacía, sino pagadle con algún presente lo que debéis por el pecado, y entonces sanaréis y conoceréis por qué la mano de Dios no cesa de castigar. 1SM006004 Dijeron ellos: ¿Qué es lo que debemos pagarle en expiación por el pecado? A lo que les contestaron: 1SM006005 Haréis de oro cinco figuras de hemorroides, y otras tantas figuras de ratones, también de oro; conforme al número de provincias de los filisteos; pues que todos vosotros y vuestros sátrapas habéis padecido una misma plaga. Por lo tanto, haréis unas figuras de hemorroides, y otras de los ratones que han talado la tierra, y daréis gloria al Dios de Israel; a ver si con esto levanta su mano de vosotros y de vuestros dioses y de vuestro país. 1SM006006 ¿Por qué endurecéis vuestros corazones, como endureció el suyo el Egipto y Faraón? ¿No es así que después de haber sido castigado con varias plagas, entonces soltó a los israelitas para que se fuesen? 1SM006007 Ahora, pues, manos a la obra: haced un carro nuevo, y uncid al carro dos vacas recién paridas, que no hayan traído yugo; y encerrad en la boyera sus ternerillos. 1SM006008 Tomaréis después el Arca del Señor y la pondréis en el carro; colocando a su lado en un cofrecito las figuras de oro que le consagrasteis por el pecado, y dejadla ir. 1SM006009 Y estaréis en observación, y si viereis que toma el camino que va a su país, hacia Betsamés, sabed que el Dios de Israel es quien nos ha causado tan grande mal; pero si no, no ha sido Él; y sabremos que no es su mano la que nos ha azotado, sino que ha sido un efecto casual. 1SM006010 Hiciéronlo, pues, así puntualmente, y, tomando dos vacas que daban de mamar a sus becerrillos, las uncieron al carro, y encerraron los ternerillos en la boyera. 1SM006011 Y pusieron sobre el carro el Arca de Dios y el cofrecito que contenía los ratones de oro y las figuras de las hemorroides. 1SM006012 Mas las vacas, habiendo comenzado a marchar, se dirigieron vía recta por el camino que va a Betsamés, y seguían como de acuerdo el mismo camino, tirando adelante, y mugiendo, sin desviarse a la diestra ni a la siniestra. Los sátrapas de los filisteos fueron siguiendo detrás en observación hasta llegar al territorio de Betsamés. 1SM006013 Estaban los betsamitas segando el trigo en un valle, y, alzando los ojos, vieron el Arca, cuya vista los llenó de gozo. 1SM006014 El carro llegó al campo del betsamita Josué y se paró en él. Había allí una gran piedra, y, haciendo pedazos las maderas del carro, pusieron encima las vacas y las ofrecieron en holocausto al Señor. 1SM006015 Mas los levitas bajaron el Arca de Dios, y el cofrecito que estaba a su lado, donde venían los votos de oro, y colocáronla sobre aquella gran piedra. Entonces los betsamitas ofrecieron holocaustos delante del Arca, e inmolaron en aquel día víctimas al Señor; 1SM006016 lo cual vieron los cinco sátrapas de los filisteos y el mismo día se volvieron a Acarón. 1SM006017 Y éstas son las ciudades que ofrecieron las hemerroides hechas de oro, que los filisteos tributaron al Señor para expiar el pecado: Azoto, Garza, Ascalón, Get, Acarón, una cada ciudad. 1SM006018 Y los ratones de oro que ofrecieron, fueron tantos cuantas eran las poblaciones de los filisteos en las cinco provincias, comenzando desde las ciudades muradas hasta las aldeas que no tienen muros; todo el país hasta la piedra grande llamada después Abel, sobre la cual habían colocado el Arca del Señor, piedra que hasta hoy día está en la heredad de Josué, betsamita. 1SM006019 Mas el Señor castigó a los moradores de Betsamés, y ciudades vecinas, porque se pusieron a mirar con curiosidad lo interior del Arca del Señor contra lo mandado; y mató setenta hombres de los ancianos del pueblo y cincuenta mil del vulgo. Y prorrumpieron todos en llanto, al ver que el Señor había herido al pueblo con tan grande mortandad. 1SM006020 Por lo que dijeron los ciudadanos de Bersamés: ¿Quién podrá estar en la presencia de este Señor, de este Dios tan santo? ¿Y a qué lugar podrá trasladarse? 1SM006021 Enviaron, pues, mensajeros a los habitantes de Cariatiarín, diciendo: Los filisteos han restituido el Arca del Señor; bajad, y llevárosla otra vez. 1SM007001 Vinieron, pues, los de Cariatiarín y transportaron el Arca del Señor, y colocáronla en casa de Abinadab, que habitaba en Gabaa; consagrando a su hijo Eleazar, para que cuidase del Arca del Señor. 1SM007002 Y sucedió que desde el día en que el Arca del Señor llegó a Cariatiarín pasó mucho tiempo (pues ya era el año vigésimo), y toda la casa de Israel gozó de paz siguiendo al Señor. 1SM007003 Porque Samuel habló a toda la casa de Israel, diciendo: Si de todo corazón os convertís al Señor, arrojad en medio de vosotros los dioses ajenos, los Baal, y los Astarot; y preparad vuestros corazones para el Señor, y servidle a Él sólo, y os librará del poder de los filisteos. 1SM007004 Entonces los hijos de Israel arrojaron de sí los Baal y los Astarot, y sirvieron a sólo el Señor. 1SM007005 Dijo también Samuel: Convocad en Masfa a todo Israel, para que yo haga oración por vosotros al Señor. 1SM007006 Congregáronse, pues, en Masfa, y sacaron agua y la derramaron en presencia del Señor, ayunando aquel día, y diciendo: hemos pecado contra el Señor. Y Samuel ejerció allí en Masfa las funciones del juez de Israel. 1SM007007 Mas oyendo los filisteos que los israelitas se habían congregado en Masfa, salieron sus sátrapas o príncipes contra Israel; lo cual sabiendo los hijos de Israel, temieron el encuentro de los filisteos, 1SM007008 y dijeron a Samuel: No ceses de clamar por nosotros al Señor Dios nuestro, para que nos salve de las manos de los filisteos. 1SM007009 Tomó Samuel un cordero de leche, ofrecióle entero en holocausto al Señor, y clamó Samuel al Señor por Israel, y oyó el Señor sus ruegos. 1SM007010 En efecto, mientras Samuel ofrecía el holocausto, comenzaron los filisteos el combate contra Israel; mas el Señor tronó en aquel día con espantoso estruendo contra los filisteos, y los aterró de tal suerte, que fueron derrotados por Israel. 1SM007011 Y los israelitas, habiendo salido de Masfa, persiguieron a los filisteos, y los fueron acuchillando hasta un lugar que cae debajo de Betcar. 1SM007012 Tomó, pues, Samuel una piedra, y púsola entre Masfa y Sen, y llamó aquel lugar piedra del socorro, diciendo: Hasta este lugar nos ha socorrido el Señor. 1SM007013 Quedaron entonces humillados los filisteos, y ya no se atrevieron a venir más a las tierras de Israel. Así, pues, la mano del Señor se hizo sentir sobre los filisteos mientras vivió Samuel. 1SM007014 Y fueron restituidas a Israel las ciudades que los filisteos le tenían usurpadas, desde Acarón hasta Get, con sus términos; y libró Samuel a los israelitas de mano de los filisteos, y hubo paz entre Israel y el amorreo. 1SM007015 Continuó, pues, Samuel siendo juez de Israel durante su vida; 1SM007016 e iba todos los años a Belén, y de allí a Gálgala, y después a Masfa, juzgando o administrando justicia a Israel en estos lugares. 1SM007017 Volvíase después a Ramata, por tener allí su casa, donde juzgaba también a Israel, y donde asimismo edificó un altar al Señor. 1SM008001 Mas como Samuel fuese ya viejo, constituyó a sus hijos por jueces de Israel, a modo de tenientes suyos. 1SM008002 Llamábase su hijo primogénito Joel, y el segundo Abía; los cuales daban audiencia en Bersabee. 1SM008003 Mas no siguieron las pisadas de su padre Samuel, sino que se dejaron arrastrar de la avaricia, recibiendo regalos y torciendo la justicia. 1SM008004 Por lo que juntándose todos los ancianos de Israel, vinieron a Samuel, que estaba en Ramata, 1SM008005 y dijéronle: Ya ves que tú has envejecido, y que tus hijos no siguen tus pasos; constitúyemos un rey que nos gobierne, como los tienen todas las naciones. 1SM008006 Este lenguaje desagradó a Samuel, al oír que le decían: Constitúyemos un rey que nos gobierne. Con todo hizo oración y consultó al Señor; 1SM008007 y el Señor le dijo: Escucha la voz de ese pueblo; y condesciende a todo lo que te pide; porque no te han desechado a ti, sino a Mí, para que no reine sobre ellos. 1SM008008 Hacen lo que han hecho siempre desde el día en que los saqué de Egipto hasta hoy; como me abandonaron a Mí por servir a dioses ajenos, así hacen contigo. 1SM008009 Ahora, pues, otórgales su petición; pero primero hazles presente y anuncíales el poder del rey que reinará sobre ellos. 1SM008010 Refirió, pues, Samuel al pueblo que le había pedido rey todas las palabras del Señor, 1SM008011 y dijo: Ésta será la potestad del rey que os ha de mandar: tomará vuestros hijos, y los destinará para guiar sus carros, y para ser sus guardias de a caballo que corran delante de sus tiros de cuatro caballos. 1SM008012 De ellos sacará sus tribunos y centuriones, los cultivadores de sus tierras, los segadores de sus mieses y los artífices de sus armas y de sus carros. 1SM008013 Hará asimismo que vuestras hijas sean sus perfumeras, sus cocineras y sus panaderas. 1SM008014 Y, lo que es más, os quitará también lo mejor de vuestros campos, viñas y olivares, y lo dará a sus criados. 1SM008015 Además, diezmará vuestras mieses y los productos de las viñas para darlos a sus eunucos o ministros, y a otros de sus criados. 1SM008016 Tomará también vuestros siervos y siervas, y vuestros robustos jóvenes, y vuestros asnos, y los hará trabajar para él. 1SM008017 Diezmará asimismo vuestros ganados, y todos vosotros vendréis a ser esclavos suyos. 1SM008018 Por lo que alzaréis el grito en aquel día a causa del rey que os elegisteis; y entonces el Señor no querrá oír vuestros clamores, porque vosotros mismos pedisteis tener un rey. 1SM008019 Pero el pueblo no quiso dar oídos a las razones de Samuel, sino que dijeron todos: No, no; ha de haber rey sobre nosotros, 1SM008020 y nosotros hemos de ser como todas las naciones; nuestro rey nos administrará la justicia, y saldrá a nuestra frente y combatirá por nosotros en todas las guerras. 1SM008021 Oyó Samuel todas las palabras del pueblo, y las hizo presentes al Señor. 1SM008022 Pero el Señor dijo a Samuel: Haz lo que te piden, y nómbrales un rey. Dijo, pues, Samuel a los ancianos de Israel: Vayase cada cual a su ciudad. 1SM009001 Vivía en esta sazón un hombre de la tribu de Benjamín, llamado Cis, hijo de Abiel, hijo de Seror, hijo de Becorat, hijo de Afia, hijo de Jemini, varón fuerte y valeroso. 1SM009002 Tenía éste un hijo llamado Saúl, joven gallardo y de tan bella presencia, que no le había más bien dispuesto entre todos los israelitas, sobrepujando lo que va de hombros arriba a todos ellos. 1SM009003 Habíanse perdido unas pollinas de Cis, padre de Saúl; por lo que dijo Cis a Saúl su hijo: Toma contigo un criado y anda a ver si encuentras las pollinas. Ellos, habiendo atravesado la montaña de Efraím, 1SM009004 y el territorio de Salisa, sin haberlas hallado, pasaron asimismo a tierra de Salim, y no aparecían; y también a tierra de Jemini, y en ninguna parte dieron con ellas. 1SM009005 Venidos, finalmente, al territorio de Suf, dijo Saúl al criado que le acompañaba: Ven y volvámonos: no sea que mi padre, dejado ya el cuidado de las pollinas, esté en pena por nosotros. 1SM009006 Respondióle el criado: Mira que en esta ciudad habita un varón de Dios, varón insigne; todo cuanto anuncia, se verifica sin falta; vamos, pues, allá, por si nos da luz acerca del objeto de nuestro viaje. 1SM009007 Dijo entonces Saúl a su criado: Bien está, iremos; pero, ¿qué presente llevaremos al varón de Dios? No hay ya pan en nuestras alforjas, ni tenemos dinero, ni cosa alguna que darle. 1SM009008 Replicó de nuevo el criado a Saúl, y dijo: He aquí la cuarta parte de un siclo de plata, con que me encuentro por casualidad; se la daremos al varón de Dios cuando vayamos a saber de él lo que debemos hacer. 1SM009009 (Antiguamente en Israel todos los que iban a consultar a Dios, solían hablar así: Venid y vamos al vidente. Pues el que hoy se llama profeta, se llamaba entonces vidente.) 1SM009010 Respondió Saúl a su criado: Dices muy bien: vamos allá. Y fueron a la ciudad donde vivía el varón de Dios, 1SM009011 Al subir la cuesta que conduce a ella, encontraron unas doncellas que salían por agua, y les preguntaron: ¿Está aquí el vidente? 1SM009012 Respondieron diciendo: Aquí está; no le tienes muy lejos de ti; date prisa; porque ha venido a la ciudad, por ser día en que el pueblo ha de ofrecer sacrificio en el lugar excelso, 1SM009013 Entretanto en la ciudad, luego le hallaréis, pues no habrá subido todavía al lugar excelso a comer. Porque el pueblo no comerá hasta que él llegue; por cuanto él es quien bendice el sacrificio, y después se ponen a comer los convidados. Así, pues, subid presto, que ahora le hallaréis. 1SM009014 Con esto subieron a la ciudad. Y andando por ella, vieron a Samuel que venía hacia ellos para subir al lugar excelso. 1SM009015 Es de saber que un día antes de la llegada de Saúl, el Señor le había revelado a Samuel secretamente, diciéndole: 1SM009016 Mañana a esta misma hora te enviaré un hombre de la tierra de Benjamín, y le ungirás por caudillo de mi pueblo de Israel; y él salvará a mi pueblo de las manos de los filisteos; porque Yo he vuelto mis ojos hacia el pueblo mío, por cuanto sus clamores han llegado hasta Mí. 1SM009017 Y así fue, que luego que Samuel vio a Saúl, díjole el Señor: Éste es el hombre de quien te hablé; ése reinará sobre mi pueblo. 1SM009018 Acercóse, pues, Saúl a Samuel estando en medio de la puerta, y díjole: Suplicóte me informes dónde está la casa del vidente. 1SM009019 Y Samuel le respondió, diciendo: Yo soy el vidente: Sube delante de mí al lugar excelso; porque hoy comerás conmigo, y mañana te despacharé, después de haberte manifestado todo lo que tienes en tu corazón. 1SM009020 Y acerca de las pollinas que perdiste tres días hace, no estés con cuidado, porque ya aparecieron. Mas, ¿y de quién será todo lo mejor de Israel? ¿Por ventura no será para ti y para toda la casa de tu padre? 1SM009021 A lo que replicando Saúl, dijo: ¿Pues no soy yo hijo de Jemini, de la tribu más pequeña de Israel? ¿Y no es mi familia la última entre todas las de la tribu de Benjamín? ¿Por qué me hablas de esa manera? 1SM009022 Empero, Samuel, tomando consigo a Saúl y al criado, introdújolos en la sala del convite, y los colocó a la cabecera de la mesa, distinguiéndolos sobre todos los convidados, que eran como unas treinta personas. 1SM009023 Y dijo Samuel al cocinero: Saca la porción que te di, mandándote que la guardases aparte. 1SM009024 Sacó entonces el cocinero una espaldilla, y púsola delante de Saúl. Y dijo Samuel: Mira, eso quedó reservado; tómalo y come, puesto que de propósito lo he hecho reservar para ti, cuando he convidado al pueblo. Y comió Saúl con Samuel aquel día. 1SM009025 Y habiendo bajado del lugar excelso a la ciudad, Samuel conversó con Saúl en el terrado. Allí se echó Saúl y durmió 1SM009026 Por la mañana, levantándose al rayar el día, Samuel llamó a Saúl, que estaba en el terrado, diciendo: Ven, y te despacharé. Fue Saúl y marcharon los dos, a saber, él y Samuel. 1SM009027 Y cuando descendían a la parte más baja de la ciudad, dijo Samuel a Saúl: Di al criado que pase y vaya delante de nosotros; mas tú párate un poco, que quiero comunicarte lo que ha dicho y dispuesto sobre ti el Señor. 1SM010001 Entonces sacó Samuel una redomita de óleo o bálsamo, y derramóla sobre la cabeza de Saúl, y besóle, diciendo: He aquí que el Señor te ha ungido para príncipe sobre su herencia, y tú librarás a su pueblo de las manos de sus enemigos que le rodean. Esta señal tendrás de que Dios te ha ungido para príncipe. 1SM010002 Cuando hoy te hayas separado de mí encontrarás dos hombres junto al sepulcro de Raquel, en la frontera de Benjamín, hacia la parte meridional, que te dirán: Se han hallado ya las pollinas que fuiste a buscar; y no pensando ya tu padre en ellas, está inquieto por causa de vosotros y dice: ¿Qué le habrá sucedido a mi hijo? 1SM010003 Y luego que partas de allí, y pases más adelante, en llegando a la encina de Tabor, encontrarás tres hombres, que irán a adorar a Dios en Betel, uno que llevará tres cabritos, otro tres hogazas de pan, y el tercero, una bota de vino; 1SM010004 y, habiéndote saludado, te darán dos panes, que tú recibirás de su mano. 1SM010005 Después que llegues al collado de Dios, donde está el presidio de los filisteos, y entres en la ciudad, encontrarás una compañía o coro de profetas, que bajan del lugar excelso, precedidos de salterio, tambor y flauta, y cítara, y ellos profetizando. 1SM010006 Y te arrebatará el espíritu del Señor, y profetizarás con ellos, y quedarás mudado en otro hombre. 1SM010007 Cuando vieres, pues, cumplidas todas estas señales haz osadamente cuanto te ocurra deber hacer; porque contigo está el Señor. 1SM010008 Después descenderás antes que yo a Gálgala (donde iré a encontrarte), para ofrecer holocaustos, y sacrificar víctimas pacíficas al Señor. Me aguardarás siete días, hasta tanto que yo llegue, y te declare lo que debes hacer. 1SM010009 Así que Saúl volvió las espaldas, y se separó de Samuel, mudóle Dios el corazón en otro, y le sucedieron aquel día todas estas señales. 1SM010010 En efecto, llegados al collado arriba dicho, he aquí que se encuentra con un coro de profetas; y arrebatado del espíritu del Señor, se puso a profetizar o cantar en medio de ellos; 1SM010011 y viendo los que le habían conocido poco antes, cómo estaba con los profetas y profetizando, dijéronse unos a otros: ¿Qué es esto que ha sucedido al hijo de Cis? Pues qué, ¿también Saúl es uno de los profetas? 1SM010012 Sobre lo cual respondieron algunos: ¿Y quién es el padre de estos otros profetas?. Por donde pasó a proverbio: Pues qué, ¿también Saúl es uno de los profetas? 1SM010013 Y cesó Saúl de profetizar, y fuese al lugar alto, a Gabaa, su patria. 1SM010014 Y un tío suyo le dijo a él y a su criado: ¿Adonde habéis ido? Respondiéronle: A buscar las pollinas; y no habiéndolas encontrado, nos dirigimos a Samuel. 1SM010015 Díjole su tío: Cuéntame lo que te ha dicho Samuel. 1SM010016 Y respondió Saúl: Nos hizo saber que habían aparecido las pollinas. Mas no le descubrió nada de lo que Samuel le había dicho acerca del reino. 1SM010017 Después de esto convocó Samuel al pueblo delante del Señor en Masfa; 1SM010018 y dijo a los hijos de Israel: Esto dice el Señor Dios de Israel: Yo saqué a Israel de Egipto, y os libré de las manos de los egipcios y de las manos de todos los reyes que os oprimían; 1SM010019 mas vosotros en el día habéis desechado a vuestro Dios, sólo el cual os ha salvado de todos los males y tribulaciones, y habéis dicho: No más así: establécenos un rey que nos gobierne. Ahora, pues, presentaos delante del Señor por el orden de vuestras tribus y familias. 1SM010020 Y sorteó Samuel todas las tribus de Israel, y cayó la suerte sobre la tribu de Benjamín. 1SM010021 Sorteó después las familias de la tribu de Benjamín, y tocó la suerte a la familia de Metri, y finalmente, a Saúl, hijo de Cis. Buscáronle luego, mas no pudieron encontrarle. 1SM010022 Con esto consultaron al Señor para saber si comparecería allí Saúl. A lo que respondió el Señor: A estas horas está escondido en su casa. 1SM010023 Fueron, pues, corriendo, y trajéronle de allí; y así que estuvo en medio del pueblo, se vio que era más alto que todos los demás todo lo que va de hombros arriba. 1SM010024 Dijo entonces Samuel a todo el pueblo: Ya veis a quién ha elegido el Señor, y que no hay en todo el pueblo uno semejante a él. Y gritó todo el pueblo, diciendo: Viva el rey. 1SM010025 En seguida expuso Samuel al pueblo la ley de la monarquía, y escribióla en un libro, que depositó en el Tabernáculo delante del Señor; después de lo cual despidió Samuel a todo el pueblo, cada cual a su casa. 1SM010026 También Saúl se fue a su casa, en Gabaa; siguiéronle parte del ejército, aquellos cuyos corazones había movido el Señor. 1SM010027 Al contrario, los hijos de Belial, o los inobedientes al Señor, dijeron: ¿Por ventura podrá éste salvarnos? Y le despreciaron (y no le ofrecieron los donativos acostumbrados; mas él disimuló, haciendo como que no lo entendía.) 1SM011001 Pasado casi un mes, Naás, amonita, se puso en movimiento y comenzó a batir a Jabes de Galaad. Y todos los habitantes de Jabes dijeron a Naás: Haz alianza con nosotros, y seremos siervos o tributarios tuyos. 1SM011002 Respondióles Naás, amonita: Haré alianza con vosotros en sacándoos a todos el ojo derecho, y poniéndoos por oprobio de todo Israel. 1SM011003 Dijéronle los ancianos de Jabes: Concédenos siete días, a fin de enviar mensajeros por todos los términos de Israel, y si no hubiere quien nos defienda, nos rendiremos a ti. 1SM011004 Llegaron, pues, los mensajeros de Gabaa, patria de Saúl, y refirieron lo dicho, escuchándolo el pueblo; todo el cual, a voz en grito, echó a llorar. 1SM011005 Venía a la sazón Saúl del campo en pos de sus bueyes, y preguntó: ¿Qué llanto es ese del pueblo? Y contáronle lo que habían enviado a decir los habitantes de Jabes. 1SM011006 Al oírlo quedó arrebatado del espíritu del Señor. E irritado sobre manera, 1SM011007 tomó los dos bueyes y los hizo trozos; los que envió por todos los términos de Israel por medio de unos mensajeros que dijesen: Así serán tratados los bueyes de todo aquel que no saliere a campaña, y no siguiere a Saúl y a Samuel. Con esto se apoderó del pueblo el temor del Señor, y salieron todos a una, como si fueran un hombre solo. 1SM011008 Pasó Saúl revista de ellos en Beced, y halláronse trescientos mil hombres de los hijos de Israel, y treinta mil de sola la tribu de Judá. 1SM011009 Y respondieron a los mensajeros que habían venido de Jabes: Diréis a los habitantes de Jabes de Galaad: Mañana, en calentando el sol, seréis socorridos. Partieron, pues, los mensajeros, y llevaron esta nueva alegría. 1SM011010 Los cuales dijeron a los enemigos: Mañana saldremos a vosotros y nos trataréis como os pluguiere. 1SM011011 Venido, pues, el día siguiente, dividió Saúl el ejército en tres cuerpos, y al rayar el alba, entró por medio de los reales de los amonitas, y los estuvo acuchillando hasta que el sol comenzó a calentar; desparramándose de tal suerte los que escaparon, que no quedaron dos de ellos juntos. 1SM011012 Entonces dijo el pueblo a Samuel: ¿Quiénes son los que decían: Saúl ha de ser acaso rey? Entréganos esos hombres, y los mataremos. 1SM011013 Mas Saúl les dijo: Ninguno ha de morir en este día; ya que hoy el pueblo del Señor ha salvado a Israel. 1SM011014 Después dijo Samuel al pueblo: Venid y vamos a Gálgala, y confirmemos allí a Saúl en el reino. 1SM011015 Encaminóse, pues, todo el pueblo a Gálgala, y allí reconocieron nuevamente por rey a Saúl, e inmolaron al Señor víctimas pacíficas; regocijándose mucho en aquel sitio así Saúl como todos los hijos de Israel. 1SM012001 Entonces dijo Samuel a todo el pueblo de Israel: Ya veis que he condescendido con vosotros en todo lo que me habéis propuesto; y que os he dado un rey; 1SM012002 y este rey se halla ya al frente de vosotros. Yo ya soy viejo y lleno de canas, y mis hijos con vosotros están. Entre vosotros he vivido desde mi juventud hasta hoy día; aquí me tenéis presente. 1SM012003 Declarad contra mí delante del Señor y de su ungido, si acaso yo he usurpado el buey o el asno u otra cosa de ninguna persona; si he calumniado a nadie, si le he oprimido; si he aceptado cohecho, ni regalo alguno de quien quiera que sea: que hoy os satisfaré, y lo restituiré. 1SM012004 A lo que dijeron: No nos has calumniado, ni oprimido, ni has tomado de nadie cosa chica ni grande. 1SM012005 Repúsole Samuel: Testigo es el Señor contra vosotros, y testigo su ungido en este día de que no habéis hallado nada que decir contra mi conducta. Respondieron: Testigo. 1SM012006 Y dijo Samuel al pueblo: Sí; testigo me es aquel Señor que crió a Moisés y Aarón, y sacó a nuestros padres de la tierra de Egipto. 1SM012007 Ahora bien, compareced vosotros para que yo delante del Señor os haga cargo en juicio de todas las misericordias que os hizo a vosotros y a vuestros padres: 1SM012008 acordaos de cómo Jacob entró en Egipto, y de qué manera clamaron vuestros padres al Señor; el cual envió a Moisés y Aarón, y sacaron a vuestros padres de Egipto, y se establecieron en este país. 1SM012009 Mas ellos se olvidaron del Señor Dios suyo; por lo que los entregó en poder de Sisara, capitán general del ejército de Hasor, y en poder de los filisteos, y en poder también del rey de Moab, que les hicieron guerra. 1SM012010 Pero después clamaron al Señor, diciendo: Hemos pecado; pues abandonamos al Señor, y hemos servido a Baal y a Astarot; ahora, pues, líbranos de las manos de nuestros enemigos, y te serviremos. 1SM012011 Con efecto, el Señor os envió a Jerobaal, y a Badán, y a Jefté, y a Samuel, y os libró del poder de vuestros enemigos que os rodeaban, y vivisteis en seguridad. 1SM012012 Pero viendo que Naás, rey de los amonitas, marchaba contra vosotros, me dijisteis: No ha de ser como hasta aquí, sino que nos ha de mandar un rey; siendo así que era entonces el mismo Señor Dios vuestro el que reinaba en medio de vosotros. 1SM012013 Ahora bien, aquí tenéis a vuestro rey; ya que vosotros escogisteis y pedisteis tenerle: ya veis cómo el Señor as ha dado rey. 1SM012014 Con todo, si temiereis al Señor, y le sirviereis, y escuchareis su voz, y no fuereis rebeldes a sus palabras, entonces, así vosotros como el rey que os gobierna, seréis dichosos, siguiendo al Señor Dios vuestro. 1SM012015 Mas si no escuchareis la voz del Señor, y fuereis rebeldes a sus mandatos, descargará sobre vosotros la mano del Señor, como hizo sobre vuestros padres. 1SM012016 Pero aguardad ahora un poco y veréis este prodigio que va el Señor a hacer delante de vuestros ojos. 1SM012017 ¿No estamos ahora en la siega de los trigos?. Pues yo voy a invocar al Señor, y enviará repentinamente truenos y lluvias; a fin de que entendáis y veáis cuan grande es delante del Señor el mal que habéis hecho pidiendo un rey 1SM012018 Clamó, pues, Samuel al Señor, y el Señor envió truenos y lluvias en aquel mismo día; 1SM012019 con lo que todo el pueblo temió en gran manera al Señor y a Samuel, y dijeron todos juntos a Samuel: Ruega por tus siervos al Señor Dios tuyo, para que no muramos; porque a todos los demás pecados nuestros hemos añadido aún la maldad de pedir un rey que nos gobierne. 1SM012020 Dijo entonces Samuel al pueblo: No temáis: vosotros es verdad habéis cometido todos esos pecados; sin embargo, no os apartéis del camino del Señor, sino servidle de todo vuestro corazón; 1SM012021 ni queráis descarriaros en pos de cosas vanas, que no os aprovecharán de nada, ni os librarán; puesto que no son más que vanidad y mentira. 1SM012022 Porque el Señor, por amor de su nombre grande y santo, no desamparará a su pueblo, habiendo jurado tomaros por propio pueblo suyo. 1SM012023 Por lo demás, lejos de mí cometer tal pecado contra el Señor, que yo os enseñaré siempre el recto y buen camino. 1SM012024 Así pues, temed al Señor y servidle de veras y de todo vuestro corazón, ya que habéis visto las maravillas que ha obrado entre vosotros. 1SM012025 Mas si os obstináis en la malicia, pereceréis juntamente vosotros y vuestro rey. 1SM013001 Era Saúl cuando comenzó a reinar, inocente como un niño de un año, y reinó así dos años sobre Israel. 1SM013002 Y escogióse tres mil hombres de Israel; de los cuales dos mil estaban con Saúl enfrente de Macmas, y en el monte de Betel; y los otros mil con Jonatás enfrente de Gabaa de Benjamín; y despidió todo el resto del pueblo, cada uno a su casa. 1SM013003 Y Jonatás pasó a cuchillo la guarnición de los filisteos, puesta en Gabaa; lo que supieron luego los filisteos. Y Saúl mandó publicarlo a son de trompeta por todo el país, diciendo: Sepan esto los hebreos. 1SM013004 Y corrió por todo Israel la noticia de que Saúl había destrozado la guarnición de los filisteos; con lo que cobró Israel aliento contra ellos; y acudió con algaraza a Saúl en Gálgala. 1SM013005 También los filisteos se congregaron para pelear contra Israel, con treinta mil carros de guerra, seis mil caballos, y gente de a pie, en tanto número como las arenas de la orilla del mar; y avanzando, se acamparon en Macmas, al oriente de Betavén o Betel. 1SM013006 Viéndose los israelitas estrechados, o en apuro (estando ya desalentado todo el pueblo), ocultáronse en cuevas y subterráneos y entre peñascos, y en las grutas y cisternas. 1SM013007 Parte de los hebreos pasaron el Jordán, retirándose a la tierra de Gad y de Galaad. En suma, estando todavía Saúl en Gálgala, todo el pueblo que le seguía cayó en un terror grande. 1SM013008 Estuvo Saúl esperando siete días, según el plazo señalado por Samuel; mas Samuel no compareció en Caígala; y poco a poco se le iba marchando toda la gente. 1SM013009 Dijo, pues, Saúl: Traedme el holocausto y las hostias pacíficas. Y él mismo ofreció el holocausto. 1SM013010 Acabado que hubo de ofrecer el holocausto, he aquí que llegaba Samuel; y Saúl le salió al encuentro para saludarle. 1SM013011 Y díjole Samuel: ¿Qué has hecho? Respondió Saúl: Como vi que me iba abandonando la gente, y que tú no venías en el plazo señalado, y los filisteos por su parte se habían juntado en Macmas, 1SM013012 dije para mí: Ahora los filisteos bajarán contra mí a Gálgala, y yo aún no he aplacado al Señor. Forzado, pues, de la necesidad, he ofrecido el holocausto. 1SM013013 Dijo Samuel a Saúl: has obrado neciamente, no cumpliendo los mandatos que te intimó el Señor Dios tuyo. Que si eso no hicieras, desde ahora hubiera el Señor asegurado para siempre tu reino sobre Israel. 1SM013014 Mas ya tu reino no durará por mucho tiempo. El Señor se ha buscado un varón, según su corazón; al cual ha llamado a ser caudillo de su pueblo; por cuanto tú no guardaste lo mandado por el Señor. 1SM013015 Con esto se retiró Samuel, y subió de Gálgala a Gabaa de Benjamín. Lo restante de la gente avanzó siguiendo a Saúl contra unos enemigos que asaltaban en el cerro de Benjamín a los que iban de Gálgala a Gabaa. Saúl, hecha la revista de la gente que tenía, se halló con unos seiscientos hombres. 1SM013016 Estaban, pues, Saúl y Jonatás, su hijo, y su tropa, en Gabaa de Benjamín; los filisteos, empero, habían puesto su campo en Macmas. 1SM013017 Y, saliendo tres bandadas de filisteos al pillaje, una tomó el camino de Efra, hacia la tierra de Saúl; 1SM013018 otra marchó por el camino que va a Betorón, y la tercera se dirigió hacia el camino del collado que domina el valle de Seboim, enfrente del desierto. 1SM013019 En toda la tierra de Israel no se hallaba un herrero; porque los filisteos habían tomado esta precaución, para que los hebreos no forjasen espadas ni lanzas. 1SM013020 Por manera que todo Israel tenía que acudir a los filisteos para aguzar la reja, el azadón, la segur y el escardillo; 1SM013021 por esto estaban embotados los filos de las rejas, y azadones, y horquillas, y segures; y hasta para componer una aguijada había de recurrir a ellos. 1SM013022 Y así fue que, venido el día de la batalla, no se halló entre toda la gente que tenía consigo Saúl y Jonatás quien tuviese en su mano espada o lanza, a excepción de Saúl y de su hijo Jonatás. 1SM013023 Y salió un cuerpo de filisteos y avanzó hasta más allá de Macmas. 1SM014001 Sucedió un día que Jonatás, hijo de Saúl, dijo al joven su escudero: Ven y lleguemos hasta donde están apostados los filisteos, que es más allá de aquel lugar. Pero no dio parte de esto a su padre. 1SM014002 Y estaba Saúl acampado en la extremidad del territorio de Gabaa, debajo de un granado que había en Magrón. Y tenía consigo un tercio de gente como de unos seiscientos hombres. 1SM014003 Aquías, hijo de Aquitob, hermano de Icabod, hijo de Finees y nieto de Helí, Sumo Sacerdote del Señor en Silo, estaba revestido del efod. Asimismo el pueblo no sabía adonde había ido Jonatás. 1SM014004 Entre los repechos por donde intentaba Jonatás atravesar hasta el apostadero de los filisteos, descollaban por entrambos lados altos peñascos y dos picos cortados por uno y otro lado a manera de dientes, de los cuales uno se llamaba Boses y el otro Sene; 1SM014005 el uno se levantaba enfrente a Macmas por la parte del Norte, y el otro al Mediodía hacia Gabaa. 1SM014006 Dijo, pues, Jonatás al joven su escudero: Ven y pasemos al apostadero de estos incircuncisos: quizás el Señor combatirá por nosotros y venceremos; porque le es igualmente fácil a Dios el dar la victoria con mucha que con poca gente. 1SM014007 Respondió su escudero: Haz cuanto te pareciere; ve adonde gustases, que yo te seguiré a todas partes. 1SM014008 Añadió Jonatás: Mira, nosotros nos vamos acercando a esos hombres; si luego que nos hayan descubierto 1SM014009 nos dijeran: Esperad ahí hasta que vayamos a vosotros, quedémonos quietos y no avancemos hacia ellos. 1SM014010 Pero si dijeren: Llegaos acá; avancemos, porque los ha puesto el Señor en nuestras manos. Esto nos servirá de señal. 1SM014011 Luego, pues, que los dos fueron descubiertos por el guardia de los filisteos, dijeron éstos: He allí los hebreos que van saliendo de las cavernas donde se habían escondido. 1SM014012 Y algunos soldados de la guardia avanzada, dirigiéndose a Jonatás y a su escudero, les dijeron: Acercaos a nosotros, que tenemos que deciros una cosa. Con esto dijo Jonatás a su escudero: Subamos; sigúeme, porque el Señor los ha entregado en manos de Israel. 1SM014013 Subió, pues, Jonatás, trepando con manos y pies, y en pos de él su escudero, y arremetiendo a los enemigos, unos caían a los pies de Jonatás y a otros mataba su escudero que le había seguido. 1SM014014 Y éste fue el primer destrozo en que Jonatás y su escudero mataron como unos veinte hombres, en el espacio de tierra que suele arar una yunta de bueyes en medio día. 1SM014015 Esparcióse luego un terror pánico por todos los reales de los filisteos y demás tropa que estaba en la campaña, pues aun toda la tropa de aquellas bandas que habían salido al pillaje se llenó de pavor, y conmovióse el país; y el suceso fue como un milagro de Dios. 1SM014016 Entretanto las avanzadas de Saúl, apostadas en Gabaa de Benjamín, repararon y vieron una multitud de gente tendida en el suelo, y otros que huían y escapaban por todos lados. 1SM014017 Dijo entonces Saúl a los que con él estaban: Inquirid y averiguad quién se ha salido de nuestro campamento. Habiéndolo averiguado hallaron que faltaban Jonatás y su escudero. 1SM014018 Dijo Saúl a Aquías: Acércate al Arca de Dios (porque en aquel día el Arca de Dios se hallaba allí con los hijos de Israel). 1SM014019 Mientras que Saúl estaba hablando con el sacerdote, se oyó un ruido confuso, como de un grande alboroto, que viniendo de los reales de los filisteos, iba creciendo poco a poco, y se percibía cada vez más. Entonces dijo Saúl al sacerdote: Baja tus manos, deja de consultar. 1SM014020 Al punto Saúl y toda su gente alzaron el grito, y fueron hasta el lugar del alboroto, y hallaron que los filisteos habían tirado de las espadas unos contra otros, siendo grandísima la mortandad. 1SM014021 Además los hebreos que en los días anteriores se habían pasado a los filisteos, y estaban con éstos en el campamento, volviéronse a incorparar con los israelitas que estaban con Saúl y Jonatás. 1SM014022 Asimismo todos los israelitas escondidos en la montaña de Efraím, habiendo sabido que los filisteos huían, se juntaron con los suyos para pelear; por lo que se hallaba ya Saúl con cerca de unos diez mil hombres. 1SM014023 En aquel día salvó el Señor a Israel; y el combate prosiguió hasta Betavén. 1SM014024 Reuniéronse entonces los israelitas, y Saúl juramentó al pueblo, diciendo: Maldito sea el hombre que probare bocado antes de la noche, hasta que yo me haya vengado de mis enemigos. Y toda la gente se abstuvo de comer. 1SM014025 Llegó, pues, toda aquella turba de gentes a un bosque, donde se hallaba miel en la superficie del campo. 1SM014026 Entrado que hubo el pueblo en el bosque, vio destilar la miel; mas nadie osó tomarla y acercársela a la boca, porque temían todos violar el juramento del rey. 1SM014027 Pero Jonatás, que no había oído la protesta que su padre había hecho al pueblo con juramento, alargó la punta del bastón que tenía en la mano y mojóla en un panal de miel y aplicóla a su boca; con lo que recobró el vigor de sus ojos. 1SM014028 Entonces le advirtió uno del pueblo, diciendo: Tu padre ha obligado al pueblo con juramento, diciendo: Maldito sea el hombre que probare hoy bocado. (Estaban ya todos desfallecidos.) 1SM014029 A lo que respondió Jonatás: Mi padre lo ha echado a perder todo con ese juramento. Vosotros mismos habéis visto cómo mis ojos han recobrado un nuevo vigor por haber gustado un poquito de esa miel. 1SM014030 ¿Pues cuánto más se habría repuesto la gente si hubiese comido de lo que encontró en el despojo de sus enemigos? ¿Por ventura no se hubiera hecho mayor estrago en los filisteos? 1SM014031 Sin embargo, fueron acuchillando a los filisteos en este día, desde Macmas hasta Ayalón. Mas el pueblo quedó sumamente fatigado, 1SM014032 y entregándose al saqueo, cogió carneros, y bueyes, y becerros, y los degollaron en tierra, y comió el pueblo la carne con sangre. 1SM014033 De lo que avisaron a Saúl, diciéndole que el pueblo había pecado contra el Señor comiendo carne con sangre. Y Saúl dijo: Habéis prevaricado: traed presto rodando una gran piedra. 1SM014034 Y añadió Saúl: Esparcios entre la gente y decidles que traiga acá cada uno su buey, su carnero, y demás animales: degolladlos sobre esa piedra, y después comed: así no pecaréis contra el Señor, comiendo la carne con sangre. Trajo luego todo el pueblo, cada uno por su mano hasta que fue de noche, la res que había de matar. 1SM014035 Saúl edificó en aquel sitio un altar al Señor, siendo éste el primero que erigió. 1SM014036 Dijo después Saúl: Echémonos esta noche sobre los filisteos y acabemos con ellos antes que amanezca, sin dejar hombre con vida. Respondió el pueblo: Haz todo lo que bien te parezca. Mas el sacerdote dijo: Acerquémonos antes aquí a consultar a Dios. 1SM014037 Y consultó Saúl al Señor, diciendo: ¿Seguiré el alcance de los filisteos? ¿Los entregarás en las manos de Israel? Y no le dio el Señor respuesta en aquel día. 1SM014038 Por lo que dijo Saúl: Haced venir aquí todos los principales del pueblo, y averiguad y ved por culpa de quién sucede hoy esto. 1SM014039 Vive el Señor, que es el Salvador de Israel, que si la causa de esto es mi hijo Jonatás, morirá sin remisión; a lo cual ninguno de todo el pueblo le contradijo. 1SM014040 Y dijo a todo Israel: Separaos vosotros a un lado, y yo con mi hijo Jonatás estaremos al otro. Y contestó el pueblo a Saúl: Haz lo que bien te pareciere. 1SM014041 Dijo entonces Saúl al Señor Dios de Israel: ¡Oh Señor Dios de Israel!: danos a entender por qué causa no has respondido hoy a tu siervo. Si la culpa está en mí o en Jonatás, mi hijo, decláralo: pero si tu pueblo es el culpable, manifiesta tu santidad. Y cayó la suerte sobre Jonatás y Saúl, quedando libre el pueblo. 1SM014042 Dijo entonces Saúl: Echad suertes entre mí y Jonatás, mi hijo; y salió Jonatás. 1SM014043 Dijo, pues, Saúl a Jonatás: Declárame qué es lo que has hecho. Jonatás lo confesó todo, diciendo: Gusté ansiosamente con la punta del bastón que traía en la mano, un poquito de miel : y he aquí que voy a morir por eso: aquí me tienes, yo moriré. 1SM014044 Díjole Saúl: Tráteme Dios con todo el rigor de su justicia, si tú, ¡oh Jonatás!, no mueres sin remedio. 1SM014045 El pueblo, empero, dijo a Saúl: ¡Conque ha de morir Jonatás, que acaba de salvar de un modo maravilloso a Israel! Ni hablarse debe de tal cosa. Vive el Señor que no ha de caer en tierra ni un solo cabello de su cabeza; porque él ha obrado en este día con beneplácito y asistencia de Dios. En efecto, el pueblo libertó a Jonatás de la muerte. 1SM014046 Y retiróse Saúl, dejando de perseguir a los filisteos, los cuales se volvieron a sus tierras. 1SM014047 Saúl, luego que vio afirmado su trono de Israel, peleaba contra todos los enemigos de la comarca, contra Moab, y contra los hijos de Ammón, y de Edom, y los reyes de Soba, y los filisteos; y adonde quiera que llevaba sus armas, volvía vencedor. 1SM014048 En fin, reunido su ejército deshizo a los amalecitas; y libertó a Israel de las manos de los que le asolaban. 1SM014049 Los hijos de Saúl fueron Jonatás, Jesuí y Melquisua: y de dos hijas que tuvo, la primogénita se llamaba Merob, y la menor Micol. 1SM014050 La mujer de Saúl se llamaba Aquinoam, hija de Aquimaas. El capitán general de sus ejércitos se llamaba Abner, hijo de Ner, primo hermano de Saúl: 1SM014051 porque Cis, que era padre de Saúl, y Ner, padre de Abner, eran hijos de Abiel. 1SM014052 Por lo demás, en todo el tiempo de Saúl hubo guerra muy viva contra los filisteos. Por cuya razón luego que Saúl tenía noticia de algún varón esforzado y hábil para la guerra, le tomaba consigo. 1SM015001 Después de esto dijo Samuel a Saúl: El Señor me envió a ungirte rey sobre su pueblo de Israel: Escucha, pues, ahora lo que te manda el Señor: 1SM015002 Esto dice el Señor de los ejércitos: Tengo bien presente todo cuanto Amalec hizo contra Israel y cómo se le opuso en el camino cuando subía de Egipto. 1SM015003 Ve, pues, ahora y destroza a Amalec y arrasa cuanto tiene: no le perdones, ni codicies nada de sus bienes, sino mátalo todo, hombres y mujeres, muchachos y niños de pecho, bueyes y ovejas, camellos y asnos. 1SM015004 Conforme a esto, Saúl convocó al pueblo, y pasándole revista, como cuenta el pastor sus corderos, se halló con doscientos mil hombres de a pie de todas las tribus de Israel, y diez mil de la de Judá. 1SM015005 Llegado Saúl con ellos cerca de la ciudad de Amalec, puso emboscadas en el torrente. 1SM015006 Y dijo a los cincos: Marchad, retiraos y separaos de los amalecitas no sea que os destruya juntamente con ellos, por cuanto vosotros ejercisteis la misericordia con los hijos de Israel, cuando venían de Egipto. Retiráronse, pues, los cíñeos de entre los amalecitas. 1SM015007 Y Saúl fue destrozando a los amalecitas desde Hevila hasta Sur, en la frontera de Egipto. 1SM015008 Tomó vivo a Agag, rey de Amalec; y pasó a cuchillo a todo el pueblo. 1SM015009 Pero Saúl y el ejército perdonaron a Agag, y reservaron los mejores rebaños de ovejas y de vacas, y los carneros, y las mejores ropas, y en general todo lo bueno, y no lo quisieron destruir. Todo lo vil y despreciable, eso fue lo que destruyeron. 1SM015010 Entonces habló el Señor a Samuel, y le dijo: 1SM015011 Pésame de haber hecho rey a Saúl, porque me ha abandonado y no ha ejecutado mis órdenes. De lo que contristado Samuel, estuvo toda la noche clamando al Señor; 1SM015012 y habiéndose levantado antes del día para marchar por la mañana en busca de Saúl, tuvo aviso de que éste había ido al Carmelo, y erigido allí un arco triunfal, y que de vuelta había bajado a Gálgala. Llegó, en fin, Samuel a Saúl, cuando estaba éste ofreciendo al Señor un holocausto de las primicias del botín que había traído de los amalecitas. 1SM015013 Así que llegó, le dijo Saúl: Bendito seas tú del Señor; yo he cumplido con su orden. 1SM015014 Replicóle Samuel: ¿Pues qué balido es éste de rebaños que resuena en mis oídos, y el mugido de bueyes que oigo? 1SM015015 Respondió Saúl: Los han traído del país de Amalec, pues el pueblo ha conservado las mejores ovejas y vacas para inmolarlas al Señor Dios tuyo; mas el resto lo mataron. 1SM015016 Samuel entonces dijo a Saúl: Permíteme hablar, y te declararé lo que me ha dicho el Señor en la noche. Habla, respondió Saúl. 1SM015017 Dijo, pues Samuel: ¿No es verdad que siendo tú tan pequeño a tus ojos fuiste hecho cabeza de las tribus de Israel, y que te ungió el Señor para rey sobre Israel? 1SM015018 El Señor te envió a esta empresa, diciendo: Anda, y pasa a cuchillo a los perversos amalecitas, y pelea contra ellos hasta su total exterminio. 1SM015019 Pues, ¿por qué no has obedecido la voz del Señor, y te has enamorado del botín, pecando a los ojos del Señor? 1SM015020 Respondió Saúl a Samuel: Antes bien he obedecido la voz del Señor, siguiendo el camino que me ordenó, y he traído a Agag, rey de Amalec, y pasado a cuchillo a los amalecitas. 1SM015021 Verdad es que el pueblo ha separado del despojo ovejas y vacas, como primicias de lo que se debía destruir, para inmolarlas al Señor su Dios en Gálgala. 1SM015022 Dijo entonces Samuel: ¿Por ventura el Señor no estima más que los holocaustos y las víctimas el que se obedezca su voz? La obediencia vale más que los sacrificios; y el ser dócil importa más que el ofrecer la grosura de los carneros. 1SM015023 Porque el desobedecer al Señor, es como un pecado de magia, y como idolatría el no querer sujetársele. Por lo tanto, ya que tú has desechado la palabra del Señor, el Señor te ha desechado a ti, y no quiere ya que seas rey. 1SM015024 Dijo Saúl a Samuel: Pecado he por haber quebrantado el mandato del Señor, y despreciado tus dictámenes, temiendo al pueblo, y condescendiendo con él. 1SM015025 Mas ahora ruégote que sobrelleves mi pecado, y me obtengas el perdón, y vuélvete conmigo a fin de que contigo adore yo al Señor. 1SM015026 Respondióle Samuel: No volveré contigo, porque tú has desechado la palabra del Señor, y el Señor te ha desechado a ti para que no seas rey de Israel. 1SM015027 Y volviendo Samuel la espalda para marcharse, asióle Saúl de la extremidad de la capa, la cual se rasgó. 1SM015028 Díjole entonces Samuel: Así el Señor ha rasgado hoy y arrancado de ti el reino de Israel y dádoselo a otro mejor que tú. 1SM015029 Y aquel Señor a quien se debe el tributo en Israel, no te perdonará, ni se arrepentirá de esto; porque no es él un hombre para que tenga que arrepentirse. 1SM015030 A lo que dijo Saúl: Yo he pecado; mas ruégote que me honres ahora delante de los ancianos de mi pueblo, y en presencia de Israel, y te vuelvas conmigo, a fin de que a tu lado adore al Señor Dios tuyo. 1SM015031 Volvióse, pues, Samuel, y siguió a Saúl, y adoró Saúl al Señor. 1SM015032 Dijo entonces Samuel: Traedme aquí a Agag, rey de Amalec; y fuele presentado Agag, que estaba gordísimo y temblando. Y dijo Agag: ¿Conque así me ha de separar de todo la amarga muerte? 1SM015033 Y Samuel respondió: Así como tu espada ha dejado sin hijos a tantas madres, así tu madre será otra de las mujeres que quedarán sin hijos. Y le hizo pedazos delante del Señor, en Gálgala. 1SM015034 Y retiróse Samuel a Ramata, y Saúl a su casa de Gabaa; 1SM015035 y no volvió jamás Samuel a visitar a Saúl en toda su vida. Sin embargo, lloraba porque el Señor se había arrepentido de haberle constituido rey de Israel. 1SM016001 Entonces dijo el Señor a Samuel: ¿Hasta cuándo has tú de llorar a Saúl, habiéndole Yo desechado para que no reine sobre Israel? Llena tu cuerna o botijo de óleo, y ven, que quiero enviarte a Isaí, natural de Belén, porque de entre sus hijos me he provisto de un rey. 1SM016002 A lo que respondió Samuel: ¿Cómo tengo de ir? Lo sabrá luego Saúl, y me quitará la vida. Dijo el Señor: Tomarás contigo un becerro de la vacada, y dirás que has ido allí a ofrecer sacrificios al Señor. 1SM016003 Y convidarás a Isaí a comer de la víctima, y Yo te revelaré lo que has de hacer, y ungirás al que Yo te señale. 1SM016004 Hízolo, pues Samuel como el Señor le había mandado. Fue a Belén, y extrañáronlo los ancianos de la ciudad, y saliéndole a recibir, le dijeron: ¿Es de paz tu venida? 1SM016005 De paz, respondió Samuel: Vengo a ofrecer sacrificio al Señor: purificaos y venid conmigo al sacrificio. Purificó, pues, a Isaí y a sus hijos, y convidólos al sacrificio. 1SM016006 Así que hubieron entrado después en la sala del convite, viendo Samuel a Eliab, dijo en su interior: ¿Si será éste el que el Señor ha escogido para ungido suyo? 1SM016007 Respondió el Señor a Samuel: No mires a su buena presencia, ni a su grande estatura, porque no es ése el que he escogido: y yo juzgo por lo que aparece a la vista del hombre, pues el hombre no ve más que lo exterior; pero el Señor ve el fondo del corazón. 1SM016008 Llamó después Isaí a Abinadab y presentóle a Samuel: el cual dijo: No es éste el escogido del Señor. 1SM016009 Trájole también a Samma, del cual dijo Samuel: Tampoco es éste el escogido del Señor. 1SM016010 Así le fue presentando Isaí sus siete hijos, y díjole Samuel: A ninguno de éstos ha elegido el Señor. 1SM016011 Y añadió Samuel a Isaí: ¿No tienes ya más hijos? A lo que contestó: Aún tengo otro pequeño, que está apacentando las ovejas. Dijo Samuel a Isaí: Envía por él, y tráele aquí, que no nos pondremos a la mesa hasta que él venga. 1SM016012 Envió por él Isaí: y se lo presentó. Era David, un joven rubio, de gallarda presencia y hermoso rostro. Dijo entonces el Señor. Ea, úngele, porque ése es. 1SM016013 Tomó, pues, Samuel el cuerno del óleo que había traído y ungióle a presencia de sus hermanos, y desde aquel día el espíritu del Señor quedó difundido en David: y Samuel volvióse a Ramata. 1SM016014 Al contrario, el espíritu del Señor se retiró de Saúl; y atormentábale un espíritu maligno por permisión del Señor. 1SM016015 Por lo que dijeron a Saúl sus cortesanos: Ya ves cómo te atormenta un espíritu malísimo. 1SM016016 Si tú, señor nuestro, lo mandas, tus siervos que tienes aquí delante, buscarán un hombre hábil en tocar el harpa, para que cuando el Señor permita que te agite el mal espíritu, la toque y sientas algún alivio. 1SM016017 Respondió Saúl a sus criados: Enhorabuena, buscadme alguno que sea hábil en tañer y cantar, y traédmele. 1SM016018 A lo que contestando uno de los criados, dijo: Poco ha vi un hijo de Isaí, natural de Belén, muy diestro en tañer el harpa, mozo muy valiente y hábil para la guerra, prudente en el hablar y de gallarda presencia, y muy favorecido del Señor, 1SM016019 Con esto Saúl hizo decir a Isaí: Envíame tu hijo David, que está con tus ganados. 1SM016020 En vista de lo cual tomó Isaí un asno, que cargó de panes, de un cántaro de vino y de un cabrito recental, y envióselo a Saúl por mano de su hijo David. 1SM016021 Y fue David y se presentó a Saúl; el cual le cobró mucho cariño, e hízole su escudero. 1SM016022 Y envió Saúl a decir a Isaí: Quédese David cerca de mi persona; porque ha hallado gracia en mis ojos. 1SM016023 Con esto, siempre que asaltaba el mal espíritu a Saúl cogía David el harpa y tañíala; con lo que Saúl se recreaba y sentía mucho alivio, pues se retiraba de él el espíritu malo. 1SM017001 Sucedió después de algún tiempo que los filisteos, juntando sus escuadrones para pelear, se reunieron en Soco de Judá, y acamparon entre Soco y Aceca, en los confines de Dommim. 1SM017002 También se reunieron Saúl y los hijos de Israel, y viniendo al valle del Terebinto, ordenaron allí sus escuadrones para pelear contra los filisteos. 1SM017003 Estaban éstos acampados en un lado del monte, y los israelitas en el lado opuesto, mediando el valle entre ellos. 1SM017004 Y salió de los reales de, los filisteos un hombre bastardo, llamado Goliat, natural de Get, cuya estatura era de seis codos y un palmo. 1SM017005 Traía en su cabeza un morrión de bronce, e iba vestido de una coraza escamada, del mismo metal, que pesaba cinco mil siclos; 1SM017006 botas de bronce cubrían sus piernas, y defendía sus hombros un escudo de dicho metal. 1SM017007 El astil de su lanza era grueso como el enjullo de un telar, y el hierro o punta de la misma pesaba seiscientos siclos, e iba delante de él su escudero. 1SM017008 Este hombre vino a presentarse delante de los escuadrones de Israel, dando voces y diciéndoles: ¿Por qué habéis venido para dar batalla? ¿No soy yo un filisteo, y vosotros siervos de Saúl? Escoged de entre vosotros alguno que salga a combatir cuerpo a cuerpo. 1SM017009 Si tuviere valor para pelear conmigo y me matare, seremos esclavos vuestros; mas si yo prevaleciere y le matare a él, vosotros seréis los esclavos, y nos serviréis. 1SM017010 Y decía después jactándose: Yo he desafiado hoy a los batallones de Israel, diciéndoles: Dadme acá un campeón, y mida sus fuerzas conmigo cuerpo a cuerpo. 1SM017011 Saúl, empero, y todos los israelitas, oyendo tal desafío del filisteo, quedaron asombrados y llenos de miedo. 1SM017012 David, según queda dicho, era hijo de un varón efrateo de la ciudad de Belén, en Judá, llamado Isaí, el cual tenía ocho hijos, y era hombre anciano, y de los más avanzados en edad en el tiempo de Saúl. 1SM017013 Sus tres hijos mayores siguieron a Saúl en la guerra; de los cuales el primogénito se llamaba Eliab, el segundo Abinadab y el tercero Samma. 1SM017014 David era el menor de todos. Habiendo, pues, los tres mayores seguido a Saúl, 1SM017015 David se había ido de la corte de Saúl, y vuelto a apacentar la grey de su padre en Belén. 1SM017016 Entretanto se presentaba el filisteo mañana y tarde, y continuó haciéndolo por espacio de cuarenta días. 1SM017017 En este intermedio dijo Isaí a su hijo David: Toma para tus hermanos un efi de harina de cebada y estos diez panes, y corre al campamento a llevárselo. 1SM017018 Y estos diez quesos los llevarás al tribuno o coronel; y verás si tus hermanos están buenos, informándote en qué compañía están. 1SM017019 Pues así ellos como los demás hijos de Israel estaban con Saúl, para pelear contra los filisteos, en el valle del Terebinto. 1SM017020 Madrugó, pues, David, y, encargando a uno el cuidado del ganado, se puso con su carga en camino, como se lo había mandado Isaí. Y llegó al lugar de Magala, junto al ejército, al tiempo que éste, habiendo salido a dar la batalla, levantaba el grito en señal de combate. 1SM017021 Porque ya Israel había formado en batalla sus escuadrones; igualmente los filisteos estaban dispuestos para la acción. 1SM017022 A vista de esto David, dejando cuanto había traído al cuidado de quien se lo guardase entre los bagajes, fue corriendo al lugar de la batalla, y se informaba de la salud y bienestar de sus hermanos. 1SM017023 Aun no había acabado de hablar, cuando compareció aquel hombre bastardo llamado Goliat, filisteo, natural de Get, que salía del campamento de los filisteos repitiendo los mismos insultos que siempre; los cuales oyó David. 1SM017024 Todos los israelitas, así que vieron aquel hombre, huyeron de su presencia temblando de miedo. 1SM017025 Y decía uno de los soldados de Israel: ¿No habéis visto a ese hombre que se presenta al combate? Pues a insultar a Israel viene. Al que le matare, le dará el rey grandes riquezas, y a su hija por esposa, y eximirá de tributos en Israel la casa de su padre. 1SM017026 Preguntó David a los que tenía cerca de sí: ¿Qué es lo que darán al que matare a ese filisteo, y quitare el oprobio de Israel? Porque a la verdad, ¿quién es ese filisteo incircunciso para que insulte así impunemente a los escuadrones del Dios vivo? 1SM017027 Referíale la mente las mismas palabras, diciendo: Esto y esto se dará al que le matare. 1SM017028 Y, habiéndole oído hablar así con la gente, Eliab, su hermano mayor, indignóse contra él, y le dijo: ¿Por qué has venido aquí, dejando abandonadas en el desierto aquellas poquitas ovejas que tenemos? Bien conocida tengo yo tu altanería, y la malicia de tu corazón. A ver la batalla es a lo que has venido. 1SM017029 Respondióle David: ¿Qué mal he hecho yo? ¿He hecho más que hablar? 1SM017030 Desvióse luego de él, y fuese a otro paraje, y entabló la misma conversación, repitiéndole la gente la misma respuesta de antes. 1SM017031 Oídas de varios las palabras que habló David, fueron referidas delante de Saúl; 1SM017032 a cuya presencia conducido, le habló David de esta manera: Nadie desmaye a causa de los insultos de ese filisteo; yo, siervo tuyo, iré y pelearé contra él. 1SM017033 Mas Saúl dijo a David: No tienes tú fuerza para resistir a ese filisteo, ni para pelear contra él; pues tú eres muchacho todavía, y él es un varón aguerrido desde su mocedad. 1SM017034 Replicóle David a Saúl: Apacentaba tu siervo el rebaño de su padre, y venían un león o un oso, y apresaba un carnero de en medio de la manada; 1SM017035 y corría yo tras ellos y los mataba, y les quitaba la presa de entre los dientes, y, al volverse ellos contra mí, los agarraba yo de las quijadas, y los ahogaba y mataba. 1SM017036 Así es cómo yo, siervo tuyo, maté tanto al león como al oso, y lo propio haré con ese filisteo incircunciso. Iré, pues, contra él ahora mismo, y quitaré el oprobio de nuestro pueblo; porque, ¿quién es ese filisteo incircunciso que ha tenido la osadía de maldecir al ejército del Dios vivo? 1SM017037 Y añadió David: El Señor que me libró de las garras del león y del oso, Él mismo me librará también de las manos de ese filisteo. Dijo Saúl a David: Anda, pues, y el Señor sea contigo. 1SM017038 Y vistióle Saúl con sus ropas o con armadura de su palacio, y púsole en la cabeza un yelmo de acero, y armóle de coraza. 1SM017039 Ciñéndose luego David la espada de Saúl sobre su vestido de guerra, comenzó a probar si podía andar así armado, porque no estaba hecho a ello. Y dijo a Saúl: Yo no puedo caminar con esta armadura; pues no estoy acostumbrado a ella. Por lo tanto, se desarmó; 1SM017040 y cogiendo el cayado, que llevaba siempre en la mano, escogió del torrente cinco guijarros bien lisos, metióselos en el zurrón de pastor que traía consigo, tomó la honda en su mano, y fuese en busca del filisteo. 1SM017041 Venía éste caminando con paso grave y acercándose hacia David, llevando delante su escudo. 1SM017042 Mas así que el filisteo vio y miró a David, le menospreció, por ser éste un joven rubio y de linda presencia: 1SM017043 y le dijo: ¿Soy yo acaso algún perro para que vengas contra mí con un palo? Por lo que maldijo el filisteo a David, jurando por sus dioses. 1SM017044 Y añadió: ven acá, y echaré tus carnes a las aves del cielo y a las bestias de la tierra. 1SM017045 Mas David respondió al filisteo: Tú vienes contra mí con espada, lanza y escudo; pero yo salgo contra ti en nombre del Señor de los ejércitos, del Dios de las legiones de Israel, a las cuales tú has insultado en este día; 1SM017046 y el Señor te entregará en mis manos; y yo te mataré y cortaré tu cabeza; y daré hoy los cadáveres del campo de los filisteos a las aves del cielo y a las bestias de la tierra; para que sepa todo el mundo que hay Dios en Israel; 1SM017047 y conozca todo este concurso de gente que el Señor salva sin espada ni lanza; porque él es el arbitro de la guerra, y él os entregará en nuestras manos. 1SM017048 Como se moviese, pues, el filisteo, y viniese acercándose a David, apresuróse éste y corrió al combate contra el filisteo; 1SM017049 y, metiendo su mano en el zurrón, sacó una piedra, que disparó con la honda, e hirió al filisteo en la frente, en la cual quedó clavada; y cayó el filisteo en tierra sobre su rostro. 1SM017050 Así venció David al filisteo, con una honda y una piedra; herido que le hubo, le mató. Y no teniendo David a mano ninguna espada, 1SM017051 fue corriendo y echóse encima del filisteo, le quitó la espada, desenvainóla y, acabándole de matar, le cortó la cabeza. Viendo, pues, los filisteos muerto al más valiente de los suyos, echaron a huir. 1SM017052 Pero los hijos de Israel y de Judá los acometieron con grande gritería, y fueron acuchillándolos hasta llegar al valle y hasta las puertas de Acarón; y cayeron heridos muchos filisteos por el camino de Saraim y hasta Get y Acarón. 1SM017053 Vueltos los hijos de Israel de perseguir a los filisteos, saquearon su campamento. 1SM017054 Y tomando David la cabeza del filisteo, la llevó a Jerusalén; pero sus armas las colocó en su casa. 1SM017055 Es de advertir que al ver Saúl que David se dirigía contra el filisteo, preguntó a Abner, general de las tropas: Abner, ¿de qué familia es ese joven? Y Abner respondió: Juro por tu vida, ¡oh rey!, que no lo sé. 1SM017056 Díjole el rey: Infórmate de quién es hijo. 1SM017057 Y cuando David volvió después de haber muerto al filisteo, tomóle Abner y presentóle a Saúl, llevando David la cabeza del filisteo en la mano. 1SM017058 Y díjole Saúl: ¡Oh joven!, ¿de qué familia eres? Y respondióle David: Soy el hijo de vuestro siervo Isaí, natural de Belén. 1SM018001 Al punto que David acabó de hablar con Saúl, el alma de Jonatás se unió estrechamente con el alma de David; y amóle Jonatás como a su propia vida. 1SM018002 Desde aquel día quiso Saúl tenerle siempre consigo, y no le permitió volverse a casa de su padre. 1SM018003 Y contrajeron entonces David y Jonatás una grande amistad; pues que amaba éste a David como a sí mismo. 1SM018004 De aquí es que se quitó Jonatás la túnica que vestía y diósela a David con otras ropas suyas, hasta su espada y arco y aun el tahalí. 1SM018005 Salía David a todas las expediciones a que le enviaba Saúl, y conducíase con mucha prudencia. Diole después Saúl mando sobre alguna gente de guerra, y se ganó la afición de todo el pueblo, y particularmente de los criados de Saúl. 1SM018006 Asimismo cuando volvió David, después de haber muerto al filisteo, salieron las mujeres de todas las ciudades de Israel a recibir al rey Saúl, cantando y danzando, y mostrando su regocijo con panderos y sonajas. 1SM018007 Las mujeres, en sus danzas, cantaban y repetían este, estribillo: Saúl ha muerto a mil y David ha muerto a diez mil. 1SM018008 Semejante expresión irritó a Saúl en gran manera, y le dejó sumamente disgustado; y dijo: A David le han dado diez mil, y a mí me han dado mil, ¿qué le falta ya, sino ser rey? 1SM018009 Por este motivo desde entonces en adelante ya no miraba con buenos ojos a David. 1SM018010 Otro día sucedió que el espíritu malo, permitiéndolo Dios, volvió a apoderarse de Saúl, que andaba por su palacio hablando como un frenético. David tañía el harpa delante de él, como los demás días. Y teniendo Saúl a mano una lanza, 1SM018011 arrojóla contra David, pensando poderle clavar en la pared; mas David huyó el cuerpo por dos veces, y evitó el golpe. 1SM018012 Comenzó, pues, Saúl a temer a David, viendo que el Señor estaba con éste, y que a él le había dejado. 1SM018013 Por lo cual le alejó de su persona, y le hizo tribuno de mil hombres; con los cuales hacía David sus expediciones a vista del pueblo. 1SM018014 Manejábase David en todo con mucha cordura, y el Señor le asistía. 1SM018015 Pues como observase Saúl su extrema prudencia, comenzó a recelarse de él. 1SM018016 Al contrario, todo Israel y Judá amaban a David como a quien iba al frente de ellos en las expediciones que se hacían. 1SM018017 Por lo que dijo Saúl a David: He aquí a Merob, mi hija mayor. Voy a dártela por esposa. Tú sobre todo séasme valiente, y pelea en servicio del Señor, Al mismo tiempo decía Saúl para consigo: No sea yo el que le mate, sino sean los filisteos los que lo hagan. 1SM018018 David, empero, respondió a Saúl: ¿Quién soy yo, o cuál ha sido mi vida, ni de qué consideración goza en Israel la familia de mi padre para llegar a ser yo yerno del rey? 1SM018019 Mas sucedió después que llegado el tiempo en que Merob, hija de Saúl, debía desposarse con David, fue dada por mujer a Hadriel, molatita. 1SM018020 Pero Micol, la otra hija de Saúl, se había aficionado a David; de lo que se alegró Saúl luego que se lo dijeron. 1SM018021 Porque dijo Saúl interiormente: Se la daré, para que sea ella la causa de su ruina, y muera a manos de los filisteos. Y así dijo Saúl a David: Por dos títulos o servicios vas a ser luego mi yerno. 1SM018022 Y dio esta orden a sus cortesanos: Hablad a David, como que sale de vosotros, diciéndole: Ya ves que estás en gracia del rey, y que todos sus criados te aman; procura, pues, ahora llegar a ser yerno del rey. 1SM018023 Hicieron los cortesanos que llegase esto a oídos de David, el cual respondió: ¿Por ventura os parece cosa fácil el ser yerno del rey, mayormente siendo yo pobre y humilde de condición? 1SM018024 Diéronle parte a Saúl sus cortesanos, diciendo: David ha respondido esto y esto. 1SM018025 Dijo entonces Saúl: Hablad así a David: El rey no necesita de dote para su hija; únicamente exige de ti las cabezas de cien incircuncisos filisteos, para vengarse así de sus enemigos. Pero el designio de Saúl era hacer caer a David en manos de los filisteos. 1SM018026 Luego, pues, que los criados de Saúl refirieron a David lo que les había dicho Saúl, aceptó gustoso David el partido que le proponían para llegar a ser yerno del rey; 1SM018027 y de allí a pocos días marchó con la gente que comandaba, y mató a doscientos filisteos; entregando al rey este número de incircuncisos, a fin de llegar a ser yerno suyo. Con esto diole Saúl a su hija Micol por esposa 1SM018028 Y conoció claramente que el Señor estaba con David. Y Micol, hija de Saúl, amaba mucho a David. 1SM018029 Comenzó, pues, Saúl, a recelar más y más de David; por manera que su aversión hacia él fue siempre en aumento. 1SM018030 En esta sazón salieron a campaña los caudillos de los filisteos y desde el punto que se dejaron ver, se manejaba David con más arte y prudencia que todos los demás oficiales de Saúl; por donde se hizo más y más célebre su nombre. 1SM019001 Saúl, empero, habló a Jonatás, su hijo ya todos sus criados o cortesanos, a fin de que matasen a David. Mas Jonatás, hijo de Saúl, amaba cordialmente a David; 1SM019002 y así le avisó, diciendo: Saúl, mi padre, busca cómo matarte; ruégote, pues, que mires por ti, y te vayas mañana a un lugar oculto, en el cual te estés escondido, 1SM019003 en el campo, donde quieras; mientras yo procuraré estar con mi padre, y le hablaré de ti, y te haré saber cuanto hubiere observado. 1SM019004 Habló, pues, Jonatás a Saúl, su padre, a favor de David, y le dijo: No hagas daño, ¡oh rey!, a David, siervo tuyo; puesto que nada malo ha obrado contra ti, antes bien te ha hecho servicios importantísimos. 1SM019005 Él puso su vida en el mayor riesgo, y mató al filisteo; con lo cual dio el Señor una gran victoria a todo Israel. Tú lo viste y te llenaste de gozo. Pues, ¿por qué quieres ahora pecar, derramando sangre inocente, matando a David, que no es culpable de nada? 1SM019006 Oyendo esto Saúl, y aplacado con las razones de Jonatás, hizo este juramento: Vive el Señor que no se le quitará la vida. 1SM019007 Llamó luego Jonatás a David y contóle todas estas cosas, y le presentó nuevamente a Saúl, y se quedó David en la corte de Saúl, como antes. 1SM019008 Suscitóse de nuevo la guerra; y saliendo David a campaña, peleó contra los filisteos, y destrozando gran número de ellos, ahuyentó a los demás. 1SM019009 Mas el espíritu malo, permitiéndolo el Señor, asaltó otra vez a Saúl. Estaba éste sentado en su palacio, y tenía una lanza en la mano; y mientras David tañía el harpa delante de él, 1SM019010 tiró Saúl a traspasarle con la lanza y clavarle en la pared. Mas David declinó el golpe; y la lanza, sin haberle herido, fue a dar en la pared; y escapó David al instante, y se libertó aquella noche. 1SM019011 Saúl envió en seguida a sus guardias a la casa de David para que asegurasen su persona, y le matasen al otro día por la mañana. Pero avisóselo a David su esposa Micol, diciendo: Si esta noche no te pones en salvo, mañana morirás. 1SM019012 Y descolgóle Micol por una ventana; y de esta suerte escapó David y, huyendo, se puso en salvo. 1SM019013 En seguida tomó Micol una estatua o bulto y púsola sobre la cama de David, y le envolvió la cabeza con una piel peluda de cabra, y cubrió la estatua con la ropa de la cama. 1SM019014 Envió, pues, Saúl guardias a prender a David, y se le respondió que estaba enfermo. 1SM019015 Despachó segunda vez otras gentes con orden de ver a David, diciéndoles: Traédmele acá en su cama, para que sea muerto. 1SM019016 Llegados que fueron allí los enviados de Saúl, hallaron que en la cama sólo había una estatua o bulto, que tenía envuelta la cabeza con una piel de cabra. 1SM019017 Por lo que dijo Saúl a Micol: ¿Cómo me has burlado de esta manera, y dejado escapar a mi enemigo? Y respondió Micol a Saúl: Porque él me dijo: Déjame ir, si no te mataré. 1SM019018 Así huyó David, y puso en salvo su vida, y fue a encontrar a Samuel en Ramata, y contóle todo cuanto Saúl había hecho con él; y después fuéronse ambos a Nayot, donde moraron algún tiempo. 1SM019019 Diose aviso a Saúl, diciéndole: Mira que David está en Nayot de Ramata. 1SM019020 Envió, pues, Saúl soldados para prender a David, los cuales, habiendo visto un coro de profetas que profetizaban o cantaban alabanzas a Dios, y a Samuel que presidía entre ellos, fueron también arrebatados del espíritu del Señor, y comenzaron a alabar a Dios, como los otros. 1SM019021 Habiéndose referido esto a Saúl, envió otras soldados; los cuales asimismo se pusieron a alabar a Dios. Despachó otros por tercera vez, que igualmente se pusieron a cantar las alabanzas de Dios. Entonces Saúl, lleno de cólera, 1SM019022 marchó él mismo en persona a Ramata, y habiendo llegado hasta la gran cisterna de Soco, preguntó, diciendo: ¿ Dónde se hallan Samuel y David? Y le respondieron: Están allá en Nayot. junto a Ramata. 1SM019023 Con esto encaminóse a dicho lugar, y apoderóse también de Saúl el espíritu del Señor, e iba cantando por el camino las alabanzas de Dios hasta llegar a Nayot de Ramata. 1SM019024 Y despojado de sus vestiduras reales, púsose a cantar con los demás delante de Samuel, y todo lo restante del día y de aquella noche estuvo postrado por tierra desnudo de todo insignia. De donde aquel proverbio: ¿Pues qué, también Saúl entre los profetas? 1SM020001 Entretanto huyó David de Nayot, que está cerca de Ramata, y viniendo a verse con Jonatás, prorrumpió en estas palabras: ¿Qué he hecho yo? ¿En qué he pecado, y cuál es mi delito contra tu padre, que anda así buscándome para matarme? 1SM020002 Respondió Jonatás: No temas, no morirás; porque no hará mi padre cosa chica ni grande sin comunicármela primero. Cómo, ¿esta sola resolución me habría acaso ocultado mi padre? No, de ninguna manera. 1SM020003 E hizo sobre ello nuevo juramento a David, asegurándole su amistad. Mas David replicó: Tu padre sabe muy bien que yo he hallado gracias en tus ojos, y habrá dicho: No conviene que sepa esto Jonatás, a fin de que no reciba pesar. Porque yo te juro por el Señor y por tu vida que está tan resuelto tu padre a matarme, que sólo hay un punto, por decirlo así, desde mí a la muerte. 1SM020004 Respondió Jonatás a David: Haré por ti todo cuanto me insinuares. 1SM020005 Dijóle David: Mira, mañana son las calendas, en que yo, según costumbre, suelo sentarme a la mesa con el rey; ahora, pues, permíteme que vaya a esconderme en el campo hasta la tarde del día tercero. 1SM020006 Si tu padre preguntare por mí, le responderás: David me pidió licencia para ir prontamente a Belén, su patria; por cuanto todos los de su tribu o familia celebran allí un sacrificio solemne. 1SM020007 Si dijere: Bien está; no tendré que temer; pero si se enojare, ten por cierto que su mala voluntad hacia mí ha llegado al colmo. 1SM020008 Haz, pues, esta merced a tu siervo, ya que quisiste que yo, a pesar de ser tu criado, hiciese contigo y te jurase la más estrecha alianza. Y si tú adviertes en mí alguna culpa o delito, dame tú mismo la muerte, y no me hagas comparecer delante de tu padre. 1SM020009 A lo que respondió Jonatás: Libre estás de que te suceda esto, porque no es posible que yo conozca de cierto que el odio de mi padre contra ti ha llegado a lo sumo, sin que yo te lo avise. 1SM020010 Replicó David a Jonatás: Y si tu padre, por desgracia, te diera una respuesta áspera al hablarle de mí, ¿por quién lo sabré? 1SM020011 Respondióle Jonatás: Ven, y salgamos al campo. Habiendo salido ambos al campo, 1SM020012 dijo Jonatás a David: Señor Dios de Israel, si yo mañana o es otro día averiguare el designio de mi padre, y resultare algo de bueno a favor de David, y no enviare luego a decírselo, y hacérselo saber, 1SM020013 no hagáis, ¡oh Señor!, bien a Jonatás, sino mucho mal. Pero si continuare la mala voluntad de mi padre contra tí, te lo avisaré también, y te daré licencia a fin de que te vayas en paz; y el Señor sea contigo, como estuvo con mi padre. 1SM020014 Y tú, si yo viviere, me tratarás con toda la bondad posible; mas si yo muriere 1SM020015 tendrás siempre compasión y tratarás con bondad a mi familia, cuando el Señor desarraigare uno por uno de la faz de la tierra a todos los enemigos de David. De otra manera, arrebate también el Señor a Jonatás de su casa, y tome Dios venganza de los enemigos de David. 1SM020016 De esta suerte hizo Jonatás alianza con la casa de David; y el Señor tomó, en efecto, venganza de los enemigos de David. 1SM020017 Jonatás repitió a David sus juramentos por lo mucho que le quería; pues que le amaba como a su misma alma. 1SM020018 Díjole más: Mañana son las calendas, y serás echado de menos; 1SM020019 porque se verá tu asiento vacío aun al día siguiente. Por tanto, marcharás luego de aquí, y te dirigirás el primer día después de la fiesta al sitio en que debes esconderte, y te sentarás junto a la peña llamada Ecel. 1SM020020 Cerca de ella dispararé yo tres saetas, como que me ejercito en tirar al blanco. 1SM020021 Enviaré también un muchacho tras ellas, diciéndole: Anda y tráeme las saetas. 1SM020022 Si yo dijere al muchacho: Mira que las saetas están más acá de ti, cógelas; tú entonces ven a mí, pues es señal de que estás seguro, y vive el Señor que no hay que temer. Mas si dijere yo al criado: Mira, las saetas están más allá de ti; vete en paz, pues el Señor quiere que te retires. 1SM020023 En cuanto a lo que tú y yo hemos tratado, sea el Señor para siempre testigo entre los dos. 1SM020024 Con esto David fue a esconderse en el campo; y llegaron las calendas, y sentóse el rey a comer. 1SM020025 Y estando el rey sentado en su silla, que estaba junto a la pared, según costumbre, levantóse Jonatás y sentóse Abner a un lado de Saúl, y echóse de ver vacío el puesto de David. 1SM020026 No dijo Saúl nada aquel día; porque pensó que tal vez le había sucedido a David el no hallarse limpio y purificado. 1SM020027 Venido el segundo día de la fiesta, viose también desocupado el asiento de David. Entonces dijo Saúl a su hijo Jonatás: ¿Por qué no ha venido a comer ni ayer ni hoy el hijo de Isaí? 1SM020028 Y respondió Jonatás: Rogóme con mucha instancia que le dejara ir a Belén, 1SM020029 diciéndome: Dame licencia; por cuanto se celebra un sacrificio solemne en nuestra ciudad, y me ha convidado con muchas instancias uno de mis hermanos; si he hallado, pues, gracia en tus ojos, permíteme dar una vuelta por allí, y ver a mis hermanos. Por este motivo no ha venido a la mesa del rey. 1SM020030 Saúl, empero, indignado contra Jonatás, le dijo: ¡Hijo de prostituta, hijo desamorado y perverso! ¿Piensas que yo ignoro el amor que tienes al hijo de Isaí, para confusión tuya, e ignominia de tu envilecida madre? 1SM020031 Sábete que mientras viva el hijo de Isaí sobre la tierra, ni tú estarás seguro, ni lo estará tu derecho al reino. Así, pues, envía ahora mismo por él, y tráemelo acá; porque ha de morir. 1SM020032 Mas Jonatás respondió a su padre Saúl, diciendo: Pero, ¿por qué ha de morir? ¿Qué es lo que ha hecho? 1SM020033 Y al oír Saúl esto, agarró la lanza para atravesarle. Entonces conoció Jonatás que su padre tenía resuelto matar a David. 1SM020034 Y levantóse Jonatás de la mesa lleno de indignación y de furor, y no comió bocado aquel día segundo de las calendas, apesadumbrado por causa de David, y por la afrenta recibida de su padre. 1SM020035 Y al rayar el día siguiente, fue Jonatás al campo, conforme a lo acordado con David, llevándose consigo un muchacho; 1SM020036 al cual dijo: Anda y tráeme las saetas que iré tirando. Estando corriendo el muchacho, disparó otra saeta más lejos. 1SM020037 Llegado el muchacho al lugar de la primera saeta que había tirado Jonatás, dio éste voces y le gritó: Mira, allí más adelante de ti está la saeta. 1SM020038 Gritóle otra vez Jonatás al muchacho, diciéndole: Date prisa, no te detengas. En fin, el muchacho recogió las saetas, y trájoselas a su amo; 1SM020039 sin entender el motivo de lo que se hacía, porque solamente Jonatás y David lo sabían. 1SM020040 Dio después Jonatás sus armas al muchacho, diciéndole: Anda y llévalas a la ciudad. 1SM020041 Y así que éste hubo marchado, salió David del sitio en que estaba, que miraba al Mediodía, e hizo por tres veces una profunda reverencia a Jonatás, postrándose hasta el suelo; y, besándose el uno al otro, lloraron juntos; pero David mucho más. 1SM020042 En conclusión, Jonatás dijo a David: Vete en paz; todo aquello que los dos hemos jurado en el nombre del Señor, diciendo: El Señor sea testigo entre mí y entre ti, entre mi descendencia y la tuya para siempre. 1SM020043 Y levantóse David y se fue; mas Jonatás volvióse a la ciudad. 1SM021001 Partió, después, David a Nobe a encontrar al Sumo Sacerdote Aquimelec. El cual quedó sorprendido al ver llegar a David, y díjole: ¿Cómo es que vienes solo, sin que nadie te acompañe? 1SM021002 Respondióle David: El rey me ha encargado una comisión, diciendo: Nadie sepa el negocio a que te envío, ni las órdenes que te he dado. Por cuyo motivo aun a mis gentes les he mandado que me esperen en tal y en tal lugar. 1SM021003 Ahora, pues, si tienes a mano aunque no sean más que cinco panes, dámelos; o cualquier cosa que hallares, pues tenemos grande necesidad. 1SM021004 A lo que respondió el sacerdote, diciéndole: No tengo a mano panes de lego o comunes, sino solamente el pan santo. Con todo, te lo daré, si es que tus criados están limpios, mayormente en cuanto a mujeres. 1SM021005 Respondió David al Sumo Sacerdote, diciéndole: Por lo que toca a mujeres nos hemos contenido desde ayer y anteayer, después que partimos; y los cuerpos de mi gente se han conservado puros. A la verdad, el camino profano es, pero aún se purificará mi gente lavando sus cuerpos y vestidos. 1SM021006 Diole, pues, el Sumo Sacerdote el pan santificado; por no haber allí otro pan que los de la proposición, que se habían quitado de ante la presencia del Señor para poner otros calientes. 1SM021007 Hallábase aquel día allí dentro del Tabernáculo del Señor uno de los criados de Saúl, llamado Doeg, idumeo, el más poderoso de los pastores de Saúl. 1SM021008 Dijo todavía David a Aquimelec: ¿Tienes aquí a mano alguna lanza o espada?, pues no he traído conmigo mi espada ni mis armas; porque urgía la orden del rey. 1SM021009 Díjole el Sumo Sacerdote: tienes aquí la espada del filisteo Goliat, a quien tú mataste en el valle del Terebinto: envuelta está en un paño detrás del efod: si quieres llevarla, tómala; pues aquí no hay sino ésta. Díjole David: No hay otra comparable con ella, dámela. 1SM021010 Con esto se puso David en camino, huyendo por temor de Saúl, y fuese a Aquis, rey de Get. 1SM021011 Mas los cortesanos de Aquis, luego que vieron a David, dijeron al rey: ¿No es éste aquel David, respetado como rey en su país? ¿No es éste aquel en cuya alabanza cantaban en medio de sus danzas: mató Saúl a mil, y David mató a diez mil? 1SM021012 Paró David la consideración de esto que decían de él, y concibió grandísimo temor en Aquis, rey de Get. 1SM021013 Y así comenzó a demudar su semblante delante de ellos, y dejábase caer entre los brazos de la gente, dando de cabezadas contra las puertas, y haciendo correr la saliva por su barba. 1SM021014 Dijo, pues, Aquis a sus criados: ¿Habéis visto un tal mentecato? ¿Por qué me le habéis traído aquí? 1SM021015 ¿Nos faltan acaso dementes, que habéis traído también a éste para que hiciese locuras en mi presencia? ¿Un hombre semejante ha de hallar entrada en mi casa? 1SM022001 Con esto salió de allí David, y refugióse en la cueva de Odollan: lo que habiendo sabido sus hermanos y toda la familia de su padre, bajaron allí a encontrarle. 1SM022002 Allegáronsele también todos aquellos que se hallaban angustiados y oprimidos de deudas y en amargura de corazón: de los cuales se hizo caudillo, y juntó como unos cuatrocientos hombres bajo su mando. 1SM022003 Partióse de aquí David para Masfa, que es del país de Moab, y dijo al rey de Moab: Ruégote permitas que mi padre y mi madre se queden con vosotros hasta tanto que yo sepa lo que Dios dispone de mí. 1SM022004 Y dejólas encomendados al rey de Moab: con quien estuvieron todo el tiempo que David permaneció en aquella fortaleza de Masfa. 1SM022005 Pero el profeta Gad dijo a David: No te estés más en esa fortaleza; marcha y vete a tierra de Judá. Partió, pues, David, y vino al bosque de Haret. 1SM022006 Y supo Saúl que David y la gente que tenía se habían dejado ver. Estando, pues, Saúl en Gabaa y hallándose un día en un bosque cerca de Rama, teniendo en su mano la lanza, y rodeado de todos sus criadas, 1SM022007 dijo a los que se hallaban con él: Oídme ahora, hijos de Benjamín, vosotros que sois de mi tribu: ¿El hijo de Isaí os dará acaso a todos vosotros campos y viñas, y os hará a todos tribunos y centuriones, 1SM022008 para que os hayáis todos conjurado contra mí, sin haber una persona que me informe de lo que hace David; mayormente después que aun el hijo mío se ha coligado con el hijo de Isaí?. ¿No hay uno siquiera de vosotros que se duela de mi suerte, ni que me dé un consejo; viendo que mi hijo ha sublevado contra mí a un criado mío, que no cesa hasta hoy de armarme asechanzas? 1SM022009 Doeg, idumeo, que se hallaba presente y era el más acreditado entre los criados de Saúl, respondiendo, dijo: Yo vi al hijo de Isaí en Nobe, en casa del Sumo Sacerdote Aquimelec, hijo de Aquitob: 1SM022010 el cual consultó al Señor por él; y le dio víveres, y lo que es más, la espada de Goliat el filisteo. 1SM022011 Envió luego el rey a llamar al Sumo Sacerdote Aquimelec, hijo de Aquitob, y a todos los sacerdotes de la casa de su padre que se hallaban en Nobe; los cuales vinieron todos a presentarse al rey. 1SM022012 Dijo entonces Saúl a Aquimelec: Oye, hijo de Aquitob. El cual respondió: ¿Qué es lo que mandas, señor? 1SM022013 Díjole Saúl: ¿Por que os habéis conjurado contra mí, tú y el hijo de Isaí, y le diste los panes y la espada, y consultaste por él a Dios para que siguiera sublevándose contra mí, y poniéndome asechanzas hasta el día de hoy? 1SM022014 A lo que respondió Aquimelec: ¿Y quién hay entre todos tus criados tan leal como David, yerno del rey, pronto a tus órdenes y respetado en toda tu casa? 1SM022015 ¿Es por ventura hoy la primera vez que he consultado por él a Dios? Lejos de mí otra idea: no sospeche el rey tal cosa de mí, su siervo, ni de toda la casa de mi padre; porque tu siervo no sabe nada de ese negocio de conjuración. 1SM022016 Dijo el rey: Morirás sin falta, Aquimelec, tú y toda la casa de tu padre. 1SM022017 Y en seguida dijo el rey a los de su guardia, que le rodeaban: Embestid y matad a los sacerdotes del Señor; porque están coligados con David, y sabiendo que iba huido, no me lo denunciaron. Pero los criados del rey no quisieron poner sus manos en los sacerdotes del Señor. 1SM022018 Entonces dijo el rey a Doeg: Embiste tú, y arrójate sobre los sacerdotes; y embistiendo Doeg, idumeo, se arrojó sobre los sacerdotes, matando en aquel día ochenta y cinco varones que vestían el efod de lino. 1SM022019 Después de esto pasó a cuchillo a Nobe, ciudad de los sacerdotes, matando a hombres y mujeres, muchachos y niños de pecho, hasta los bueyes, los asnos y las ovejas. 1SM022020 Con todo, pudo escapar un hijo de Aquimelec, hijo de Aquitob, que se llamaba Abiatar, y se fue huyendo a David. 1SM022021 Y le contó cómo Saúl había hecho matar a los sacerdotes del Señor. 1SM022022 Respondióle David a Abiatar: Bien conocí yo aquel día que estando allí Doeg, idumeo, se lo noticiaría a Saúl: yo soy el culpable en la muerte de toda la casa de tu padre. 1SM022023 Quédate conmigo, no temas: si alguno atentare contra mi vida, atentará también contra la tuya; y estando en mi compañía, salvándome yo serás tú igualmente salvo. 1SM023001 Y después de esto avisaron a David, diciendo: Mira que los filisteos están sitiando a Ceila, y saquean las eras, o mieses del país. 1SM023002 Consultó, pues, David al Señor, diciendo: ¿Iré y podré yo vencer a los filisteos? Respondióle el Señor: Anda, que derrotarás a los filisteos y librarás a Ceila. 1SM023003 Pero las gentes que tenía David consigo, le dijeron: Ya ves que nosotros, aun aquí, en medio de la Judea, no estamos sin miedo; ¿cuánto más si fuéremos a Ceila contra los batallones de los filisteos? 1SM023004 Consultó nuevamente David al Señor. El cual le respondió, diciendo: Marcha y ve a Ceila, que yo entregaré en tus manos a los filisteos. 1SM023005 Partió, pues, David con sus gentes a Ceila; peleó contra los filisteos, y, haciendo en ellos gran destrozo, llevóse sus ganados y salvó a los habitantes de Ceila. 1SM023006 Es de saber que cuando Abiatar, hijo de Aquimelec, se refugió a David en Ceila; llevó consigo el efod del Sumo Sacerdote. 1SM023007 Luego que tuvo Saúl aviso de la llegada de David a Ceila, dijo: Dios me lo ha puesto en las manos; cogido está, habiéndose metido en una ciudad que tiene puertas y cerraduras. 1SM023008 Con eso Saúl mandó a toda su tropa que saliese disimuladamente a campaña contra Ceila para cercar a David y a su gente. 1SM023009 Y advertido David de que Saúl trazaba secretamente su ruina, dijo al sacerdote Abiatar: Ponte el efod para consultar al Señor. 1SM023010 Y en seguida dijo David: Señor Dios de Israel: tu siervo ha oído decir que Saúl se prepara para venir a Ceila y destruirla por mi causa. 1SM023011 ¿Me entregarán los ciudadanos de Ceila en manos de Saúl? ¿Vendrá, en efecto, Saúl como ha oído decir tu siervo? Señor Dios de Israel, manifiéstalo a este siervo tuyo. Y respondió el Señor: Sí; vendrá. 1SM023012 Dijo todavía David: ¿Los de Ceila me entregarán a mí y a toda mi gente en manos de Saúl? Y respondió el Señor: Os entregarán. 1SM023013 Por lo que dispuso David marcharse de allí con toda su gente, que eran como unos seiscientos hombres; y saliendo de Ceila, andaban de una a otra parte sin asiento fijo. Tuvo Saúl aviso de haber huido David de Ceila y puéstose en salvo; por lo cual aparentó no querer moverse. 1SM023014 Entretanto se estaba David en el desierto en lugares muy fuertes, y se fijó en el monte del desierto de Cif, monte muy espeso. Saúl, entretanto, no cejaba de buscarle; mas el Señor siempre le libertó de sus manos. 1SM023015 Y supo David que Saúl había salido para quitarle la vida; por lo que se mantuvo en el desierto de Cif, escondido en el bosque. 1SM023016 En este tiempo Jonatás, hijo de Saúl, se puso en camino y fue allí a encontrarle; y le confortó acordándole las promesas de Dios, y diciéndole: 1SM023017 No temas; porque Saúl mi padre, por más que haga, no podrá cogerte. Tú serás rey de Israel, y yo seré el segundo en tu reino; y aun mi mismo padre está persuadido de esto. 1SM023018 Renovaron entonces los dos su alianza en presencia del Señor, y David quedóse en el bosque, pero Jonatás se volvió a su casa. 1SM023019 Mas los cifeos fueron a encontrar a Saúl en Gabaa, y dijéronle: ¿No sabes que David está escondido entre nosotros en los parajes más fuertes del bosque, hacia el cerro de Haquila, que cae a mano derecha del desierto? 1SM023020 Ahora, pues, si deseas dar con él, no tienes más que venir; que corre de nuestra cuenta el entregarle en tus manos. 1SM023021 A lo que respondió Saúl: Benditos seáis vosotros del Señor, pues os habéis condolido de mi suerte. 1SM023022 Id, pues, y practicad todas las diligencias posibles, informándoos mañosamente hasta aseguraros bien del sitio donde tiene su asiento ordinario, o quien le haya visto allí; porque él recela de mí y sabe que ando armándole asechanzas. 1SM023023 Registrad y ved todos los escondrijos donde se oculta, y volved a mí, bien averiguada la cosa, para ir con vosotros a golpe seguro. Pues aunque se meta en las entrañas de la tierra, yo iré allí con todos los batallones de Judá, y le sacaré. 1SM023024 Con esto se despidieron y regresaron a Cif, delante de Saúl. Estaban entonces David y su gente en el desierto de Maón, en la llanura que está a la derecha de Jesimón. 1SM023025 Salió, pues, Saúl con su tropa en busca de David; lo cual sabido por éste, se retiró luego a una roca dentro del desierto de Maón y se quedó allí. Noticioso de ello Saúl, fue al alcance de David, en el desierto de Maón. 1SM023026 Iba Saúl por un lado del monte, y David con los suyos por el otro; y ya no tenía esperanza de poder escapar de las manos de Saúl; pues éste con su gente tenía encerrado a David y a los suyos, como en un círculo, para cogerlos en medio. 1SM023027 Cuando he aquí que llegó un mensajero de Saúl, diciendo: Ven a toda prisa, que los filisteos han hecho una irrupción en el país. 1SM023028 Con esta nueva, desistiendo Saúl de perseguir a David, volvióse y marchó contra los filisteos. Por donde llamaron a aquel sitio: La peña de separación. 1SM023029 No obstante, retiróse David de allí, y fue a vivir en los lugares más fuertes de Engadi. 1SM024001 Y como Saúl volviese después de haber perseguido a los filisteos, le avisaron, diciendo: Mira que David está en el desierto de Engadi. 1SM024002 Tomando, pues, Saúl tres mil hombres escogidos en todo Israel salió en busca de David y de su gente; yendo hasta por las rocas más escarpadas, accesibles a solas las cabras monteses. 1SM024003 Y llegó a unas majadas de ovejas, que encontró en el camino. Había allí una cueva, donde entró Saúl a desocupar el vientre; y David estaba con los suyos escondido en lo más interior de ella. 1SM024004 Dícenle, pues, a David sus criados: He aquí el día feliz del cual te dijo el Señor: Yo pondré en tus manos a tu enemigo, para que hagas de él lo que gustares. Entonces David se levantó y cortó sin ser sentido la orla del manto de Saúl, 1SM024005 E inmediatamente le remordió a David su conciencia de haber cortado la orla del manto de Saúl, 1SM024006 y dijo a sus compañeros: No permita el Señor que jamás haga yo una tal cosa contra mi señor, contra el ungido del Señor, de extender mi mano contra él, siendo como es el ungido del Señor; 1SM024007 y contuvo David con sus palabras a los suyos, no permitiéndoles que se echasen sobre Saúl. Saliendo, pues, éste de la cueva, proseguía el camino comenzado. 1SM024008 Se fue también David en pos de Saúl y, salido ya afuera, dio voces a espaldas de Saúl, diciendo: Mi rey y señor. Volvió Saúl la cabeza, y postrándose David hasta el suelo, le hizo una profunda reverencia; 1SM024009 y dijo a Saúl: ¿Por qué das oídos a las palabras de aquellos que te dicen: David anda maquinando tu ruina? 1SM024010 Hoy ves con tus mismos ojos que el Señor te ha puesto en mis manos en la cueva; me asaltó el pensamiento de matarte; pero me he abstenido de hacerlo, porque dije entre mí: No levantaré yo mi mano contra mi señor; por cuanto es el ungido del Señor. 1SM024011 Observa, pues, ¡oh padre mío!, y reconoce si es la orla de tu clámide o manto la que tengo en mi mano, y cómo al cortar la extremidad de tu vestido no he querido extender mi mano contra ti. Considera ahora tú mismo, y persuádete de que no soy culpable en nada, ni de injusticia, ni de pecado contra ti; tú, por el contrario, andas poniendo asechanzas a mi vida para quitármela. 1SM024012 Juzgue el Señor entre mí y entre ti, y hágame Él justicia respecto de ti; pero yo jamás pondré la mano en tu persona. 1SM024013 De impíos es hacer acciones impías, según dice el antiguo proverbio; y así Dios me libre de extender mi mano contra ti. 1SM024014 Pero, ¿a quién persigues, oh rey de Israel? ¿Quién es al que tú persigues? Persigues a un perro muerto, a una pulga. 1SM024015 Sea juez el Señor, y sentencie entre mí y entre ti; examine y juzgue mi causa, y me libre de tus manos. 1SM024016 Luego que David acabó de hablar tales palabras a Saúl, dijo éste: ¿No es esta voz la tuya, hijo mío David? Y al mismo tiempo lanzó Saúl un grito y comenzó a llorar. 1SM024017 Y dijo a David: Más justo eres tú que yo; porque tú no me has hecho sino bienes, y yo te he pagado con males. 1SM024018 Tú has mostrado hoy el bien que me has hecho, puesto que me ha entregado el Señor en tus manos, y no me has quitado la vida. 1SM024019 Porque, ¿quién es el que, hallando a su enemigo desprevenido, le deja ir sin hacerle daño? El Señor te dé la recompensa por lo que hoy has hecho conmigo. 1SM024020 Y ahora, sabiendo de cierto como sé que tú has de reinar y poseer el reino de Israel, 1SM024021 júrame por el Señor que no extinguirás mi descendencia después de mi muerte, ni borrarás mi nombre de la casa de mi padre. 1SM024022 Y júreselo David. Con lo cual se retiró Saúl a su casa; pero David y los suyos se subieron a lugares más seguros. 1SM025001 Habiendo muerto Samuel, congregóse todo Israel a celebrar con lágrimas sus exequias, y sepultáronle en el sepulcro de su casa, en Ramata. David entonces pasó al desierto de Faraón. 1SM025002 A la sazón, vivía un hombre en el desierto de Maón, que tenía su hacienda en el Carmelo; el cual era sumamente rico, y tenía tres mil ovejas y mil cabras. Cabalmente hacía entonces esquilar sus rebaños en el Carmelo. 1SM025003 Llamábase este hombre Nabal, y su esposa Abigail, mujer de gran prudencia y hermosura; al contrario, su marido era duro y muy perverso y malicioso, el cual descendía del linaje de Caleb. 1SM025004 Pues como David oyese en el desierto que Nabal estaba esquilando sus ovejas, 1SM025005 envió diez jóvenes, diciéndoles: Subid al Carmelo e id a casa de Nabal; saludadle de mi parte cortésmente, 1SM025006 y decidle: La paz o felicidad sea con mis hermanos y contigo, y paz a tu casa, y paz a cuantas cosas tienes. 1SM025007 He sabido que tus pastores que moraban con nosotros en el desierto hacen el esquileo; jamás les hemos molestado, nunca les ha faltado ninguna res del rebaño durante el tiempo que han andado con nosotros por el Carmelo. 1SM025008 Infórmate de tus criados y te lo dirán. Por lo tanto, hallen ahora gracia en tus ojos estos siervos tuyos, ya que venimos en tan alegre día; y danos a tus siervos y a David, tu hijo, lo que cómodanente pudieres. 1SM025009 Llegados, pues, los mozos de David, dijeron a Nabal todas estas cosas de parte de David, y aguardaron en silencio la respuesta: 1SM025010 Pero Nabal les respondió: ¿Quién es David? Y quién es el hijo de Isaí para que yo le ofrezca presentes? Cada día se ven más esclavos que andan fugitivos de sus amos. 1SM025011 ¿Conque tomaré yo mis panes y mi agua, y la carne de las reses que he hecho matar para mis esquiladores, y lo daré a unos hombres que no sé de dónde son? 1SM025012 Con esto volvieron los mozos de David a tomar su camino, y habiendo llegado, contáronle todo lo que Nabal había respondido. 1SM025013 Entonces David dijo a sus gentes: Tome cada cual su espada. Tomaron todos su espada, y David también la suya, y siguieron a David como unos cuatrocientos hombres, quedándose doscientos con el bagaje. 1SM025014 Entretanto uno de los criados de Nabal avisó a su mujer Abigail, diciendo: Mira que David acaba de enviar del desierto unos mensajeros para cumplimentar a nuestro amo; y él los ha desechado con desprecio. 1SM025015 Estos hombres han sido muy buenos para nosotros: ni nos han inquietado, ni jamás nos ha faltado nada, mientras hemos estado juntos en el desierto. 1SM025016 Antes bien, nos servían como de muro, tanto de día como de noche, todo el tiempo que anduvimos entre ellos apacentando los rebaños. 1SM025017 Por lo tanto, considera y reflexiona lo que debes hacer; porque está para caer sobre tu marido y tu casa una gran desgracia; ese amo nuestro es un hijo de Belial, tan violento que nadie se atreve a hablarle. 1SM025018 Cogió, pues, Abigail a toda prisa doscientos panes, y dos pellejos de vino, y cinco carneros cocidos. y cinco medidas de grano tostado, y cien atadijos de pasas, y doscientos panes de higos secos, y lo cargó todo sobre asnos. 1SM025019 Y dijo a sus criados: Id delante de mí, que yo iré siguiendo detrás de vosotros; mas no dijo nada a Nabal su marido. 1SM025020 Habiendo, pues, montado en un asno, y bajando a la falda del monte, encontró a David y a su gente que venían hacia ella; la cual fue luego a su encuentro. 1SM025021 Había dicho David por el camino: A la verdad que ha sido bien en vano guardar todo lo que éste tenía en el desierto, sin que se le haya perdido nada de cuanto poseía, pues me ha vuelto mal por bien. 1SM025022 Trate el Señor con toda su severidad a los enemigos de David, como juro yo que no dejaré de aquí a mañana cosa con vida de todo lo perteneciente a Nabal, ni piante ni mamante. 1SM025023 Abigail, empero, así que vio a David, bajó al instante del asno, e hízole una profunda reverencia, postrándose en tierra sobre su rostro. 1SM025024 Y echóse a sus pies, y díjole: Recaiga sobre mí, señor mío, el castigo de la iniquidad de mi marido; ruégote solamente que permitas a tu esclava el que te hable, y te dignes escuchar lo que va a decirte tu sierva. 1SM025025 No hagas, te ruego, mi señor y mi rey, ningún caso de la injusticia de Nabal; porque es un insensato, y su mismo nombre denota su necedad. Mas yo, sierva tuya, no vi a los criados que tú, señor mío, enviaste. 1SM025026 Ahora, pues, mi señor: vive Dios y vive tu alma, que el Señor es quien te ha estorbado, haciéndome salir a mí, el derramar sangre, y te ha detenido la mano. Que sean desde luego tan débiles como Nabal tus enemigos, y cuantos maquinan contra mí señor. 1SM025027 Mas ahora recibe, señor mío, este presente que te ofrece tu esclava, y repártelo, ¡oh mi señor!, entre la gente que traes contigo. 1SM025028 Perdónale, mi señor, a tu sierva, ese pecado de Nabal; porque seguramente edificará el Señor para ti una casa estable, por cuanto tú, dueño mío, peleas por el Señor; no se halle, pues, culpa ninguna en ti, en todos los días de tu vida. 1SM025029 Y si alguna vez se levantare algún hombre que te persiga y quisiere atentar a tu vida, será guardada el alma de mi señor y conservada como en un ramillete de vivientes en el seno del Señor Dios tuyo; y al contrario, el alma de tus enemigos será agitada y expelida de la vida como la piedra tirada con la honda. 1SM025030 Pues cuando el Señor te hubiere dado, ¡oh dueño mío!, todos los bienes que ha predicho en orden a ti, y te haya constituido caudillo sobre Israel, 1SM025031 no tendrás tú, señor mío, este pesar y remordimiento de corazón de haber derramado sangre inocente, y vengádote por ti mismo; y cuando Dios te habrá colmado de bienes, te acordarás, ¡oh mi señor!, de tu esclava. 1SM025032 Respondió David a Abigail: Bendito sea el Señor Dios de Israel por haberte hoy enviado a mi encuentro, y bendito sea el consejo que me has dado; 1SM025033 bendita seas tú que me has estorbado hoy el ir a derramar sangre, y a tomarme la venganza por mi mano. 1SM025034 Que si no, juro por el Señor Dios de Israel, el cual me ha prohibido hacerte daño, que a no venir tú tan presto a encontrarme, no hubiera quedado en casa de Nabal de hoy a mañana cosa con vida, ni siquiera un perro. 1SM025035 En fin, recibió David de su mano todo lo que había traído, y díjole: Vuélvete en paz a tu casa; ya ves que he hecho lo que me has pedido, y que lo he hecho por consideración a tu persona. 1SM025036 Con esto volvióse Abigail a Nabal, y hallóle celebrando en su casa un convite como banquete de rey; y el corazón de Nabal rebosaba de alegría, pues estaba atestado de vino; y así no le habló palabra chica ni grande hasta la mañana. 1SM025037 Pero al amanecer, cuando ya Nabal había digerido el vino, contóle su mujer lo que había pasado, y, al oírlo, se le heló interiormente el corazón y se quedó inmoble como una piedra. 1SM025038 Al cabo de diez días, el Señor hirió de muerte a Nabal, el cual en seguida murió. 1SM025039 Y habiendo sabido David la muerte de Nabal, dijo: Bendito sea el Señor que me ha vengado de la afrenta que me hizo Nabal, y que preservó a su siervo del mal que iba a hacer, y que ha hecho recaer la iniquidad de Nabal sobre su propia cabeza. Envió, después, David a tratar con Abigail sobre casarse con ella. 1SM025040 En consecuencia, los mensajeros de David fueron a verse con Abigail en el Carmelo, y la dijeron: David nos envía a ti para tomarte por esposa suya, 1SM025041 Y levantándose ella, se inclinó hasta la tierra, y dijo, como si hablase con David: Tu sierva se tendría por dichosa de ser empleada en lavar los pies de los criados de mi señor. 1SM025042 En seguida Abigail se dispuso luego, y montó en su asno, acompañándola cinco doncellas criadas suyas, y siguió a los enviados de David, con el cual se desposó. 1SM025043 Además de ella, tomó David a Aquinoam, natural de Jezrael, y ambas fueron esposas suyas. 1SM025044 Pero ya antes Saúl había dado su hija Micol, mujer de David, a Falti, hijo de Lais, el cual era de Gallim. 1SM026001 Y otra vez vinieron los cifeos a Gabaa, y dijeron a Saúl: Mira que David está escondido en el cerro de Haquila, enfrente del desierto. 1SM026002 Con esto Saúl se puso en camino, y, acompañado de tres mil nombres escogidos de todo Israel, bajó al desierto de Cif para ir en busca de David. 1SM026003 Acampó Saúl en Gabaa, o cerro de Haquila, frente por frente del desierto sobre el camino; y estaba David en dicho desierto. Mas oyendo que Saúl había venido allí en su seguimiento, 1SM026004 envió espías, y supo con toda certeza que realmente había venido. 1SM026005 Y partiendo en secreto fue al lugar donde estaba Saúl; y observando el sitio en que domían Saúl y Abner, hijo de Ner, general de sus tropas, y que Saúl dormía en su tienda, y alrededor de él toda la demás gente, 1SM026006 dijo David al heteo Aquimelec, y a Abisaí, hijo de Sarvia, hermano de Joab: ¿Quién quiere venir conmigo al campamento de Saúl? Respondió Abisaí: Yo iré contigo. 1SM026007 Fueron, pues, David y Abisaí de noche al campamento, y hallaron a Saúl echado y durmiendo en su tienda y la lanza hincada en tierra a su cabecera; y a Abner con la tropa, que dormía alrededor de Saúl. 1SM026008 Dijo entonces Abisaí a David: Dios ha puesto hoy en tus manos a tu enemigo; ahora, pues, voy a clavarle en tierra de una sola lanzada, y no será menester repetir el golpe. 1SM026009 Mas David dijo a Abisaí: De ningún modo le mates; porque, ¿quién podrá alzar, sin pecado, su mano contra el ungido del Señor? 1SM026010 Y añadió: Vive Dios que a no ser que el Señor le mate, o llegue el día de su muerte natural, o perezca en alguna batalla, no morirá; 1SM026011 líbreme Dios de levantar mi mano contra el ungido del Señor. Ahora, pues, toma la lanza que tiene a su cabecera, y el jarro de agua, y vamonos. 1SM026012 Llevóse, pues, David la lanza y el jarro de agua que tenía Saúl junto a su cabeza, y se fueron, sin que hubiere persona que los viese, ni sintiese, o que despertase, sino que todos dormían poseídos de un sueño profundo que el Señor les había enviado. 1SM026013 David, pues, cuando hubo pasado a la parte opuesta, paróse a lo lejos en lo alto del cerro, habiendo entre él y el campamento enemigo un gran trecho; 1SM026014 y llamó desde allí en alta voz a la gente de Saúl, y a Abner, hijo de Ner, diciéndoles: Qué, ¿no me respondes, oh Abner? Y respondiendo éste, dijo: ¿Quién eres tú, que tanto gritas e incomodas al rey? 1SM026015 Replicóle David: ¿No eres tú un hombre de valor? ¿Y hay otro ninguno en Israel que te iguale? Pues, ¿cómo no has guardado al rey tu señor, puesto que ha entrado uno de la plebe con intento de matar a tu señor el rey? 1SM026016 No es esto cumplir bien tu obligación. Vive Dios, que sois reos de muerte vosotros que no habéis guardado a vuestro dueño, el ungido del Señor; y si no, ved ahora dónde está la lanza del rey y el jarro del agua que tenía a su cabeza. 1SM026017 Reconoció Saúl la voz de David y le dijo: ¿No es esta tu voz, hijo mío David? Y David respondió: Mi voz es, señor; 1SM026018 añadiendo: ¿Por qué motivo persigue mi señor a este tu siervo? ¿Qué le he hecho yo o qué delito he cometido? 1SM026019 Oye, pues, ahora, te ruego, mi rey y señor, las palabras de tu siervo: si es el Señor el que te incita contra mí, acepte el olor de este sacrificio; mas si son los hombres, malditos sean en la presencia del Señor, ellos que hoy me han desterrado para que no habite en la heredad del Señor, como quien dice: Anda y sirve a dioses ajenos. 1SM026020 Ahora, pues, no sea derramada en tierra mi sangre en presencia del Señor. ¿Y era necesario que el rey de Israel saliese a campaña para perseguir a una pulga, o así como se va tras de una perdiz en los montes? 1SM026021 Y dijo Saúl: He pecado; vuelve, hijo mío David, que no te haré mal ninguno de este día en adelante, visto que has mirado hoy con tanto aprecio mi vida: que bien se ve cuan neciamente he procedido, y que he sido mal informado en muchísimas cosas. 1SM026022 A lo que respondiendo David, dijo: Aquí está la lanza del rey: pase acá uno de sus criados y llévela. 1SM026023 Por lo demás, el Señor remunerará a cada cual conforme a su justicia y fidelidad: Él te había entregado hoy en mi poder, y no he querido levantar mi mano contra el ungido del Señor. 1SM026024 Pues así como tu vida ha sido hoy tan estimada en mis ojos, así lo sea también la mía en los ojos del Señor, y me libre Él de cualquiera tribulación. 1SM026025 Por último, dijo Saúl a David: Bendito seas, hijo mío David; sin duda ejecutarás tú grandes empresas, y será grande tu poder. Después David se fue por su camino y Saúl volvióse a su casa. 1SM027001 Mas David dijo en su corazón: Al fin algún día vendré a caer en manos de Saúl. ¿No me vale más huir y ponerme en salvo en tierra de filisteos, para que Saúl pierda las esperanzas y cese de andarme buscando por todo el país de Israel? Huiré, pues, de sus dominios. 1SM027002 Y así, David partió con sus seiscientos hombres, y fuese a Aquis, rey de Get, hijo de Maoc. 1SM027003 Y habitó David en Get con Aquis, él y los suyos, cada cual con su familia, y David con sus dos esposas, Aquinoam, jezraelita, y Abigail, viuda de Nabal, del Carmelo. 1SM027004 Dieron noticia a Saúl de que David había huido a Get, con lo que no cuidó más de buscarle. 1SM027005 David, empero, dijo a Aquis: Si he hallado gracia en tus ojos, déseme habitación en una de las ciudades de este país para morar allí, pues, ¿a qué fin ha de residir tu siervo en la corte del rey? 1SM027006 Con esto le dio Aquis en aquel día la ciudad de Siceleg, por cuya causa vino a ser Siceleg de los reyes de Judá, los cuales la poseen hasta el día presente. 1SM027007 El tiempo que vivió David en tierra de filisteos, fue de cuatro meses. 1SM027008 Durante los cuales salía David con su gente a hacer correrías sobre Gesuri y Gerci, y sobre los amalecitas; porque antiguamente estaban habitadas aquellas aldeas por estos pueblos desde el camino del Sur hasta la tierra de Egipto. 1SM027009 Y asolaba David todo el país, sin dejar con vida hombre ni mujer; y llevándose ovejas y bueyes, y asnos, y camellos, y ropas, daba la vuelta y se presentaba a Aquis. 1SM027010 Y decíale Aquis: ¿Hacia qué lado te has dejado caer hoy? David le respondía: Hacia la parte meridional de Judá; o bien hacia el mediodía de Jerameel; o hacia el mediodía de Cení. 1SM027011 No dejaba David hombre ni mujer con vida, ni conducía prisionero ninguno a Get: No sea acaso, decía, que hablen contra nosotros. Ésta era la conducta de David y éste era su proceder todo el tiempo que habitó en el país de los filisteos. 1SM027012 Por donde Aquis vino a fiarse de David, diciendo entre sí: Muchos son los daños que ha hecho contra su pueblo de Israel, y por lo mismo se quedará ya para siempre adicto a mi servicio. 1SM028001 Acaeció en aquellos días que los filísteos reunieron sus fuerzas para prepararse a la guerra contra Israel, y dijo Aquis a David: Ten entendido que has de salir conmigo a campaña tú y los tuyos. 1SM028002 Respondió David: Ahora has de ver lo que hará tu siervo. Y yo, díjole Aquis, te confiaré para siempre la guarda de mi persona. 1SM028003 Había ya muerto Samuel y lloradóle todo Israel amargamente, habiéndole sepultado en Ramata, su patria, Saúl, por consejo suyo, había limpiado el reino de magos y adivinos. 1SM028004 Reunidos, pues, los filisteos, fueron y plantaron sus reales en Sunan. Asimismo Saúl, juntando todas las tropas de Israel, fue a Gelboé. 1SM028005 Y visto el grande ejército de los filisteos, temió y desmayó su corazón sobremanera. 1SM028006 Consultó, pues, al Señor, mas no le respondió, ni por sueños, ni por los sacerotes, ni por los profetas. 1SM028007 Dijo entonces Saúl a sus criados: Buscadme una mujer que tenga espíritu de Pitón, e iré a encontrarla y a consultar al espíritu por medio de ella. Respondiéronle sus criados: En Endor hay una mujer que tiene espíritu pitónico. 1SM028008 Disfrazóse luego, y mudado el traje se puso en camino, acompañado de dos hombres. Fue de noche a casa de la mujer, y díjole: Adivíname por el espíritu de Pitón, y hazme aparecer quien yo te dijere. 1SM028009 Respondióle la mujer: Sabes bien cuanto ha hecho Saúl por extirpar de todo el país los magos y adivinos, ¿por qué, vienes a armarme un lazo para hacerme perder la vida? 1SM028010 Mas Saúl le juró por el Señor, diciendo: Vive Dios que no te vendrá por esto mal ninguno. 1SM028011 Díjole entonces la mujer: ¿Quién es el que debo hacerte aparecer? Respondióle: Haz que se me aparezca Samuel. 1SM028012 Mas luego que la mujer vio a Samuel, exclamó a grandes gritos diciendo a Saúl: ¿Por qué me has engañado? Tú eres Saúl. 1SM028013 Y díjole el rey: no temas, ¿qué es lo que has visto? He visto, respondió la mujer, como un dios que salía de dentro de la tierra. 1SM028014 Replicóle Saúl: ¿Qué figura tiene? La de un varón anciano, dijo ella, cubierto con un manto. Reconoció, pues, Saúl, que era Samuel y le hizo una profunda reverencia, postrándose en tierra sobre su rostro. 1SM028015 Pero Samuel dijo a Saúl: ¿Por qué has turbado mi reposo, haciéndome levantar? Respondió Saúl: Me veo en un estrechísimo apuro: los filisteos me han movido guerra, y Dios se ha retirado de mí, y no ha querido responderme, ni por medio de los profetas, ni por sueños; por esta razón te he llamado, a fin de que me declares lo que debo hacer. 1SM028016 Respondióle Samuel: ¿A qué viene el consultar conmigo, cuando el Señor te ha desamparado y pasádose a tu rival? 1SM028017 Porque el Señor te tratará como te predije yo de su parte. Arrancará de tus manos el reino, y le dará a tu prójimo, a David tu yerno, 1SM028018 por cuanto no obedeciste a la voz del Señor ni quisiste hacer lo que la indignación de su ira exigía contra los amalecitas; por esto el Señor ha hecho contigo lo que estás padeciendo hoy día. 1SM028019 Y, además, el Señor te entregará a ti y a Israel en manos de los filisteos. Mañana tú y tus hijos estaréis conmigo; y también el campamento de Israel lo abandonará el Señor, quedando en poder de los filisteos. 1SM028020 Cayó Saúl al instante tendido en tierra, despavorido al oír las palabras de Samuel, y estaba además falto de fuerzas, a causa de no haber comido en todo el día. 1SM028021 Mas aquella mujer entró donde estaba Saúl, que se hallaba sumamente conturbado, diciéndole: Bien ves que tu esclava te ha obedecido y que he expuesto mi vida y dado crédito a lo que me has dicho; 1SM028022 ahora, pues, escucha tú también la voz de tu sierva y permite que te ponga delante un bocado de pan, para que comiendo recobres las fuerzas y puedas hacer tu viaje. 1SM028023 Pero Saúl lo rehusó y le dijo: No comeré. Con todo, sus criados y la mujer le instaron a ello, y al cabo, rendido a sus ruegos, se levantó del suelo y sentóse sobre una cama o tarima. 1SM028024 Tenía la mujer en casa un ternero cebado y fue corriendo y le mató; y tomando harina la amasó, y coció unos panes sin levadura; 1SM028025 y lo presentó todo delante de Saúl y sus criados. Así que hubieron comido, partieron, y anduvieron toda aquella noche. 1SM029001 Entretanto se reunieron en Afec todas las tropas de los filisteos; e Israel por su parte, acampó junto a la fuente que había en Jezrael. 1SM029002 Los sátrapas de los filisteos marchaban al frente de sus tropas, divididas en compañías de a ciento, y regimientos de a mil hombres: mas David y su gente iban en la retaguardia con Aquis. 1SM029003 Y dijeron los príncipes de los filisteos a Aquis: ¿Qué hacen aquí esos hebreos? Respondióles Aquis: Pues qué, ¿no conocéis a David que sirvió a Saúl, rey de Israel, y está en mi compañía días hace, o ya años, sin que haya yo tenido queja de él desde el día en que se pasó a mí hasta el presente? 1SM029004 Mas los príncipes de los filisteos se irritaron contra él y le dijeron: Retírese ese hombre, y estése quedo allá en el lugar que le señalaste, y no venga con nosotros a la guerra, no sea que comenzado el combate se revuelva contra nosotros: porque ¿de qué otro modo podrá aplacar a su señor, sino a costa de nuestras cabezas?. 1SM029005 ¿No es éste aquel David de quien cantaban a coros en las danzas: Saúl mató a mil y David mató a diez mil? 1SM029006 Llamó, pues, Aquis a David y díjole: Vive el Señor que tú eres justo y bueno en mis ojos; y que es tal la conducta que has observado en el ejército, que no he hallado en ti falta ninguna desde el día en que te pasaste a mí hasta el presente; pero no eres del gusto de los sátrapas. 1SM029007 Vuélvete, pues, y vete en paz, por no incomodar con tu vista a los sátrapas filisteos. 1SM029008 Dijo David a Aquis: Pues, ¿qué he hecho yo y qué has visto en mí, siervo tuyo, desde el día en que me presenté a ti hasta hoy, para que no pueda yo ir a pelear contra los enemigos del rey mi señor? 1SM029009 Respondió Aquis, y le dijo: En cuanto a mí, bien sé que me eres fiel, y téngote por un ángel de Dios; pero los príncipes de los filisteos han dicho resueltamente: No ha de ir con nosotros al combate. 1SM029010 Por lo tanto, disponte para mañana por la mañana con todos los siervos de tu señor, que contigo vinieron, y lavantándoos antes de amanecer, al romper el alba, poneos en camino. 1SM029011 Levantóse, pues, David con su gente siendo aún de noche, para partir por la mañana y volverse al país de los filisteos. Mas los filisteos subieron a Jezrael. 1SM030001 David y los suyos llegaron a los tres días a Siceleg, cuando ya los amalecitas habían hecho una incursión por la parte del Mediodía hasta Siceleg, y tomado esta ciudad, y pegádola fuego, 1SM030002 llevándose cautivas las mujeres, sin dejar persona chica ni grande. No mataron a nadie, sino que se los llevaron a todos consigo y se marcharon. 1SM030003 Pues como David y su gente llegasen a la ciudad y la encontrasen abrasada, y que sus mujeres, sus hijos e hijas habían sido llevadas cautivas, 1SM030004 levantaron el grito David y la tropa que le acompañaba, deshechos en lágrimas hasta más no poder. 1SM030005 También las dos esposas de David, Aquinoam, la jezraelita, y Abigail, la viuda de Nabal del Carmelo, habían sido hechas cautivas. 1SM030006 Y hallóse David en extremo angustiado: porque el pueblo trataba de apedrearle estando todos poseídos de la mayor amargura por la pérdida de sus hijos e hijas. Pero David puso su confianza, y se confortó con el Señor Dios suyo. 1SM030007 Y dijo a Abiatar, Sumo Sacerdote, hijo de Aquimelec: Traeme el efod, y Abiatar trajo a David el efod. 1SM030008 Y revestido de él Abiatar, consultó David al Señor, diciendo: ¿Perseguiré a estos salteadores, y los alcanzaré o no? Respondió el Señor: Persigúelos; porque, sin duda, los alcanzarás, y les quitarás la presa. 1SM030009 Partió, pues, David con los seiscientos hombres que le seguían, y anduvieron hasta el torrente Besor: donde algunos de puro cansados, se detuvieron. 1SM030010 Mas David tiró adelante con cuatrocientos hombres; quedándose atrás doscientos que por el cansancio no pudieron pasar el torrente Besor. 1SM030011 Y hallaron en el campo un hombre egipcio, el cuál llevaron a David; y diéronle pan para que comiese y agua para que aliviase su sed, 1SM030012 y, además, un pedazo de pan de higos secos y dos cuelgas de pasas. Comido que hubo, se le volvió el alma al cuerpo, y recobró el aliento; pues no había probado pan ni bebido agua en tres días y tres noches. 1SM030013 Díjole entonces David: ¿De quién eres tú? ¿De dónde vienes y adonde vas? El cual respondió: Yo soy un esclavo egipcio, que sirvo a un amalecita. Mi amo me ha dejado abandonado, porque caí enfermo anteayer. 1SM030014 Pues nosotros hicimos una incursión hacia la parte meridional de Careti y hacia Judá, y al mediodía de Caleb, y hemos quemado a Siceleg. 1SM030015 Díjole David: ¿Y podrás tú guiarme adonde está esa gente? Respondió el egipcio: Júrame por el nombre de Dios que no me matarás, ni me entregarás en manos de mi amo, y yo te llevaré a donde está aquella tropa. Juróselo David. 1SM030016 Guiados, pues, por el egipcio, he aquí que hallan a los amalecitas tendidos en tierra por todo el campo, comiendo y bebiendo, y como celebrando un día de fiesta por todo el botín y despojos que habían tomado en el país de los filisteos y en el de Judá. 1SM030017 Cargó, David, sobre ellos, y los siguió acuchillando desde aquella tarde hasta la tarde del día siguiente; y no escapó nadie, excepto cuatrocientos jóvenes que, montando en sus camellos, echaron a huir. 1SM030018 De esta manera recobró David todo cuanto habían pillado los amalecitas, y libertó a sus dos esposas. 1SM030019 Ninguna cosa se perdió: desde el más chico hasta el más grande, tanto hijos como hijas, los despojos y, en fin, cuanto habían quitado, otro tanto recuperó David. 1SM030020 Y además se llevó todos los rebaños y ganados mayores, e hizo que fuesen delante de él; por lo que decían sus gentes: Ésta es la presa que ha hecho David. 1SM030021 Llegado David adonde estaban los doscientos hombres, que de puro cansadas se habían quedado y no habían podido seguirle, y a los cuales dejó mandado que descansaran en la orilla del torrente Besor, salieron éstos a recibirle a él y a la tropa que le acompañaba, Luego que David estuvo cerca de ellos, los saludó con agrado. 1SM030022 Mas todos los malignos y perversos de entre los hombres que habían ido con David comenzaron a decir: Ya que no vinieron con nosotros, no les daremos cosa alguna de la presa que hemos recobrado; conténtese cada uno con que se le vuelva a su mujer e hijos; y recibido esto, vayase. 1SM030023 David, empero, dijo: No habéis de disponer así, hermanos míos, de las cosas que nos ha dado el Señor; ya que Él nos ha protegido y entregado en nuestras manos a los salteadores que se arrojaron contra nosotros, y nos saquearon. 1SM030024 Nadie habrá que apruebe vuestra proposición; porque igual parte deberá caber al que se halló en el combate, y al que se quedó guardando el bagaje; y así la partición deberá ser igual. 1SM030025 Y desde aquel día en adelante fue éste un punto ya decidido y establecido, y una ley en Israel hasta el presente. 1SM030026 Llegó, en fin, David a Siceleg, y envió dones de la presa a los ancianos de Judá, parientes suyos, diciendo: Recibid esa expresión de lo que hemos tomado a los enemigos del Señor, 1SM030027 Y envió también a los que vivían en Betel y en Ramot hacia el Mediodía, a los de Jeter, 1SM030028 Aroer, y Sefamot, y Estamo, 1SM030029 a los de Racal, y de las ciudades de Jerameel, y de las de Cení, 1SM030030 y a los de Arama, y del lago de Asan, y a los de Atac, 1SM030031 de Hebrón y, finalmente, a los demás que habitaban en aquellos lugares en los cuales David y su gente habían estado algún tiempo alojados. 1SM031001 Entretanto se dio la batalla entre los filisteos e israelitas; y volvieron éstos las espaldas a los filisteos, y quedaron muchos de Israel muertos en el monte Gelboé. 1SM031002 Y los filisteos arrojáronse sobre Saúl y sus hijos, y mataron a Jonatás, y Abinadab, y Melquisua, hijos de Saúl; 1SM031003 y toda la fuerza del combate vino a descargar sobre Saúl, a quien alcanzaron los flecheros e hirieron gravemente. 1SM031004 Dijo entonces Saúl a su escudero: Desenvaina tu espada y quítame la vida; porque no lleguen estos incircuncisos y me maten, mofándose de mi. Mas su escudero no quiso hacerlo, sobrecogido de un sumo terror. Con esto Saúl desenvainó su espada y arrojóse sobre ella. 1SM031005 Al ver el escudero muerto a Saúl, echóse él mismo también sobre su espada, y murió junto a él. 1SM031006 Así murió Saúl en aquel día y con él tres de sus hijos, su escudero y cuantos se hallaban cerca de su persona. 1SM031007 Y viendo los israelitas que vivían en la otra parte del valle y pasado el Jordán, que habían huido los soldados de Israel, y muerto Saúl y sus hijos, abandonaron sus ciudades y escaparon; y vinieron los filisteos y se alojaron en ellas. 1SM031008 Amanecido el día siguiente, fueron los filisteos a despojar los muertos, entre los cuales hallaron a Saúl y a sus tres hijos tendidos sobre el monte Gelboé. 1SM031009 Cortáronle a Saúl la cabeza, y le despojaron de sus armas; y enviaron la noticia por todo el país de los filisteos, para que se publicara la victoria en el templo de los ídolos, y en los pueblos. 1SM031010 Colocaron las armas de Saúl en el templo de Astarot, y colgaron su cuerpo en uno de los muros de Betsán. 1SM031011 Pero los moradores de Jabes Galaad, oído lo que los filisteos habían hecho con Saúl, 1SM031012 salieron todos los más esforzados, anduvieron toda la noche, y quitaron el cadáver de Saúl y los cadáveres de sus hijos del muro de Betsán; y volviéndose a Jabes Galaad, allí los quemaron; 1SM031013 y recogidos sus huesos, los sepultaron en el bosque de Jabes, ayunando siete días.
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